Contin¨²a la ca¨ªda del d¨®lar

Paralelamente a unas declaraciones de marcado signo optimista del secretario norteamericano del Tesoro, Michael Blumenthal, en el sentido de que las medidas antiinflacionarias surtir¨¢n efecto antes de seis meses, el d¨®lar conoci¨® ayer en los mercados internacionales nuevas paridades record a la baja frente a las divisas fuertes occidentales.

Como consecuencia inmediata del descenso de la divisa norteamericana, contin¨²a creciendo la denominada fiebre del oro, hasta el punto de haber alcanzado y los 241,30 d¨®lares de cotizaci¨®n por onza en lingote en el mercado de Londres. El desarrollo de la sesi¨®n en el mercado se caracteriza desde hace varias semanas por el incremento incesante y fren¨¦tico de las ¨®rdenes de compra, desde todos los puntos del mundo. Dada la situaci¨®n del d¨®lar, los expertos estiman que el alza de las cotizaciones del metal seguir¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas, a pesar de la ola de ventas que pueda desatarse con ¨¢nimo de realizaci¨®n de beneficios.La divisa norteamericana alcanz¨® ayer la. paridad de cuatro francos franceses en el mercado de Par¨ªs, hecho sin precedentes desde que se inici¨® la ca¨ªda del d¨®lar. En Londres y Francfort, principales mercados europeos con el franc¨¦s, las divisas nacionales mostraron tambi¨¦n importantes avances respecto a la estadounidense. As¨ª, la libra esterlina se coloc¨® en 2,09 d¨®lares y fueron 1,7 los marcos alemanes al cambio respecto al d¨®lar. Tambi¨¦n en Tokio, el d¨®lar se cotiz¨® a 1,78 yen, paridad que no se alcanzaba desde el final de la segunda guerra mundial.

Respecto a las manifestaciones de Blumenthal. ¨¦ste afirm¨® que las medidas de la fase 2 del Plan Carter deber¨ªan ser entendidas por empresarios y sindicatos antes de criticarlas, ya que eran muy complejas. Asimismo augur¨® que las cotizaciones en Wall Street se recobrar¨ªan en cuanto el programa de medidas fuera analizado y se constatara su idoneidad. Hasta el momento, la realidad contradice el optimismo del secretario federal del Tesoro, ya que las cotizaciones en la Bolsa neoyorquina muestran un retroceso incesante desde que fueron anunciadas las medidas antiinflaci¨®n, en las que nadie parece confiar. aparte de las autoridades federales y el propio presidente Carter.