Los maestros gallegos de Ensen?anza General B¨¢sica no quieren ser traslados

Si el Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia no lo remedia, el pr¨®ximo curso empezar¨¢ en Galicia con unos quinientos maestros que se han visto obligados a dejar las escuelas en las que ven¨ªan trabajando para ocupar, contra su voluntad, otros destinos forzosos en Andaluc¨ªa, Canarias y otros lugares.El asunto viene preocupando gravemente a las fuerzas sociales gallegas (afectados, partidos pol¨ªticos, centrales sindicales, asociaciones de vecinos, etc¨¦tera) desde los primeros d¨ªas del mes de agosto. Entonces fue cuando los profesores a los que se comunic¨® la aplicaci¨®n del concurso de traslados plantaron cara al tema y le dijeron al Ministerio que no est¨¢n dispuestos a aceptar esta pol¨ªtica educativa.

Realmente, argumentan razones contundentes. ?Si de verdad se quiere aplicar criterios racionales en la ense?anza actual, uno de ellos -contest¨® Xaqu¨ªn Lema, desplazado- debe ser el de que los profesores conozcan a fondo el medio (Idioma, cultura, geograf¨ªa, psicolog¨ªa, etc¨¦tera) en que se desenvuelve el alumno. Oblig¨¢ndonos a ocupar escuelas en Andaluc¨ªa o en Canarias no s¨®lo se despoja a los ni?os gallegos de la ense?anza que necesitan y a la que tienen derecho, sino que se nos obliga a trabajar, a los maestros, en circunstancias nada favorables para desarrollar una tarea educativa eficaz. Aparte, adem¨¢s de los transtornos personales o familiares que, generalmente, se nos ocasiona con el desplazamiento a la fuerza.?

Lo que ocurre es que, mientras Galicia necesita aumentar considerablemente su capacidad escolarizadora, la pol¨ªtica de traslados transtorna este a?o de manera muy sensible la educaci¨®n de unos 14.000 ¨® 15.000 ni?os que eran atendidos hasta ahora por los desplazados. No cabe duda de que los maestros plantean una contradicci¨®n evidente cuando denuncian la incongruencia educativa de unos traslados que se aplican en un contexto que, como el de Galicia, necesitar¨ªa cubrir alrededor de 70.000 nuevas plazas escolares para alcanzar un nivel aceptable. La sola aplicaci¨®n de los acuerdos del pacto de la Moncloa llevar¨ªa consigo la creaci¨®n, en el pr¨®ximo curso, de 44.520 plazas nuevas. Lo que equivale a decir que ser¨ªan necesarios 3.200 nuevos maestros, en el primer caso, y unos 1.700, en el segundo.

La "Cenicienta" espa?ola

?En el nivel preescolar, que es en el que Galicia est¨¢ todav¨ªa absolutamente en pa?ales con una poblaci¨®n rural sin atender pr¨¢cticamente en nada -respondi¨® Mar¨ªa Concepci¨®n Rodr¨ªguez, maestra afectada-, habr¨ªa que aumentar cuatro veces m¨¢s el n¨²mero de plazas disponibles para ni?os de cuatro a seis a?os.? Galicia es, en una palabra, cenicienta de Espa?a en cuanto a oferta educativa. Una pol¨ªtica de concentraciones escolares, aplicada de manera uniforme a sus distintas parroquias y municipios, vino a crear m¨¢s problemas de los que hab¨ªa en algunos casos. Empiezan a ser frecuentes los casos en los que los propios paisanos contratan por su cuenta ahora a un maestro para que atienda la vieja escuela abandonada por el Ministerio en la aldea y poder as¨ª enviar a sus hijos a una ense?anza que, de otro modo, les queda demasiado lejos o mal comunicada. Concretamente, en la provincia de La Coru?a se est¨¢ dando ahora mismo el caso significativo de la parroquia de Castriz.Pero no es solamente la ense?anza preescolar la que no est¨¢ atendida en Galicia. En peor situaci¨®n se encuentran todav¨ªa la educaci¨®n permanente de adultos, que ser¨ªa necesario practicar en las modalidades de alumnos presentes y educaci¨®n a distancia, seg¨²n los entendidos, y la educaci¨®n especial. Esta ¨²ltima inexistente en la pr¨¢ctica o en manos de algunas instituciones y centros de iniciativa privada.

De todo ello se deduce que Galicia podr¨ªa ocupar no s¨®lo a los maestros que ahora quiere obligar a que emigren al Ministerio, sino incluso a much¨ªsimos m¨¢s. ?No comprendemos esta emigraci¨®n forzosa -se pronuncian los maestros- cuando estamos muy por debajo de otras partes de Espa?a para alcanzar la igualdad que pregona el ministro Cavero. En las circunstancias actuales de Galicia, la pol¨ªtica de los traslados forzosos es una injusticia para el pueblo gallego y para los maestros a los que se obliga a abandonar trabajos ya iniciados y, en muchos casos, con resultados esperanzadores o con experiencias educativas iniciadas que los desplazamientos vienen a truncar.?

Hasta el momento, la soluci¨®n no fue posible. Los maestros exigen que se deje sin vigencia el concurso y que se les faciliten plazas en Galicia, puesto que, tal como declararon los propios delegados del Ministerio, existen dichas plazas y existe tambi¨¦n la necesidad de crear muchas mas. Una f¨®rmula que sugieren es la de que se les otorgue la provisionalidad en sus puestos de trabajo. Se niegan a la aplicaci¨®n de comisiones de servicio, soluci¨®n que tambi¨¦n impide una ley oficial, y est¨¢n dispuestos a no presentarse para tomar posesi¨®n de los destinos que se les asigne contra su voluntad.

El tema es ya conflictivo y, como tal, se manifest¨® en manifestaciones callejeras y, de manera especial, en la ocupaci¨®n que hicieron por tres veces los maestros de la delegaci¨®n provincial del MEC en La Coru?a, con la intervenci¨®n posterior de la polic¨ªa antidisturbios. Una Junta de Galicia, desprovista todav¨ªa de competencias y de capacidades ejecutivas m¨ªnimas, se muestra impotente ante un problema que viene de hace tres a?os, pero que este curso alcanza grados de conflictividad que amenazan incluso al orden p¨²blico.

Apoyo de la Junta de Galicia

El d¨ªa 25, viernes, se iniciaron las conversaciones de los afectados con el Ministerio. La v¨ªspera los maestros trataron de presionar a trav¨¦s de una manifestaci¨®n a la que asistieron m¨¢s de mil personas. ?Hasta ahora -se lamentan los afectados- el Ministerio s¨®lo nos dio con la puerta en las narices o nos insult¨® incluso, como cuando nos dijo el director general de personal que los gallegos estamos acostumbrados a emigrar y que, por tanto, los desplazamientos no deber¨¢n causarnos tanto transtorno.?La Junta de Galicia, por su parte, y pese a su escasa capacidad de influencia, apoyar¨¢ las reivindicaciones de los maestros desplazados; forzosos de Galicia, seg¨²n se decidi¨® en el curso de una reuni¨®n que celebr¨® la mencionada entidad preauton¨®mica el pasado jueves y a la que asistieron representaciones de los partidos pol¨ªticos y centrales sindicales.

En el transcurso de la reuni¨®n el presidente de la Junta, Antonio Ros¨®n, se?al¨® que expondr¨¢ el problema al subsecretario del Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia y al director general de Personal. El consejero de Cultura se pronunci¨® por la necesidad de arbitrar soluciones a un problema que afecta a m¨¢s de medio millar de rnaestros y que constituye una cuesti¨®n fundamental para solucionar el problema de la educaci¨®n en Galicia. El consejero de Educaci¨®n de la Junta, por su parte, manifest¨® que el problema ya hab¨ªa sido expuesto en profundidad al Ministerio, y destac¨® la necesidad de planificar la educaci¨®n preescolar en Galicia e intensificar la formaci¨®n permanente de adultos, lo que exige la ampliaci¨®n de las plantillas y la aplicaci¨®n del decreto que determina el aumento de un profesor en cada una de las secciones escolares de m¨¢s de ocho unidades.

Al t¨¦rmino de la reuni¨®n se indic¨® que el Ministerio es consciente de que Galicia est¨¢ por debajo de la media nacional en materia de escolarizacion y que es fundamental la presi¨®n de las fuerzas pol¨ªticas de Galicia para buscar soluciones al problema. ?La Junta de Galicia -se dijo- est¨¢ dispuesta a ejercer esta presi¨®n.?