Puiggr¨®s
Seg¨²n ¨¦l mismo apunta en su biograf¨ªa, Pere Puiggr¨®s inici¨® hace ocho a?os estudios y experimentaciones sobre la percepci¨®n visual. Tales estudios tal vez justifiquen las caracter¨ªsticas que, en una primera aproximaci¨®n a sus trabajos, m¨¢s llaman la atenci¨®n.
Destacar¨ªa, en primer lugar, una sorpresa: el tama?o de los grabados expuestos; y ello por cuanto una labor, basada fundamentalmente en el color y en el trazo parece instalarse ¨®ptimamente, desde los a?os cincuenta, en las grandes superficies, en aquellas dimensiones que multiplicando varias veces la longitud de brazos y la estatura del pintor, le permiten desplazarse por su propia pintura dot¨¢ndola de una identidad y de un car¨¢cter de objeto ajeno a ¨¦l, imposible de lograr con tama?os menores (a¨²n cuando esto, aunque cierto, no deja de ser una falacia; no siempre los cuadros americanos son tan grandes, casi nunca tan inmensos, aun que as¨ª nos lo parezcan). Digo sorpresa por cuanto su tama?o es reducido —excepto en alguna ocasi¨®n— y, sin embargo, su imagen nos aparece dotada de un dinamismo ¨²nicamente apreciable en aquellos casos, privilegiados casos, en que se ha construido con exactitud un espacio pict¨®rico propio, intenso y fuerte.
Puiggr¨®s
Galer¨ªa Buades. C/ Claudio Coello, 43.
Taller Grupo 15
M¨²sica: Michel Legrand. Int¨¦rpretes: Alan Bates, Dominique Sanda, Michel Auclair, Evans Evans y Lea Massari. Inglesa, 1972. Local de estreno: Carlos III.
Fortuna, 7
Pinchazo y estocada (palmas, pitos y saludos). Paco Aguilar: Pinchazo, otro m¨¢s hondo y desprendido y descabello (silencio). Estocada y descabello (palmas). PepeOrtiz salud¨® montera en mano tras dos buenos pares al sexto. Mariano Gallardo estuvo valiente y eficaz en la brega.
El espacio pict¨®rico es, a mi entender, un problema de tensiones (a¨²n cuando en su origen se presente, primordialmente, como un problema de medida que afecta por tanto a las dimensiones); tanto el espacio pintado como las relaciones entre las zonas pintadas, las relaciones entre las superposiciones e incluso, tambi¨¦n, el espacio total en que se desenvuelve el cuadro, mantienen un equilibrio no siempre est¨¢tico, sino que en muchos casos se comporta como si de una reacci¨®n qu¨ªmica se tratara, desplaz¨¢ndose en uno u otro sentido, d¨¢ndose por tanto una movilidad del cuadro completo, un equilibrio tenso.
Lo anterior me parece una propiedad esencial de los grabados de Puiggr¨®s, o al menos de buen n¨²mero de ellos que mantienen un equilibrio inestable; por un lado, se establecen los fondos, generalmente difusos, sin car¨¢cter alguno de dureza, sino que, antes bien, parecen eludirla, algodonosos, y por otro, un trazo de l¨ªneas cuya consistencia es pareja a la descrita para el fondo y que, sin embargo, se comportan intensific¨¢ndose conjuntamente.
El mismo fen¨®meno encontramos en las relaciones de color; los fondos son generalmente difusos, casi nunca utiliza Puiggr¨®s colores puros o tonos intensos, los trazos o l¨ªneas que los atraviesan se constituyen con la misma escala de colores y, sin embargo, en su relaci¨®n se intensifican rec¨ªprocamente hasta generar un espacio de color que sin pertenecer propiamente a ninguno de los dos, s¨ª conforma el grabado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.