Los sindicatos italianos, dispuestos a dar una respuesta dura al Gobierno
En la noche del viernes estall¨® la temida ruptura entre Gobierno y sindicatos. Andreotti, como ya se preve¨ªa en las ¨²ltimas horas, se mantuvo duro en lo referente a aumentos de sueldos no s¨®lo a los auxiliares de los servicios sanitarios que mantienen en situaci¨®n ca¨®tica en casi todos los hospitales desde hace m¨¢s de veinte d¨ªas, sino tambi¨¦n a todo el personal del empleo p¨²blico.
El jefe del Gobierno, Giulio Andreotti considera que los aumentos van contra el plan de desarrollo ?Pandolfi? y ha decidido llevar el problema al Parlamento. La respuesta de los tres grandes gremios sindicales CISL, CGIL y UIL ha sido un¨¢nime: ?Dar una respuesta decidida y dura al intento de Andreotti de eludir su responsabilidad ?, seg¨²n afirmaron los dirigentes de esas tres organizaciones al salir con las manos vac¨ªas de una reuni¨®n con el Gobierno.
La primera respuesta ser¨¢ una huelga general -es ya la segunda en una semana- de todo el personal sanitario. A ello se a?ade las amenazas de huelga general sucesiva de todos los trabajadores de la Administraci¨®n p¨²blica.
En cuanto al debate parlamentario sobre el tema, los observadores m¨¢s optimistas afirman que los partidos de la mayor¨ªa de Gobierno no podr¨¢n dejar de apoyar a Andreotti. Pero quiz¨¢ las cosas no sean tan f¨¢ciles para el presidente del Consejo. Los socialistas est¨¢n divididos. Craxi contin¨²a diciendo que si hay crisis ¨¦sta no depender¨¢ del PSI. Pero Giacomo Mancini, uno de los l¨ªderes m¨¢s importantes del partido, ha declarado: ?La hip¨®tesis de una crisis es cada d¨ªa m¨¢s concreta?, aunque a?adi¨®: ?Se pueden evitar las elecciones anticipadas y vivificar la actual forma de Gobierno.?
El ¨®rgano oficial del PCI, L'Unita, advierte que ?en algunos sectores pol¨ªticos est¨¢ en curso un intento de echar sobre los comunistas las consecuencias de la crisis de Gobierno?. Hay quien piensa que el Partido Comunista est¨¢ dividido y entre la espada y la pared. porque se le est¨¢ planteando con toda acritud la contradicci¨®n de ser un ?partido de lucha y de Gobierno?, como dijo Berlinguer, con la realidad de que el pa¨ªs puede luchar poco si no desea hacer caer el Gobierno, y que, al mismo tiempo, sostiene un Gobierno que act¨²a en manera que satisface siempre menos a las diversas fuerzas sociales progresistas.
El secretario general del PSI, Bettino Craxi, interrogado por los periodistas acerca de una supuesta intenci¨®n de promover ?elecciones anticipadas?, respondi¨®: ?No s¨¦ con qu¨¦ inter¨¦s se pueden desear las elecciones anticipadas, puesto que mientras nosotros estamos creciendo ellos est¨¢n con dificultades.?
En cuanto a los comunistas, se espera con mucho inter¨¦s el discurso que el secretario general del PCI, Berlinguer, pronunciar¨¢ hoy en Bolonia en el congreso de los administradores del partido.
C¨ªrculos pol¨ªticos y period¨ªsticos especulan en Roma con la eventualidad de que en este discurso el secretario general de los comunistas italianos matice y resuelva una parte de los aspectos contradictorios por los cuales cruza la pol¨ªtica de su partido.
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