Un juez, nueva v¨ªctima del terrorismo en Italia

El terrorismo ha cobrado una nueva v¨ªctima en Italia en Alfredo Paolella, encargado de la observaci¨®n criminol¨®gica en la c¨¢rcel de Poggioreale y secretario de la facultad de Medicina de N¨¢poles. Fue asesinado en la ma?ana de ayer dentro del garaje mientras retiraba su autom¨®vil. Dos j¨®ve?es lo empujaron contra el muro mientras un terrorista dec¨ªa a los empleados del garaje: ?Apartaos, porque aqu¨ª se dispara.? El atentado fue reivindicado por la organizaci¨®n Primera L¨ªnea, que act¨²a paralelamente a las Brigadas. Ultimamente, Paolella hab¨ªa demostrado el deseo de abandonar su trabajo en relaci¨®n con las c¨¢rceles. ?Lo hab¨ªan amenazado? Lo cierto es que en el proceso de Tur¨ªn las Brigadas Rojas hab¨ªan ya anunciado que seguir¨ªan atacando a cuantos tienen responsabilidad directa en las c¨¢rceles. La informaci¨®n que las Brigadas Rojas poseen acerca de la actividad, a veces secret¨ªsima, de jueces y consejeros del Ministerio de Justicia, ha vuelto a poner sobre el tapete la grave sospecha de que los terroristas posean esp¨ªas que regalan o venden noticias preciosas. Por ejemplo, al parecer s¨®lo el ministro de Gracia y Justicia sab¨ªa que el juez asesinado el martes en Roma hab¨ªa sido consultado, dando parecer negativo, acerca de la posibilidad de conceder la gracia a la br¨ªgad¨ªsta Besuschio para canjearla con Aldo Moro como deseaban los socialistas. La clase pol¨ªtica est¨¢ muy preocupada sobre todo porque L'Espresso ha publicado palabra por palabra el texto completo de una cumbre supersecreta en la presidencia del Gobierno del 17 de marzo, al d¨ªa siguiente del secuestro de Moro. Hab¨ªan asistido s¨®lo Andreotti y los secretarios de los partidos que sostienen al Gobierno. Seg¨²n declar¨® ayer Andreotti no existen textos oficiales de aquella reuni¨®n dada su reserva absoluta. De estos textos lo ¨²nico que ha impresionado es una frase de Craxi en la cual afirma: ?Se dir¨ªa que aqu¨ª alguien desea a Moro muerto.? En la calle, la gente se hace una misma pregunta: ?qui¨¦n maneja todo este tinglado para impedir que el Parlamento y el Gobierno puedan preocuparse seriamente de los problemas econ¨®micos?