Problemas pol¨ªticos, comprometen el Sistema Monetario Europeo

El fracaso de la cumbre europea de Bruselas es valorado de forma dispar en los respectivos pa¨ªses de la Comunidad Econ¨®mica Europea, aun con la coincidencia de que ha supuesto una confirmaci¨®n del poder del eje Bonn-Par¨ªs. La renuncia brit¨¢nica y las reservas de Italia e Irlanda a entrar en el nuevo Sistema Monetario Europeo (SME) son m¨¢s una postura pol¨ªtica que un planteamiento t¨¦cnico, ya que, de hecho, las bancas centrales de los nueve pa¨ªses de la CEE vienen aplicando desde antes de la reuni¨®n de Bruselas los mecanismos para mantener una estabilidad entre las distintas divisas europeas.Gran Breta?a, por motivos estrictos de pol¨ªtica electoral, e Irlanda e Italia, en aras de protagonizar un intento de obtener mayor apoyo econ¨®mico de los pa¨ªses fuertes de la CEE, han comprometido el ¨¦xito de la ¨²ltima cumbre de jefes de Estado o de Gobierno de la Europa comunitaria. El desarrollo de las maratonianas sesiones en la sede de la Comisi¨®n Europea dej¨® traslucir la presi¨®n italiana para recabar mayores beneficios del sistema de transferencias comunitarias, con la velada amenaza de no entrar en el SME si sus demandas no eran atendidas. A ¨²ltima hora, la posici¨®n francesa -oficiosamente se supo que Giscard calific¨® despectivamente las demandas de los pobres- hizo que Irlanda uniera sus tesis a las de Roma y dejara en un ambiguo suspenso su entrada en el marco unitario.

Pese a lo encontrado de las posturas, nadie parece dudar de que tanto Irlanda como Italia acceder¨¢n a integrar el SME, aunque no descarten mayores compensaciones por parte de los grandes, en aras de garantizar sin riesgos el s¨ª definitivo que, en el fondo, nadie duda terminar¨¢ por surgir. La c¨®moda postura brit¨¢nica, en un claro esperar y ver, es muy probable que tenga un tope temporal, pactado con el premier brit¨¢nico, planteado incluso al margen de la reuni¨®n.

Lo que s¨ª queda claro es que el pseudoacuerdo de Bruselas, con una gestaci¨®n cargada de tensiones pol¨ªticas, saldr¨¢ reforzado tras el planteamiento t¨¦cnIcode los debates de la reuni¨®n de gobernadores de bancos centrales, convocada para el fin de semana en Basilea, y el Consejo de Ministros de Finanzas, a celebrar el pr¨®ximo d¨ªa 18, en la capital comunitaria.

Queda por conocer, en los pr¨®ximos d¨ªas, la respuesta de los invitados a participar en el SME: los pa¨ªses n¨®rdicos y Suiza, as¨ª como los tres candidatos al ingreso en la Comunidad (Grecia, Portugal y Espa?a). Aunque ninguno de ellos se ha pronunciado, parece que Grecia responder¨¢ afirmativamente, bajo la amenaza de una ralentizaci¨®n en las negociaciones, que ser¨ªa fatal para el primer ministro, Caramanlis. Portugal no ve clara la integraci¨®n del escudo, y en Espa?a, el criterio de los responsables del Banco de Espa?a es poco proclive a la integraci¨®n. Ello supone que tambi¨¦n los tres candidatos responder¨¢n a la invitaci¨®n de integrar el SME por motivos estrictamente pol¨ªticos.