Rabat pide armas a EEUU para luchar contra el Frente Polisario
A cambio de su ?cooperaci¨®n? con las potencias occidentales en la crisis de Zaire, el rey de Marruecos, Hassan II, quiere que Estados Unidos le suministre material b¨¦lico antiguerrilla para combatir al Frente Polisario, seg¨²n informaciones aparecidas ayer en la prensa norteamericana.Unos 1.600 soldados marroqu¨ªes se encuentran ya en la provincia zaire?a de Shaba para relevar a las tropas franco-belgas que intervinieron contra los rebeldes katangue?os. Los soldados marroqu¨ªes llegaron a bordo de aviones C-141 nortearnericanos, que previamente hab¨ªan trasladado al grueso de las fuerzas legionarias francesas.
Art¨ªculos publicados en los diarios New York Times y Christian Science Monitor, de Boston, coinciden en se?alar que Hassan II pretende que la Administraci¨®n Carter presione al Congreso para que d¨¦ luz verde a una petici¨®n rnarroqu¨ª de equipo militar valorada en cien millones de d¨®lares y destinada exclusivamente a la lucha contra las guerrillas del Frente Polisarlo en el antiguo Sahara espa?ol.
El pedido militar hecho por Rabat consiste en veinticuatro aviones de reconocimiento armados, del tipo OV- 10, Bronco, que fue empleado por el Ej¨¦rcito norteamericano en Vietnam, y el mismo n¨²mero de helic¨®pteros antiguerrilla del modelo Cobra. Desde hace cuatro meses esta petici¨®n est¨¢ ?congelada? por el Congreso de Estados Unidos.
Pasa a p¨¢gina 3
Marruecos reitera ante Washington sus deseos armamentistas
(Viene de primera p¨¢gina)
Dada la postura de neutralidad sobre el conflicto del Sahara que mantiene oficialmente Washington, los norteamericanos no reconocen la soberan¨ªa de Marruecos y Mauritania sobre la ex colonia espa?ola. Por otra parte, el acuerdo militar entre Rabat y Marruecos de 1960 prohibe el empleo de material b¨¦lico norteamericano fuera de las fronteras del reino de Marruecos. Ser¨ªa necesario, por tanto, modificar el texto del tratado, secreto en su mayor parte, para que los aviones y helic¨®pteros made in USA pudiesen ser utilizados contra la guerrilla polisaria.
El tema es doblemente delicado, por cuanto Washington ha mejorado notablemente en los ¨²ltimos meses sus relaciones con Argelia, que apoya al Frente Polisario. Pero el rey Hassan cree que el ?favor? hecho a Occidente al enviar sus tropas a Zaire debe ser correspondido por la Casa Blanca, y nada mejor que mediante el env¨ªo de material de guerra.
Por otra parte, el presidente de Senegal, Leopold Senghor, inform¨® ayer en Washington al presidente Jimmy Carter de sus propuestas para conseguir un arreglo pac¨ªfico del conflicto del Sahara. No se conoce la respuesta de Carter, que, seg¨²n el portavoz oficial de la Casa Blanca, se mostr¨® preocupado por los problemas econ¨®micos del Sahel y la zona subsahariana y anunci¨® alg¨²n tipo de ayuda.
Senghor, que realiza una visita oficial a Norteam¨¦rica, habr¨ªa propuesto -seg¨²n la embajada de Senegal en Washington- que se celebren referendums en Marruecos y Mauritania y que se d¨¦ en ellos al pueblo saharaui la oportunidad de escoger entre la ?pura y simple integraci¨®n? a esos pa¨ªses, una autonom¨ªa en el marco de una federaci¨®n, o bien la independencia en el ¨¢mbito de una confederaci¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.