Schmidt defiende el car¨¢cter positivo de la "cumbre" de Bonn

?Si no hubi¨¦semos llegado a estos acuerdos en Bonn, el mundo hubiera ca¨ªdo en una crisis econ¨®mica de los caracteres de la de los a?os treinta.? Esta afirmaci¨®n del canciller Schmidt al semanario liberal Die Zeit en su n¨²mero de hoy caracteriza el clima de distensi¨®n que tratan de imprimir canciller y Gobierno alem¨¢n a la cumbre de siete grandes pa¨ªses, reunida en la capital federal hasta el pasado lunes por la tarde.

Sin embargo, Helmut Schmidt debe hacer frente ahora, como los otros seis jefes de Gobierno participantes, cada uno en su medida, a las consecuencias particulares de los acuerdos adoptados. Para Schmidt la opci¨®n ser¨¢ destinar 14.000 millones de marcos a uno u otro objetivo, dentro de una amplia gama de opciones, con el fin de potenciar el crecimiento econ¨®mico que el canciller se ha comprometido a promocionar.Ahora se trata no de potenciar la econom¨ªa de los dem¨¢s pa¨ªses de econom¨ªa de mercado, sino de salvar la coalici¨®n social-liberal, que permitir¨¢ a los socialdem¨®cratas continuar en el poder, mientras no demuestren que por s¨ª solos pueden ostentarlo en solitario. Los liberales, grupo al que pertenece el ministro de Econom¨ªa, Lambsdorff, prefieren que la reactivaci¨®n econ¨®mica vaya acompa?ada por un descenso en los impuestos, medida que comparten con la oposici¨®n democristiana y que convertir¨ªa a este partido, el liberal, en m¨¢s atractivo a los electores.

Los socialdem¨®cratas prefieren orientar la acci¨®n hacia medidas m¨¢s complejas que reactiven el inter¨¦s inversor de los alemanes como individuos y como empresarios, sin concentrarse exclusivamente en la reducci¨®n de impuestos, para evitar una nueva carga a cuenta del presupuesto. Seg¨²n el ministro de Finanzas, el socialdem¨®crata Matthoefer, ?no se podr¨¢n cubrir ni una cuarta parte de los objetivos? de las medidas que estar¨ªa dispuesta a aplicar la RFA, seg¨²n sus compromisos en la cumbre de Bonn. La reforma impositiva deber¨ªa producirse en 1980, no el pr¨®ximo a?o, como quieren los liberales y democristianos. A nadie escapa que, precisamente en 1980, tienen lugar en este pa¨ªs elecciones generales y que los socialdem¨®cratas preferir¨ªan posponer una reducci¨®n impositiva a este a?o, como efecto positivo entre el electorado, un impacto que pretenden anticipar los liberales para hacerse valer ahora.

Por lo dem¨¢s, el clima de la cumbre de Bonn ha producido un alza en las bolsas alemanas, un relativo escepticismo en la industria y manifestaciones de contento en los partidos de la coalici¨®n social-liberal. El interregno de satisfacciones durar¨¢ hasta el pr¨®ximo d¨ªa 28, fecha en la que el Consejo de Ministros celebrar¨¢ una maratoniana sesi¨®n de dos d¨ªas para decidir en qu¨¦ medida puede la RFA contribuir al clima de estabilizaci¨®n adoptado por los siete superricos del mundo.