Ma?ana se firman las escrituras de fusi¨®n Banesto-Coca

Ma?ana, el Banco Espa?ol de Cr¨¦dito y el Banco Coca firmar¨¢n las escrituras de fusi¨®n de ambas entidades. Casi a los nueve meses de anunciarse la operaci¨®n se ha consolidado el contrato inicial y el Banco Coca desaparecer¨¢ para integrar buena parte de sus activos en la organizaci¨®n bancaria de Banesto, que de esta forma recupera el liderazgo de la banca comercial espa?ola. La decisi¨®n de Banesto de fusionar definitivamente el Coca se adopt¨® hace algo m¨¢s de una semana, en una reuni¨®n de su consejo en la que se analizaron los pros y contras de la decisi¨®n. En estos momentos, diversas investigaciones de tipo fiscal y judicial se mantienen en vigor sobre el Banco Coca para comprobar irregularidades en sus ¨²ltimos balances. El ministerio fiscal estudia algunas de esas irregularidades por si hubiera materia delictiva.

La inspecci¨®n fiscal ha verificado en el banco, seg¨²n actas firmadas hace un mes, operaciones de revalorizaci¨®n de activos mobiliarios -valores- e inmobiliarios -solares y locales-, por un valor total de 4.500 millones de pesetas. Estas plusval¨ªas suponen un coste fiscal al Banco Coca de 2.300 millones de pesetas (1.625 de impuesto sobre sociedades y 675 por el impuesto sobre rentas de capital). La inspecci¨®n fiscal ha estimado que la liquidaci¨®n de estos impuestos deb¨ªa haberse presentado y que, por tanto, existe fraude, por lo que se impone un recargo del 100%, que supone elevar a 4.600 millones de pesetas la cantidad que el Coca debe ingresar en el Tesoro. Los abogados del Coca estiman que no procede ese recargo ni est¨¢n de acuerdo tam. poco con el fondo de la cuesti¨®n, y por ello presentar¨¢n los recursos correspondientes.No obstante, los abogados han declarado, ninguna notificaci¨®n oficial ha sido recibida a¨²n al respecto. En c¨ªrculos jur¨ªdicos se se?ala que los abogados (Mat¨ªas Cortes y Rafael P¨¦rez Escolar) est¨¢n ante uno de los casos m¨¢s importantes de los ¨²ltimos tiempos en el mundo financiero.

Costes fiscales para Ignacio Coca

Seg¨²n ha podido saber EL PAIS, en el acuerdo firmado entre Banesto y Coca figura que los costes por las responsabilidades fiscales de las posibles irregularidades de balance correr¨¢n por cuenta de Ignacio Coca, presidente y propietario de la mayor¨ªa de las acciones de la entidad.

Las plusval¨ªas de 4.500 millones de pesetas a que nos referimos se concentran en revalorizaciones de solares y locales efectuadas en el pasado mes de febrero y que EL PAIS pormenoriz¨® en su edici¨®n del pasado 27 de mayo. Las plusval¨ªas mobiliarias afectan a una decena de sociedades vinculadas al Banco Coca, a Ignacio Coca y a otras personas, entre las que cabe destacar a Crist¨®bal Mart¨ªnez Bord¨ªu, marqu¨¦s de Villaverde, y a Alfonso M¨¢rquez Pati?o, marqu¨¦s de Castro y c¨®nsul de M¨®naco en Madrid.

El fiscal del Reino ha pasado un informe sobre las irregularidades contables del Coca a la Audiencia de Madrid, donde la fiscal¨ªa estudia el caso. De momento, ¨¦sta no se ha pronunciado en ning¨²n sentido, aunque se espera una decisi¨®n en breve plazo. Esta pudiera ser la de cerrar el caso, por estimar que no hay ning¨²n delito, o la de querellarse ejercitando la acci¨®n p¨²blica, si estimara que ha habido fraude a los accionistas.

La dimensi¨®n p¨²blica de las irregularidades del caso Coca se proyect¨® el pasado mes de mayo, cuando miembros de la Brigada de Delitos Monetarios del Banco de Espa?a detuvieron a Enrique Mi?arro, consejero del banco y ex consejero- delegado del mismo, despu¨¦s de haber retirado una importante suma de dinero. Los funcionarios p¨²blicos intervinieron en el domicilio del se?or Mi?arro, en su coche y en una oficina de dos colaboradores suyos, una suma superior al centenar de millones. Tanto Mi?arro como sus dos colaboradores confesaron, posteriormente, diversas evasiones de capitales en los ¨²ltimos tiempos por valor total de 651 millones de pesetas.

El caso Mi?arro

Un mes despu¨¦s, el se?or Mi?arro, pese a que se le hab¨ªan retirado tanto el pasaporte como el documento nacional de identidad y que contaba con vigilancia policial, dej¨® de comparecer ante el juzgado y desapareci¨® del pa¨ªs. Al parecer, sali¨® ilegalmente de Espa?a desde la Costa Brava catalana, en un yate. En estos momentos se encuentra en paradero desconocido. Ha perdido los cincuenta millones de fianza, pero se supone que podr¨¢ disfrutar de los 651 que hab¨ªa evadido, hasta ahora, seg¨²n su propia confesi¨®n. Medios financieros y de la Administraci¨®n han manifestado su sorpresa por la huida de Enrique Mi?arro, e incluso han se?alado que la ineficacia policial ante un delito de este calibre es lamentable. Medios policiales, sin embargo, se?alaron en su d¨ªa, privadamente, que la huida de Mi?arro hab¨ªa sido ajena a un fallo en la vigilancia policial, t¨¦cnicamente poco probable.

El precio del Coca

La noticia del acuerdo Coca-Banesto fue dada por EL PAIS el pasado 21 de diciembre y confirmada ese mismo d¨ªa por directivos de Banesto. En la rueda de prensa convocada al efecto se dijo que las negociaciones entre ambas organizaciones se desarrollaron en quince d¨ªas. EL PAIS avanz¨® como precio fijado para la fusi¨®n el canje de dos acciones Coca (4.590 pesetas de valor burs¨¢til) por tres Banesto (1.590 pesetas de valor burs¨¢til al cambio de aquel d¨ªa). Banesto matiz¨® ese dato y lo calific¨® de incompleto, ya que se preve¨ªan otras compensaciones econ¨®micas en met¨¢lico y en valores del grupo Banesto. En cualquier caso, se dijo entonces, se respetar¨¢n matem¨¢ticamente los valores burs¨¢tiles. El anuncio de la operaci¨®n de fusi¨®n se hizo el mismo d¨ªa en que las juntas de accionistas de los bancos Central e Ib¨¦rico autorizaban la integraci¨®n de esta entidad en aqu¨¦lla, operaci¨®n firmada y conocida un mes antes, que se consum¨® un mes despu¨¦s y que supuso para el Central pasar a ocupar el primer puesto de la banca nacional.

Negociaciones posteriores entre Banesto y Coca permitieron llegar a un acuerdo de canje de acciones que, seg¨²n una carta de Ignacio Coca a los accionistas de su banco, fechada el 1 de febrero, se hab¨ªa establecido en: trece acciones Banesto (6.890 pesetas) por cada tres Coca ¨ªntegramente desembolsadas (6.885 pesetas). Coca cuenta con 4,5 millones de acciones de quinientas pesetas de nominal desembolsadas en su totalidad. Para las acciones nuevas del banco (mill¨®n y medio), desembolsadas en un 25%, se fijaba un canje de siete Banesto y 73,2 pesetas por cada dos acciones Coca.

Este canje se respet¨® en sus l¨ªneas generales en el acuerdo definitivo, aunque con algunas matizaciones. Tanto el Banco de Espa?a como el Consejo Superior Bancario informaron favorablemente la fusi¨®n a primeros de febrero y el Ministerio de Hacienda concedi¨® a finales de abril las exenciones fiscales correspondientes a la concentraci¨®n de empresas. El 28 de abril las juntas generales de las dos entidades aprobaron la fusi¨®n. El presidente de Banesto, se?or Aguirre, precis¨® los ¨²ltimos detalles sobre el precio de la operaci¨®n. Banesto adquiri¨® directamente de la familia Coca el 69% del banco al precio de 5.560 millones de pesetas. No se concret¨® en la junta ni el cu¨¢ndo ni el c¨®mo de este pago. El resto del capital del banco se adquirir¨¢ mediante canje de acciones en los porcentajes se?alados en la carta de Ignacio Coca que hemos indicado anteriormente; las ¨²nicas modificaciones son el abono de un duro en el canje de 13 X 3 y de 75,21 pesetas en el de 3 X 2. El canje implica para Banesto realizar una ampliaci¨®n de una por diez acciones, que supone crear ocho millones de t¨ªtulos. La junta generall autoriz¨® esta emisi¨®n y aprob¨® la renuncia de los accionistas para suscribirla.

Seg¨²n ha podido saber EL PAIS, lo percibido por la familia Coca no les otorga una posici¨®n tan preeminente, como se pens¨® en un principio, en el capital de Banesto, y el met¨¢lico cobrado les permitir¨¢ compensar diversos riesgos del banco y afrontar las responsabilidades fiscales.

Uno de los compromisos del acuerdo entre Banesto e Ignacio Coca era el de la adjudicaci¨®n de tres puestos en el consejo de Banesto a la familia Coca, uno de ellos de vicepresidente. Este compromiso se hizo p¨²blico en la rueda de prensa se?alada anteriormente (21 de diciembre), as¨ª como en la junta general de Banesto celebrada el 28 de abril. En algunos medios se ha especulado con la posibilidad de que Ignacio Coca no llegue a sentarse en el consejo de Banesto. Por parte de Banesto no ha habido ning¨²n pronunciamiento en contra y, oficiosamente, se pone de relieve que Banesto respeta la palabra dada. Sin embargo, todo parece indicar que el propio Coca renunciar¨¢ a sentarse de inmediato en la mesa del consejo y se dedicar¨¢ a la direcci¨®n del grupo de sus sociedades.

Impuestos para Banesto

Otro problema para Banesto se plantea a nivel fiscal por la fusi¨®n. Aunque Hacienda concedi¨® los beneficios fiscales de concentraci¨®n de empresas que eximen de diversos impuestos, como el de transmisiones patrimoniales, la Administraci¨®n ha estimado que las modificaciones en el balance del Coca, producidas despu¨¦s de que ¨¦ste fuera presentado para obtener los beneficios correspondientes a la concentraci¨®n de empresas, no son titulares del beneficio. El coste fiscal para Banesto por esta v¨ªa puede ascender a unos doscientos millones