La reestructuraci¨®n de Ensidesa implica amortizar 2.500 empleos y trasladar 1.150 trabajadores

El plan de reestructuraci¨®n de Ensidesa proyecta reducir la actual plantilla de 26.178 trabaja dores a 23.631. Este objetivo se trata de alcanzar de modo gradual, a lo largo de cuatro a?os. El sistema previsto comprende jubilaciones anticipadas y amortizaci¨®n de bajas, as¨ª como traslados de centro de trabajo de un total de 1.150 trabajadores, la mitad de los cuales deber¨¢n cambiar de localidad, al menos durante su horario laboral. Las fuerzas sindicales de la empresa han manifestado su rechazo inicial del plan y reclamado nuevas versiones. Ensidesa, primera siderurgia nacional, es una empresa del INI que el pasado a?o alcanz¨® una cifra de ventas de 80.000 millones de pesetas y registr¨® unas p¨¦rdidas de casi 11.000 millones.

El denominado plan de reestructuraci¨®n que ha elaborado la direcci¨®n de ENSIDESA para sus plantas en Asturias supondr¨¢ la paralizaci¨®n de los hornos de cok de Moreda -a partir de octubre de 1978-, los similares de Mieres en la primavera del pr¨®ximo a?o y los trenes de chapa y estructurales de La Felguera y Mieres. a partir de 1981, seg¨²n ha podido saber EL PAIS de fuentes solventes. Los mismos medios han precisado que el plan no implica ning¨²n despido, al establecerse mecanismos de jubilaciones anticipadas escalonadas y preverse el traslado de 1.152 trabajadores a otras instalaciones de la empresa, de los que unos seis cientos deber¨¢n variar su lugar de trabajo a distancias situadas entre quince y treinta kil¨®metros del que ocupan en la actualidad.

El plan, que fue presentado a los trabajadores recientemente y rechazado por estos en una asamblea general celebrada la pasada semana —ver EL PAIS del 5 de agosto—, consta de una serie de medidas a corto y medio plazo encaminadas a alcanzar una creciente rentabilidad de la empresa que garantice su futuro, seg¨²n fuentes de la propia sociedad. Las mismas fuentes, consultadas por EL PAIS, se?alaron su extra?eza por las afirmaciones vertidas respecto a que dichas medidas hipotecaban el futuro de ENSIDESA. ya que en ellas no se contempla en absoluto decisi¨®n alguna respecto al futuro de la producci¨®n sider¨²rgica espa?ola.

La Empresa Nacional Sider¨²rgica. ENSIDESA, cuyo capital est¨¢ en un 90% en manos del Instituto Nacional de Industria (INI), posee actualmente instalaciones en cinco localidades asturianas: Avil¨¦s, Veri?a, Moreda, La Felguera y Mieres con una plantilla total de 26.178 trabaja dores.

Cierres escalonados

En 1974, la direcci¨®n de la empresa llev¨® a cabo un estudio de rentabilidad, teniendo en cuenta el grado de obsolescencia de algunas instalaciones. Tomando como base este estudio ya la vista de la dif¨ªcil coyuntura por la que atraviesa la siderurgia integral en todo el mundo, incluida la espa?ola, la direcci¨®n de la empresa decidi¨® recientemente aplicarlas previsiones del plan.

Las medidas a corto y medio plazo del plan reestructurador prev¨¦n una serie de paradas escalonadas de instalaciones cuya rentabilidad es ya pr¨¢cticamente nula, cuando no deficitaria, lo que se estima contribuye notablemente a agravar la situaci¨®n de p¨¦rdida global de la empresa, que el pasado a?o de 1977 roz¨® los 11.000 millones de pesetas. A partir de estas medidas, los redactores del plan consideran que podr¨¢ iniciarse una reequilibraci¨®n de la actividad productiva y' posibilitar adem¨¢s la eventual torna de decisiones para toda la siderurgia integral que la Administraci¨®n deber¨¢ afrontar en los pr¨®ximos meses y que en cualquier caso vendr¨¢n condicionadas por la evoluci¨®n previsible de la demanda interior y exterior.

En Avil¨¦s est¨¢ prevista la parada de las m¨¢quinas de sintetizar 1 y 2 para 1980, quedando el horno alto en situaci¨®n de reserva. Paralelamente, a principios de 1979 se pretende poner en funcionamiento la instalaci¨®n de desulfuraci¨®n de arrabio, as¨ª como la progresiva potenciaci¨®n de las restantes instalaciones, con mayor probabilidad para el tren de laminaci¨®n en fr¨ªo.

En Veri?a, no est¨¢ prevista ninguna detenci¨®n y s¨ª incorporar a la cadena productiva la nueva instalaci¨®n de desulfuraci¨®n de arrabio (1979) y el nuevo tren de alambr¨®n (1980).

En la planta de Moreda que dar¨¢ en funcionamiento el horno el¨¦ctrico, estando prevista la parada de los actuales hornos de cok en octubre de este a?o.

En cuanto a La Felguera est¨¢ previsto que contin¨²en en pleno funcionamiento los hornos de cok y el horno alto, que precisamente, ha sido modernizado en fecha reciente. El plan prev¨¦, en cambio, la parada total de los trenes de chapa y de estructurales, aunque no se ha fijado la fecha exacta para ello. Las previsiones del plan se?alan el a?o 1980 como per¨ªodo para concretar, fundamentalmente a la vista de las circunstancias econ¨®micas y sociales y el di¨¢logo con los representantes de los trabajadores, el momento exacto en que dichas instalaciones deban quedar fuera de producci¨®n.

Finalmente, en Mieres se considera necesario parar definitivamente los hornos Siemens de cok en la primavera del pr¨®ximo a?o de 1979. En cuanto al tren de chapa est¨¢ previsto que contin¨²e funcionando plenamente durante los dos pr¨®ximos a?os, precisando en el curso de 1980 s' por el mismo m¨¦todo que en el caso de Felguera, el momento m¨¢s id¨®neo para detener su producci¨®n.

Medidas laborales

Actualmente, la plantilla de la empresa se encuentra situada en 26.178 trabajadores de los cuales 7.175 tienen la consideraci¨®n de empleados -34% del total- los objetivos del plan reestructurador pretenden una reducci¨®n de dicha plantilla que en t¨¦rminos globales afectar¨¢ a 2.547 trabajadores de los que 1.451 son empleados y 1.096 obreros, Una vez consumada esta reducci¨®n, que se espera alcanzar hacia 1982 la plantilla global de ENSIDESA quedar¨ªa cifrada en 23.631 trabajadores, de los que s¨®lo un 25% ser¨ªan empleados (5.724) y el restante 75% (17.907) tendr¨ªan la consideraci¨®n de obreros.

El criterio de la direcci¨®n de la empresa es el de no realizar ning¨²n despido, para lo que se ha arbitrado un cuadro de medidas complementarias, mediante el que el excedente de mano de obra resultante sea absorbido, bien por las nuevas instalaciones que est¨¢ previsto entren en servicio en el propio plan, o en las plantas que actualmente tiene ya en funcionamiento la empresa, en las restantes localidades asturianas. Junto a esto, y adem¨¢s de la liberaci¨®n de puestos de trabajo que se produzcan como consecuencia del crecimiento vegetativo normal de la plantilla, la empresa ha previsto un plan escalonado de jubilaciones voluntarias para sus factor¨ªas en Mieres y La Felguera durante los pr¨®ximos a?os 1979 y 1980. Este plan de jubilaciones anticipadas afectar¨ªa a los trabajadores de sesenta o m¨¢s a?os (1979) y 56 a?os en adelante (1980) en las dos factor¨ªas citadas. En total, podr¨ªan acceder a la jubilaci¨®n voluntaria —seg¨²n estimaciones del plan 190 trabaja dores en Mieres y 656 en La Felguera: es decir, un total de 846 trabajadores entre ambas localidades.

En cuanto a la, movilidades, punto que ha despertado una mayor oposici¨®n entre trabajadores, centrales sindicales y movimientos ciudadanos, afectar¨ªan a un total de 1.152 trabajadores, de los que s¨®lo 598 se encuentran actualmente trabajando en Moreda y Avil¨¦s, que son los dos puntos en los que las medidas del plan incidir¨¢n en plazo m¨¢s inmediato. Los restantes trabajadores que deber¨ªan cambiar de lugar de ubicaci¨®n laboral se encuentran actualmente en Mieres y La Felguera donde la repercusi¨®n est¨¢ planteada a plazo m¨¢s lejano. Las previsiones se?alan que s¨®lo unos seiscientos trabaja dores deber¨¢n trasladarse de municipio al final del plan para acudir a un trabajo.

Un ¨²ltimo apartado del plan incluye el compromiso de la empresa a cooperar en la promoci¨®n de industrias creaci¨®n de puestos de trabajo alternativos, especialmente en las zonas de Mieres y La Felguera. Para la primera, ya existe el provecto concreto de crear trescientos puestos, en un taller de reparaci¨®n de vagones y otro de soldaduras.

Plan de inversiones

Por otra parte, el Ministerio de Industria tiene va elaborado un avance de previsiones para 1amdust r¨ªa sider¨²rgica integral espa?ola. a partir del cual ser¨¢n estructuradas las medidas ya anunciadas de apoyo al sector, seg¨²n ha podido saber EL PAIS en fuentes de todo cr¨¦dito. En lo que respecta a ENSIDESA se considera necesario dotar de una aportaci¨®n estatal extraordinaria al INI de 11.000 millones de pe se tas para que, a su vez, ¨¦ste proceda a incrementar en dicha cifra su participaci¨®n en el capital de ENSIDESA. El mismo cuadro de previsiones se?ala la necesidad de sanear la estructura financiera de la sociedad, para lo que se proceder¨ªa a refinanciar su d¨¦ficit acumulado, estimado en 11.000 millones de pesetas para finales del presente a?o. Esta refinanciaci¨®n se llevar¨ªa a cabo por v¨ªa de cr¨¦dito oficial en condiciones ventajosas, por importe de un tercio de la indicada cifra durante el presente ejercicio y los dos tercios restantes en el curso de 1979.

Las previsiones de producci¨®n d ENSIDESA para 1982 son de 5,4millones de toneladas anuales, sin tener en cuenta decisiones ulteriores de la Administraci¨®n, en el sentido de alterar la actual capacidad productiva global del pa¨ªs en siderurgia integral. Por el momento, parece ser criterio dominante en el Ministerio de Industria mantener estable la capacidad productiva, a menos que evolucione favorablemente la demanda interna y externa en el sector.

El "tren caliente"

Fuentes solventes del citado departamento, consultadas por EL PAIS, manifestaron que por el momento no iba a ser considerada la posible instalaci¨®n de un nuevo tren de bandas en caliente para ninguna de las tres siderurgias integrales. Este tren, cuya ubicaci¨®n deber¨ªa discutirse probablemente entre Altos Hornos del Mediterr¨¢neo —Sagunto— y ENSIDESA —Asturias- no parece vaya a ser instalado antes de seis u ocho a?os, precisaron las mismas fuentes. Seg¨²n los t¨¦cnicos de ENSIDESA. el plan de reestructuraci¨®n en nada compromete o condiciono la instalaci¨®n de dicho tren, toda vez que eso constituye una decisi¨®n de Gobierno y nunca podr¨ªa ser planteado en uno u otro sentido a nivel de empresa.

En sus ¨²ltimas manifestaciones, representantes de los trabajadores de Ensidesa y lideres de las centrales sindicales han se?alado la instalaci¨®n de dicho tren de bandas en caliente como objetivo irrenunciable de los trabajadores de la empresa, ya que estiman es la ¨²nica garant¨ªa de que la siderurgia estatal no va a ser desmantelada.

Por su parte, los representantes de los trabajadores de la IV Planta de Sagunto, cuyo pase al INI est¨¢ previsto para febrero de 1979, argumentan en id¨¦ntico sentido, reclamando para Altos Hornos del Mediterr¨¢neo la con cesi¨®n de esta instalaci¨®n, que complemente el actual tren de laminaci¨®n en frio.