Madrid tendr¨¢ un circuito para hacer "footing"

En Europa se entiende el deporte como un derecho del pueblo. Para ello no se construyen instalaciones deportivas, que siempre suponen un notable gasto. Se aprovechan los recursos naturales para desarrollar la actividad del deporte. Los recursos del paisaje permiten, por sus m¨²ltiples acondicionamientos, lograr con poco dinero un escenario adecuado para las actividades m¨¢s naturales y sencillas.Los pasillos verdes, las pistas finlandesas, el test de Macolin, los estadios naturales, los circuitos ?Vita?, las pistas de transpiraci¨®n, las zonas de musculaci¨®n al aire libre, los test deportivos y los parques ?Trimm? son usuales en los pa¨ªses que conciben el deporte como una necesidad humana. AETIDE defiende que el contacto con la naturaleza sirve para reencontrar el equilibrio f¨ªsico y ps¨ªquico, amenazado continuamente por el ruido, las prisas y los problemas cotidianos; una sensaci¨®n de libertad invade a las personas que se sumergen en este ambiente natural. Esta asociaci¨®n, integrada por profesores de educaci¨®n f¨ªsica, m¨¦dicos, ec¨®logos y t¨¦cnicos en la construcci¨®n, cree que si el hombre est¨¢ compuesto de una inteligencia y un cuerpo, tan necesario es desarrollar un elemento como otro.

Esta nueva manera en Espa?a de entender el deporte mediante unos circuitos en que el esfuerzo f¨ªsico pueda calcularse mediante unas tablas y el usuario pueda programar su actividad, frecuencia y duraci¨®n, fue creaci¨®n de AETIDE. Todo comenz¨® cuando el Ayuntamiento madrile?o recibi¨® a los organizadores de la marat¨®n popular de Madrid. Se habl¨® de esta idea, que entusiasm¨® al alcalde, y antes de que AETIDE construyera alg¨²n tipo de circuito, el Consejo Superior de Deportes le encarg¨® que dos boletines, de los que saca uno cada dos meses, fueran monogr¨¢ficos sobre el acondicionamiento de zonas arboladas naturales y semiurbanas y urbanas para el deporte, bajo la promesa de comprar 2.000 ejemplares. El resultado de esta gesti¨®n es que el d¨ªa 9 de noviembre se inaugurar¨¢ el primer circuito de footing existente en Espa?a. El Ayuntamiento pagar¨¢ la mano de obra y el mantenimiento del circuito y contar¨¢ con una subvenci¨®n del Consejo. Burgos y Sevilla est¨¢n tambi¨¦n interesadas en adaptar para el deporte zonas naturales y no se descarta que en Madrid se realicen tambi¨¦n en parques. De cualquier manera, AETIDE pondr¨¢ por su cuenta en marcha m¨¢s circuitos, que tambi¨¦n pueden ser para bicicletas.

El recorrido que se va a realizar en Madrid va a ser muy parecido a los conocidos como ?Vita?, de los que en Suiza hay m¨¢s de 150. Se trata de un circuito, en este caso de cinco kil¨®metros, jalonado con unas veinte estaciones con un poste descriptivo de los ejercicios a realizar. La separaci¨®n entre las estaciones no es fija y se adaptan al terreno lo m¨¢ximo posible. Pueden ir de los cien a los cuatrocientos metros. Los ejercicios se repiten tantas veces como el usuario lo crea conveniente para su estado f¨ªsico, aunque en los paneles estar¨¢ se?alado el n¨²mero que conviene hacer seg¨²n sea ni?o, adulto o persona ya ciertamente entrenada. En unas estaciones habr¨¢ aparatos que servir¨¢n para hacer el ejercicio -siempre con elementos naturales, como troncos, para no destruir el paisaje natural-, y en otras, s¨®lo el cuerpo humano y el terreno natural son los dos elementos que toman parte en ¨¦l. Al final de cada estaci¨®n se indicar¨¢ el modo de seguir el circuito: corriendo, a paso gimn¨¢stico o andando.

Otros circuitos

El aprovechamiento del paisaje natural para el deporte permite la construcci¨®n de muchos m¨¢s circuitos que, con el tiempo, se instalar¨¢n en Espa?a. Pasamos a explicar a continuaci¨®n en qu¨¦ consisten.

Pasillos verdes: Se usan para esquiar en invierno y correr o pasaear en verano. Una red de albergues permite comer, detenerse o pasar la noche. En esta red de caminos que enlazan los parques se encuentra la mayor¨ªa de las instalaciones deportivas.

Pistas finlandesas: Permiten correr descalzo y entrenarse muchas horas sin que sufran las articulaciones y son ideales para los principantes. Se construyen con un fondo de hojarasca y una capa de serr¨ªn.

Test de Macol¨ªn: Una serie de ejercicios permiten medir la condici¨®n f¨ªsica por medio de unas puntuaciones.

Estadios naturales: En un circuito se intercalan zonas especiales para la pr¨¢ctica de saltos y lanzamientos y explanadas para juegos de bal¨®n.

Pistas de transpiraci¨®n: Se utilizan para poner en forma a los que no hacen deporte y para el mantenimiento de la forma f¨ªsica. Fundamentalmente se trabajan cinco o seis grupos de m¨²sculos.

Zonas de musculaci¨®n al aire libre: Se hace gimnasia con elementos naturales a base de ramas, troncos o sogas. Para mayor eficacia se coloca una serie de aparatos que permiten hacer ejercicios de musculaci¨®n.

Test deportivos: Un conjunto de aparatos miden el estado de forma del individuo.

Parques ?Trimm?: Salen de la uni¨®n de una pista de entrenamiento con una zona de aparatos independiente, m¨¢s una zona de juegos infantiles y una de caba?as con vestuario, sauna y dep¨®sito de material.

Toda esta variedad de circuitos obra en poder del Consejo Superior de Deportes con planos de construcci¨®n de aparatos y caracter¨ªsticas. Otra vez una idea del deporte para todos sale de una asociaci¨®n que nada tiene que ver con los organismos deportivos oficiales. Primero fue MAPOMA, con la organizaci¨®n de la marat¨®n de Madrid, que reuni¨® a 8.000 personas: ahora es AETIDE quien pone el deporte al alcance de todos. Esto es s¨®lo un primer paso. En estudio est¨¢ el aprovechamiento del paisaje urbano para el deporte, en el que los primeros beneficiados ser¨ªan los ni?os con una construcci¨®n m¨¢s racional y deportiva de los campos de juego.

Para el desarrollo de este plan hay que clasificar la poblaci¨®n en los siguientes grupos: preescolar, ni?os de seis a once a?os, mayores de once a?os, j¨®venes, adultos y ancianos. Para los preescolares es importante el desarrollo de la experiencia espacial y las sensaciones perceptivas, las actividades psicomotoras, los juegos de construcci¨®n y las actividades de imitaci¨®n, invenci¨®n, dramatizaci¨®n y de grupo. Para los ni?os de seis a once a?os hay que desarrollar las actividades motoras, expresivas, creativas y de dramatizaci¨®n. Para los mayores de once a?os, la continuaci¨®n de las motoras e inicio de las deportivas propiamente dichas, las actividades de construcci¨®n, las socioculturales y otras, como el conocimiento y cuidado de animales y especies del reino vegetal. Para los j¨®venes es bueno el desarrollo de la competitividad, para lo que necesitan campos deportivos reglamentarlos. Y para los adultos y ancianos, praderas, paseos con bancos, ¨¢reas de juegos populares, etc¨¦tera, pues sus actividades decrecen.