"La Constituci¨®n culmina mi lucha por las libertades"
La consecuci¨®n de un r¨¦gimen de libertades para Espa?a ha sido, desde el comienzo de la dictadura, el objetivo primero de Sim¨®n S¨¢nchez Montero. Para este viejo dirigente comunista, al que su especial sentido de la pol¨ªtica ha hecho pasar intocado por todos los avatares del PCE, y que fue perseguido y encarcelado repetidamente por el franquismo, aprobar la Constituci¨®n significa, ante todo, conseguir ese r¨¦gimen de libertades.
Pregunta. ?Qu¨¦ significa para un dirigente comunista, con su historia de clandestinidad y prisi¨®n pol¨ªtica, aprobar una Constituci¨®n en Espa?a, en 1978?Respuesta. Para m¨ª supone un aspecto muy importante en la culminaci¨®n de algo por lo que he luchado toda mi vida. Es decir, un hito fundamental en el establecimiento de un r¨¦gimen de libertades pol¨ªticas en nuestro pa¨ªs, objetivo al que ha estado orientada toda mi actividad como comunista desde 1939. No porque mi ambici¨®n como comunista y como miembro del PCE se limitara a eso, sino porque la posibilidad de desarrollo de las fuerzas democr¨¢ticas y obreras y la marcha hacia el socialismo y el comunismo, que es nuestro objetivo ¨²ltimo, ten¨ªa como condici¨®n imprescindible establecer ese r¨¦gimen, porque s¨®lo dentro de la libertad y la democracia, desarroll¨¢ndolas y profundiz¨¢ndolas en todos los aspectos de la vida pol¨ªtica, econ¨®mica, social, etc¨¦tera, se pueden ir realizando las transformaciones de todo tipo que permitan llegar a la sociedad socialista.
P. En concreto, ?qu¨¦ supone para un comunista espa?ol de hoy aprobar una Constituci¨®n que establece, por ejemplo, la Monarqu¨ªa parlamentaria?
R. Que en el hecho constitucional figuren aspectos como ¨¦ste no disminuye en absoluto nuestra apreciaci¨®n de que esta Constituci¨®n es la que corresponde a la democracia espa?ola en este momento, y en consecuencia nuestro s¨ª rotundo a la misma y el consejo de que se vote masivamente en favor de ella.
En cuanto a la Monarqu¨ªa parlamentaria, y quiero subrayar lo de parlamentaria, a lo largo de toda la dictadura, desde el final de la guerra, el PCE ha hecho hincapi¨¦ en la necesidad de establecer un r¨¦gimen democr¨¢tico, m¨¢s que en el hecho de que fuera mon¨¢rquico o republicano. Desde el momento de su legalizaci¨®n en abril de 1977, el partido ha dicho que aceptar¨¢ la Monarqu¨ªa mientras ¨¦sta sea un factor positivo para el desarrollo de la democracia en nuestro pa¨ªs. La realidad pol¨ªtica de la Espa?a de hoy demuestra que la Monarqu¨ªa, el Rey, es un factor important¨ªsimo en la consolidaci¨®n de la democracia en Espa?a. Por eso, sin haber renunciado a nuestros ideales republicanos, aceptaremos plenamente la Monarqu¨ªa, mientras siga cumpliendo como hoy un papel muy positivo para la democracia.
P. ?Y la econom¨ªa de mercado?
R. Espa?a es un pa¨ªs capitalista, y la Constituci¨®n tiene que reflejar esa realidad y proteger, en consecuencia, la propiedad privada, la econom¨ªa de mercado, etc¨¦tera. Pretender lo contrario ser¨ªa una utop¨ªa, y con utop¨ªas no se puede hacer pol¨ªtica.
Pero al mismo tiempo, la Constituci¨®n establece el car¨¢cter social de la propiedad, y deja abierta la posibilidad legal, constitucional, de que en el futuro un Gobierno de izquierdas pueda realizar profundas transformaciones econ¨®micas y sociales que nos acerquen al socialismo.
P. Tambi¨¦n se constitucionaliza la Iglesia cat¨®lica.
R. En este punto, la Constituci¨®n sienta las bases para dar una soluci¨®n justa a un problema secular de Espa?a, el de las relaciones Iglesia-Estado, sobre la base de la libertad de conciencia, el respeto a todas las creencias, incluidos los ciudadanos no creyentes, y garantiza la libertad -de cultos. La menci¨®n a la Iglesia cat¨®lica recoge una realidad que existe en Espa?a, pero no supone en absoluto privilegio ni ning¨²n tipo de confesionalidad del Estado.
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