La clave del futuro Madrid, la directiva

Nos est¨¢n poniendo el pa¨ªs aburrido a fuerza de consensos. Llev¨¢bamos a?os imaginando lo que ser¨ªan unas elecciones democr¨¢ticas en el Real Madrid y nos hemos quedado sin ellas. El temor a la politizaci¨®n de las mismas, como ocurri¨® en las recientemente celebradas en Barcelona, ha impedido vivir una campa?a electoral que pod¨ªa haber resultado, al menos, divertida.La temporada veraniega ha obrado a favor de quienes no quer¨ªan ver el Bernab¨¦u convertido en un escenario de soflamas. Raimund o Saporta, desde el club, y la oposici¨®n seria se han puesto de acuerdo para evitar conflictos. Ha sido como si todos, en definitiva, hubieran escuchado los deseos del fallecido presidente, al que sin duda unos y otros habr¨ªan obedecido respecto a la l¨ªnea a seguir.

Un hombre honesto, de los pocos que fue capaz durante su mandato como directivo de opinar con respeto hacia Bernab¨¦u, pero con ideas propias, ha aceptado recoger el testigo. En la Casa Blanca no habr¨¢ carreras en solitario. No ha habido una conspiraci¨®n de silencio, pero s¨ª ha existido un deseo de, no dar tres cuartos al pregonero.

Desde el club y desde la oposici¨®n seria se han establecido las bases para elrelevo, que no tiene que ser exactamente un puro continuismo. Quienes van a llegar en septiembre, cuyos nombres definitivos todav¨ªa se desconocen, no van a tratar de echar por la borda cuanto de positivo se hizo, que fue much¨ªsimo, sino m¨¢s bien de reconstruir lo que comenzaba a quedar deteriorado.

Para mantener el rumbo de la nave conven¨ªa sostener la l¨ªnea crediticia y esa parece asegurada, porque el hombre enlace con el banco clave contin¨²a Para no cambiar de imagen se elige a Luis de Carlos, que representa la serenidad. Para darle nuevos impulsos se nombra a Ram¨®n Mendoza. Para que el club no caiga en manos de los oportunistas se buscar¨¢ una directiva coherente. Esa es de momento la esperanza. Una directiva sin consistencia ser¨ªa entregar las primeras bazas al enemigo. Una directiva para el Madrid no puede hacerse a base de hombres a los que como mucho podr¨ªa ofrec¨¦rseles una vocal¨ªa en el Castilla. Otra cosa ser¨ªa un fraude al socio.