Denuncian fraude en las ¨²ltimas elecciones de Ecuador

A¨²n no se conoce el alcance que tendr¨¢ el anuncio hecho el pasado fin de semana por el Tribunal Supremo electoral de Ecuador que, al parecer, descubri¨® un fraude generalizado en las elecciones celebradas el pasado d¨ªa 16 de julio en el pa¨ªs, en las que result¨® ganador (aunque sin el n¨²mero suficiente de votos para evitar una segunda vuelta) el candidato del Partido Concentraci¨®n de Fuerzas Populares (CFP), Jaime Roldos. La victoria de Roldos, sorprendente incluso para sus correligionarios, abri¨® en Ecuador un per¨ªodo de inquietud. Si existe un partido que desagrade a los militares que durante los ¨²ltimos a?os han gobernado Ecuador ese es la CFP. El propio Gobierno lo demostr¨® al vetar la candidatura del dirigente natural del partido, Assad Bucaram, quien ofreci¨® entonces su apoyo a quien resultar¨ªa luego vencedor en los comicios, su yerno, Jaime Roldos.

Cuando se conocieron los datos que daban la victoria al partido de Bucaram, muchos observadores expresaron sus temores de que los militares, apoyados por poderosos grupos de presi¨®n, har¨ªan cualquier cosa por impedir el acceso al poder de Jaime Roldos. Las denuncias del Tribunal Supremo electoral, que acusan a la CFP de alterar las actas de m¨¢s del 50% de las mesas electorales, forman parte, seg¨²n esos mismos observadores. de los intentos por desvirtuar la victoria de Roldos e incluso por eliminar a la CFP de la segunda vuelta electoral, que debe celebrarse en octubre.

Una de las razones, y quiz¨¢ la m¨¢s poderosa, por las que existe tal inquina de los militares hacia Bucaram y su partido es la promesa realizada por ¨¦ste durante su campa?a electoral de propiciar desde el poder una investigaci¨®n a fondo de las actividades de los militares desde el golpe que derroc¨® a Velasco Alvarado. El resto de los partidos participantes en las elecciones parece que hicieroh a la Junta militar una promesa formal de no ?hurgar? en el pasado. No as¨ª la CFP, que en sus actos publicitarios prometi¨® a sus electores exigir responsabilidades por numerosos casos de corrupci¨®n y abusos de poder.

Pocos dudan de que en la segunda vuelta, si se celebra con limpieza, Roldos revalidar¨¢ su victoria.