Brutalidad sectaria

El pasado 25 de mayo, D¨ªa del Amor Fraterno, un grupo de incontrolados provistos de bates, cadenas y navajas, irrumpi¨® en un bar sito en la calle de Guzm¨¢n el Bueno, 33. Los tres j¨®venes que formaban el comando, tras atacar brutalmente a un muchacho, le asestaron varias pu?aladas, d¨¢ndose despu¨¦s a la fuga en una moto Vespa con s¨ªdecar. La total indiferencia de los que all¨ª se encontraban permiti¨® que los delincuentes camparan por sus aires y se marcharan tranquilamente. Solamente una ni?a de corta edad se preocup¨® de tomar la matr¨ªcula del veh¨ªculo.Poco despu¨¦s el agredido fue conducido a una cl¨ªnica cercana, declarando a los curiosos que se trataba de unos incontrolados que hab¨ªan descargado su ira contra ¨¦l por haberse atrevido a mirarles, sin mediar palabra, cuando ¨¦stos circulaban lanzando consignas y saludando a la romana.

Este signo de violencia desatada y brutalidad sectarista no tendr¨ªa mayor consideraci¨®n si hubiera sido un hecho aislado, pero tras los m¨²ltiples sucesos de este tipo el ciudadano siente miedo por su propia seguridad.

Y lo tiene por la falta de seguridad que le puede brindar en estos momentos la fuerza p¨²blica, unas fuerzas del pueblo que deben de velar por sus componentes, ante la violencia extremista, de uno y otro signo, que s¨®lo pretende sembrar el terror entre la inmensa mayor¨ªa de espa?oles.