"La mejor arma contra el c¨¢ncer abandonar el tabaco"
Seg¨²n el cirujano brit¨¢nico Roger Abbey-Smith, el aumento en la incidencia de c¨¢ncer de pulm¨®n ?es debido, fundamentalmente, al consumo de tabaco y a la contaminaci¨®n del aire, pero todav¨ªa no est¨¢ suficientemente explicado el que no se diagnosticara tanto en los a?os treinta?.?Durante la primera guerra mundial se fum¨® much¨ªsimo -afirma- y, a consecuencia de ello, en los a?os treinta, las personas con edad superior a los 45 a?os comenzaron a sufrir c¨¢ncer de pulm¨®n. Ahora est¨¢ confirmado que el fumar tabaco es la causa principal del c¨¢ncer de pulm¨®n. No hay duda de ello. ?
Ante la evidencia del hecho de que no todas las personas que fuman adquieren c¨¢ncer de pulm¨®n, el cirujano ingl¨¦s lo explica as¨ª: ?Todo el mundo que fuma much¨ªsimo morir¨ªa de c¨¢ncer de pulm¨®n si no muriese de otras causas?. Es decir, el deterioro del aparato respiratorio que desencadena el h¨¢bito de fumar tiene un ritmo que es diferente, seg¨²n las personas. Mientras unas adquieren un c¨¢ncer en cuatro a?os, otras lo adquirir¨ªan en cuarenta o sesenta. ?Es muy peligroso -dice- fumar por encima de cuarenta cigarrillos al d¨ªa, aunque a partir de diez ya es peligroso, y a partir de sesenta existe certeza de la aparici¨®n de c¨¢ncer de pulm¨®n. Adem¨¢s de ello, se presentan otros efectos a consecuencia del tabaco.- bronquitis cr¨®nica y enfermedades coronarias, todo ello completamente comprobado?.
Respuesta de la mucosa
Pero ?qu¨¦ es el c¨¢ncer de pulm¨®n? Se trata, seg¨²n los especialistas, de una respuesta del organismo, concretamente de la mucosa respiratoria, al efecto irritante de la nicotina. La mucosa del ¨¢rbol respiratorio tiene una funci¨®n protectora. Est¨¢ impregnada de un moco donde se disuelven todas las sustancias. Tambi¨¦n est¨¢ dotada de unas pesta?as vibr¨¢tiles que ejercen una funci¨®n de limpieza. Pues bien, cuando ese epitelio es agredido responde ala agresi¨®n cambiando su estructura. ?Estos trastornos premalignos -explica el doctor Abbey-Smith- est¨¢n presentes en la mucosa de todos los fumadores importantes. Pero mientras unos arrastran esa situaci¨®n de premalignidad hasta m¨¢s de treinta a?os, otros contraen un c¨¢ncer de pulm¨®n en muy poco tiempo. No sabemos por qu¨¦. ?
Hay, sin embargo, otro hecho verificado: la repercusi¨®n del alquitr¨¢n del tabaco sobre el proceso de premalignidad. ?Esto est¨¢ perfectamente comprobado -a?ade- Tanto es as¨ª que en Inglaterra la gente s¨®lo fuma tabaco con muy bajo contenido de alquitr¨¢n. La evidencia es tan clara que los impuestos sobre el tabaco son mayores en los tabacos con m¨¢s alto contenido de alquitr¨¢n.?
Peor que el alcohol
Compara el especialista brit¨¢nico, a continuaci¨®n, la incidencia del h¨¢bito de fumar sobre la salud humana en relaci¨®n con otros h¨¢bitos. Respecto a las drogas blandas -marihuana, hach¨ªs, etc¨¦tera- asegura que no ha investigado a fondo la incidencia de ese tipo de drogas, aunque parece evidente su repercusi¨®n sobre el cerebro. Y respecto a esa otra droga vieja, habitual en multitud de culturas, el alcohol, considera que ?mientras el alcohol, pese a su peligrosidad, cl¨ªnicamente est¨¢ permitido cuando se usa con moderaci¨®n, con el tabaco, eso no ocurre; es decir, es peligroso siempre?.
Se?ala que en el Reino Unido, ?duranie el a?o 1977, murieron de c¨¢ncer de pulm¨®n 31.000 personas, lo que supone la m¨¢s alta cifra de mortalidad que nunca se haya registrado en nuestro pa¨ªs. De todas maneras, el h¨¢bito de fumar est¨¢ disminuyendo en Inglaterra, sobre todo en la gente joven. Pero el da?o, en las viejas generaciones, ya est¨¢ hecho?.
La cirug¨ªa es la alternativa m¨¢s eficaz entre todas las terap¨¦uticas del c¨¢ncer de pulm¨®n. El cirujano brit¨¢nico explica as¨ª su actitud ante el tema: ?Ante un c¨¢ncer de pulm¨®n, si es posible, yo siempre procedo a la extirpaci¨®n. Pero esto s¨®lo es factible en uno de cada siete casos de los que acuden al doctor, seg¨²n constato en mi pr¨¢ctica m¨¦dica. Pero el mejor m¨¦todo para luchar contra esta enfermedad es el profil¨¢ctico, es decir, dejar de fumar. No se encuentra con fr¨¦cuencia un c¨¢ncer de pulm¨®n en una persona que no haya fumado. ?
?Yo he recogido noventa casos de lo que llamo segundo-primitivo -contin¨²a-. En noventa casos, operados previamente, ha vuelto a surgir un c¨¢ncer de pulm¨®n, aunque diferente. Yo puedo anticipar cu¨¢les de mis enfermos operados tendr¨¢n un segundo o un tercer c¨¢ncer.?
El doctor Abbey-Smith prefiere la cirug¨ªa en el tratamiento del c¨¢ncer de pulm¨®n, pero no desecha la radioterapia cuando ello es posible. ?No ofrece tan buenos resultados c¨®mo la cirug¨ªa -dice -, aunque es un paliativo. Con la cirug¨ªa se puede lograr que el 33 % de los casos operados logre una supervivencia de m¨¢s de cinco
(Pasa a lap¨¢g. 35) (Viene de la p¨¢g. 34)
a?os. Pero todo es muy costoso. Lo menos caro. ser¨ªa la profilaxis, no fumar. Lo m¨¢s costoso es el conjunto de planes de investigaci¨®n, que requieren cifras astron¨®micas para combatirlo.?
?Desde hace cincuenta a?os -contin¨²a- se sigue una l¨ªnea experimental que ha dado buenos resultados en la investigaci¨®n de algunos procesos malignos como la leucemia. Pero ninguna nueva modalidad terap¨¦utica ha podido desarrollarse que permita que aquellos enfermos que hoy d¨ªa son dados de alta del hospital, tras la extirpaci¨®n de un tumor de pulm¨®n, tengan posibilidades de supervivencia superiores a las de hace treinta a?os. No ha habido cambio alguno en la situaci¨®n de la investigaci¨®n. Seguimos sin disponer de una terap¨¦utica que sustituya a la cirug¨ªa. ?
Sin embargo, existen diferentes posturas, como sucede siempre en el ¨¢mbito del que hacer cient¨ªfico. Mientras unos especialistas no se muestran proclives a la intervenci¨®n quir¨²rgica, otros la preconizan de un modo especial. En el caso concreto del doctor Abbey-Smith, y de buena parte de sus amigos espa?oles, consideran que ?cuando se abre un torax para extirpar un tumor, en el 98% de los casos la posibilidad de curaci¨®n est¨¢ en la cirug¨ªa?. Un punto de vista no compartido por todos los cirujanos.
Y, para concluir, en otro orden de cosas, una pregunta obligada a quienes son especialistas en el aparato respiratorio humano. ?C¨®mo respiramos y c¨®mo debi¨¦ramos respirar? ?Respiramos incorrectamente -explica el cirujano brit¨¢nico- Todos mejorar¨ªamos nuestro estado de salud si respir¨¢semos mejor. No hacemos suficiente ejercicio f¨ªsico, por lo cual, la respiraci¨®n no es profunda, sino superficial. Habr¨ªa que encontrar m¨¢s tiempo para relajarse y pararnos a respirar. Si la pared del torax no se mueve bien, utilizando adecuadamente los m¨²sculos intercostales, los ¨®rganos subyacentes, los pulmones, no son adecuadamente utilizados, con lo que la funci¨®n global del organismo se resiente.
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