El cambio de alimentaci¨®n veraniego puede afectar al organismo humano
Los cambios climatol¨®gicos, el verano, afectan de muchos y variados modos a la alimentaci¨®n humana. Nuestra tendencia natural, en esta ¨¦poca del a?o, es la de ingerir alimentos distintos, menos portadores de calor¨ªas y m¨¢s refrescantes, que los que tomamos en invierno. Los odont¨®logos y estomat¨®logos espa?oles acaban de dar la voz de alarma sobre los riesgos para la dentadura de los cambios de r¨¦gimen alimentario del verano. Alfonso Garc¨ªa P¨¦rez Informa sobre estos riesgos y de otros que el verano plantea a nuestro modo de alimentarnos.
El Consejo General de Colegios de Odont¨®logos y Estomat¨®logos ha hecho p¨²blico un comunicado con diversas recomendaciones para el cuidado de la dentadura, advirtiendo sobre una serie de peligros t¨ªpicos de las vacaciones. ?En cuanto a los alimentos -se dice en el comunicado-, se debe procurar no variar, en lo posible, la alimentaci¨®n. El abuso de ensaladas, gazpachos, bebidas fr¨ªas, puede propiciar inflamacionesde las enc¨ªas. La distinta composici¨®n de las aguas puede producir efectos semejantes. No abusar de los helados, ni de los frutos azucarados como postres; los hidratos de carbono tienen un papel importante en el origen de las caries.?La estructura de la masticaci¨®n -los dientes, enc¨ªas- puede ser seriamente afectada por un cambio excesivo en costumbres, en este caso h¨¢bitos de conducta alimentarla. El organismo humano, en este aspecto como en otros, es un equilibrio o interacci¨®n permanente entre conservaci¨®n y cambio, entre nuestros aspectos defensivos y nuestras aspiraciones progresivas. Los cambios en nuestro r¨¦gimen de alimentaci¨®n son un ejemplo m¨¢s del reto que todo cambio plantea a nuestro organismo. Los cambios climatol¨®gicos exigen modificaciones en nuestra forma de alimentarnos y, a su vez, esos cambios pueden afectar a nuestra salud.
?En cuanto a la masticaci¨®n -prosigue la comunicac¨ª¨®n de los odont¨®logos y -los estomat¨®logos a los espa?oles ante sus vacaciones-, no deben masticarse hielos, polos, etc¨¦tera. No destapar bebidas con los dientes. Una pieza dentaria puede fracturarse si no se utiliza correctamente.?
Respecto a nuestras normas de limpieza dentaria, tambi¨¦n sometidas al cambio. ?la alteraci¨®n que se produce en los h¨¢bitos de limpieza -dicen los odont¨®loijos- es el factor fundamental de las ginelvitis veraniegas. Debe utilizarse un cepillo igual al habitual y la misma pasta. Debe utilizarse el mismo ritmo de limpieza. o esmerar la misma si alguna de las sesiones habituales se suprime?.
La interrupci¨®n de los tratamientos odontol¨®gicos, a causa de las vacaciones. puede ser otra fuente de problemas: ?Deben recabarse de odont¨®logico -concluye el comunicado- las medidas a seguir en caso de complicaciones: antibi¨®ticos. antiinflamatorios, etc¨¦tera.? A ser posible, deben conseguirse en este caso de tratamientos interrumpidos ?las se?as de un profesional que viva en la localidad a que se desplaza el paciente?.
Alimentos en mal estado
Pero no es la dentadura el ¨²nico sector del organismo afectado por el cambio en el r¨¦gimen de alimentaci¨®n. Es bien conocido el hecho de que en estas ¨¦pocas aumentan las intoxicaciones producidas por la ingesti¨®n de alinientos en mal estado. Los cambios t¨¦rmicos inciden sobre todo tipo de procesos org¨¢nicos, la putrefacci¨®n entre ellos. Un cuidado especial debe, pues, regir la manipulaci¨®n y preparaci¨®n de alimentos, especialmente de los llarriadosftescos. A ello se a?aden los problemas del transporte: comidas en aviones. barcos. trenes. etc¨¦tera.
Una encuesta llevada a cabo por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud entre 1967 y 1976 menciona ocho intoxicaciones masivas provocadas por el transporte a¨¦reo. Una defunci¨®n por c¨®lera fue la consecuencia de un vuelo Bahreln-Nueva Zelanda. Seis muertes. debidas a la salmonelosis fueron causadas en un vuelo charter Canarias-Escandinavia, por la ingesti¨®n de alimentos en mal estado en el avi¨®n. Los productos que se revelan. seg¨²n la encuesta de la OMS, como m¨¢s peligrosos, m¨¢s susceptibles de transmisi¨®n de enfermedades, fueron las ostras, mejillones y, crust¨¢ceos en eeneral, as¨ª como los platos a base de huevos cremas. tortillas, ensaladas con huevos.
Una reunl¨®n de especialistas celebrada en Espa?a bajo los auspicios de la OMS aconsejaba la adopci¨®n de medidas m¨¢s serias en la manipulaci¨®n de los alimentos en los medios de transporte, sobre todo cuando se trata de carnes crudas, mariscos, huevos y pasteler¨ªa. Los expertos recomendaron ?que el tiempo de manipulaci¨®n de los alimentos se reduzca al m¨¢ximo y que se atiendan muy especialmente las condiciones de refrigeraci¨®n de los mismos, as¨ª como que se proporcione una mejor preparaci¨®n en esta materia a las personas encargadas de estos servicios en el campo del transporte?.
Ante la consideraci¨®n del personal de las compa?¨ªas a¨¦reas sol1re el car¨¢cter espor¨¢dico de este tipo de infecciones en vuelo, los expertos consideraron suficiente la actual reglarrientaci¨®n en este terreno, pero tuvieron en cuenta las circunstancias que acent¨²an los riesgos: laroa espera entre vuelos. normas de higiene diferentes de un pa¨ªs a otro...
Alimentos "naturales"
Ante la compiejidad de riesgos que plantea al hombre la alimentaci¨®n, en todas las ¨¦pocas del a?o. pero quiz¨¢ especialmente en los meses de mayores niveles t¨¦rmicos. se renueva la pol¨¦mica sobre qu¨¦ tipo de alimentaci¨®n resistir¨ªa mejor el calor. A?¨¢dase a ello la constante denuncia que la opini¨®n p¨²blica hace sobre la muitiplicidad de aditivos de que son portadores los m¨¢s variados alimentos.
Se describ¨ªa reciente rri ente, por poner un ejemplo. desde un diario madrile?o, Arriba, el car¨¢cter artificial de la mavor¨ªa de los productos que hoy estamos ingiriendo. Nos gusta el color blanco del az¨²car, se dec¨ªa en la citada informaci¨®n, el amarillo de la mantequilla y el verde brillante color de la menta. Y, sin embargo, esos colores son falsos desde una perspectiva naturalista. Porque, continuando con la informaci¨®n de Antonio Castro, ?el color natural y verdadero del az¨²car es amarillo rojizo; el blanco inmaculado que tiene cuando la adquirimos se consigue a base de compuestos sulfurosos. La mantequilla, tal y como puede verse reci¨¦n hecha, es blanca casi, y su atractivo tono amarillento lo adquiere a base de colorantes, de sustancias artificiales. El color natural de l¨ªquido de menta es acuoso, y su verde brillante es el resultado de a?adirle clorofilina a todo pasto?.
,D¨®nde est¨¢, pues, la frontera entre lo natural y lo no-natural en la alimentaci¨®n humana? En torno a esta pol¨¦mica declaraba recientemente a EL PAIS Faustino Cord¨®n, eminente bi¨®logo espa?ol, especializado en el campo de la alimentaci¨®n y director del Instituto de Biolog¨ªa Aplicada, que ?lo natural en el hombre es el alimento preparado. ?Son naturales unas alcachofas a las que sometemos a un largo per¨ªodo de preparaci¨®n -el hervido- mediante el empleo del fuego, una conquista cultural humana? Casi todos los'allmentos a los que lla,mamos naturales son producto de la cultura y la acci¨®n humana. In-erir alcachofas naturales ser¨ªa comerlas tal como las presenta la naturaleza, algo que nos resultar¨ªa repugnante?.,
Desde esta perspectiva cabe el desarrollo futuro de ciencias y t¨¦cnicas de la alimentaci¨®n, en las que el ingenio humano emplee no s¨®lo unos u otros aditivos, sino que. adem¨¢s, someta a todos los productos a los m¨¢s variados procesos de mejora y perfeccionamiento. El reto, sin embargo, que plantea el desarrollo de alimentos preparados, tanto para el verano como para el invierno, es el de lograr que la direcci¨®n de esos procesos de preparaci¨®n est¨¦ cient¨ªficamente orientada hacia la consecuci¨®n de lo mejor para quien los ingiere, y no del mero aumento del beneficio de quien los produce.
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