"Revaluar la peseta resulta inadmisible", seg¨²n Fuentes Quintana

?Se corre el riesgo de creer que la exportaci¨®n ha resuelto ya los problemas, que exportamos demasiado y que el excedente de la balanza de pagos, alimentado -s¨®lo en parte- por el auge de las exportaciones, deber¨ªa reducirse para impedir el crecimiento de la cantidad de dinero. Hay quien llega a afirmar, err¨®neamente, que nada como revaluar la peseta para lograr estos prop¨®sitos.? Esta frase, pronunciada por Enrique Fuentes Quintana en la clausura del curso del Centro de Estudios Comerciales, viene a situar en su justo t¨¦rmino las numerosas presiones actualmente existentes para forzar al Gobierno una revaluaci¨®n de nuestro signo monetario.Este intento o creencia de los que quieren una revaluaci¨®n de la peseta no es admisible en opini¨®n del profesor Fuentes, quien se?al¨® que no es coherente con la soluci¨®n de nuestros problemas econ¨®micos a largo plazo. ?Si algo resulta claro es que Espa?a -cualquiera que sea el partido en el Poder- necesitar¨¢, sobre todo, tres cosas en los pr¨®ximos diez a?os: exportar, exportar y... exportar. Esta necesidad viene motivada por cuatro razones: para compensar la p¨¦rdida ocasionada a su capacidad adquisitiva por la elevaci¨®n del precio de los crudos petrol¨ªferos y materias primas importadas, para ganar la partida a los nuevos competidores que han entrado en nuestros mercados, para sostener el gasto nacional y para aumentar la ocupaci¨®n.?

En su intervenci¨®n, el se?or Fuentes puso de manifiesto que, sin embargo, la situaci¨®n monetaria del pa¨ªs y la necesidad de mantener las exportaciones apuntan hacia otras alternativas posibles. ?Es posible -m¨¢s a¨²n, necesario- revisar a la baja nuestro arancel, cuyo grado de protecci¨®n encarece en exceso las importaciones y lastra la competitividad de nuestras exportaciones. Es posible -mejor, imprescindible- liberar nuestras importaciones reduciendo dr¨¢sticamente el comercio globalizado y el comercio de Estado. Es posible -y muy conveniente- permitir la inversi¨®n espa?ola en el extranjero para apoyar el lanzamiento de nuestras exportaciones. Es posible -y oportuno- depurar nuestra pol¨ªtica de fomento de la exportaci¨®n de su vertiente mercantilista y protectora, ajustando las desgravaciones fiscales a la exportaci¨®n y mejorando la regulaci¨®n del tr¨¢fico de perfeccionamiento. Estas medidas deber¨ªan secundarse por una actuaci¨®n sobre la estructura productiva que mejorase su competitividad y, con ello, nuestras exportaciones. Es preciso favorecer aquellas actividades como la agricultura, la industria alimentaria y determinadas producciones industriales en las que nuestra econom¨ªa presenta claras ventajas relativas.?

De acuerdo con lo se?alado por Enrique Fuentes, si estas acciones se emprendieran por nuestra pol¨ªtica econ¨®mica, se ganar¨ªan buenos resultados en todos los frentes: la exportaci¨®n mejorar¨ªa, la balanza de pagos servir¨ªa mejor al desarrollo econ¨®mico del pa¨ªs, el sector p¨²blico reducir¨ªa su d¨¦ficit y la pol¨ªtica monetaria podr¨ªa conseguir sus objetivos sin perjudicar el crecimiento del cr¨¦dito al sector privado.

En opini¨®n del ex vicepresidente de Econom¨ªa, los repetidos rumores de una revaluaci¨®n de la peseta est¨¢n motivados por el crecimiento importante de las disponibilidades l¨ªquidas, producto de la doble circunstancia de un excedente de la balanza de pagos y de un d¨¦ficit en el presupuesto.