Fern¨¢ndez Ord¨®?ez insta al Gobierno a que pacte econ¨®micamente

?La reforma fiscal no es el ¨²nico instrumento de legitimaci¨®n ¨¦tica de la econom¨ªa de mercado, ni puede ser una pieza aislada de la pol¨ªtica econ¨®mica. Aun valorando la profundidad de la transformaci¨®n realizada, no puede esperarse que este sistema tributario renovado sea el ¨¢rbitro ¨²nico de la estabilidad econ¨®mica o el instrumento solitario de la justicia?, dijo ayer el ministro de Hacienda, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, en el Pleno del Congreso de los Diputados durante su discurso en defensa del proyecto de ley de impuesto sobre sociedades, que ayer se debati¨® en la C¨¢mara baja.

El se?or Fern¨¢ndez Ord¨®?ez concluy¨® este p¨¢rrafo de su discurso -que en los pasillos de la C¨¢mara se interpret¨® como un ?telegrama p¨²blico? a su colega el ministro de Econom¨ªa y vicepresidente segundo del Gobierno, Fernando Abril- con las siguientes palabras: ?Necesitamos abordar cambios fundamentales sobre unas estructuras envejecidas. Tenemos necesidad de un Estado movilizador de recursos, capaz de regenerar la actividad real del pa¨ªs. Nunca se escoge una pol¨ªtica cuando los problemas son graves. Hay que recuperar la trama del di¨¢logo social si no se quiere que al final todo sea demasiado poco y demasiado tarde. ?Instantes despu¨¦s, cuando Fern¨¢ndez Ord¨®?ez pas¨® por delante del banco azul, camino de su esca?o, recibi¨® de Fernando Abril una cari?osa palmada en la espalda que suscit¨® murmullos en los bancos de la izquierda.

Pr¨®xima modificaci¨®n del C¨®digo Penal

La sesi¨®n se inici¨® con un breve debate sobre la proposici¨®n de ley de modificaci¨®n de la ley de Peligrosidad Social y rehabilitaci¨®n social de su reglamento, que fue aprobada por 278 votos favorables, ninguno en contra y seis abstenciones.

En su intervenci¨®n por parte del Gobierno, el ministro de Justicia, Landelino Lavilla, anunci¨® que en el plazo de dos meses, una vez promulgada la Constituci¨®n, ser¨¢ enviado a las Cortes un proyecto de ley sobre modificaci¨®n del C¨®digo Penal, en el que se insertar¨¢n aquellos supuestos de peligrosidad, con una consideraci¨®n basada en medidas de seguridad. Asimismo, anunci¨® un proyecto de ley sobre Drotecci¨®n social, que no tendr¨¢ car¨¢cter punitivo.

Antes de entrar en el estudio del punto siguiente del orden del d¨ªa, el proyecto de ley del impuesto de sociedades, se produjo un intrincado debate interpretativo sobre el reglamento, cuyo fondo era la admisi¨®n de unas enmiendas de Alianza Popular y otros grupos parlamentarios fuera de plazo, por aplicaci¨®n flexible del reglamento.

Los socialistas Gregorio Peces-Barba y Eduardo Mart¨ªn Toval insistieron en el car¨¢cter irregular de la admisi¨®n de tales enmiendas y en las dificultades para pronunciar-se sobre ellas sin conocerlas por no liaberse publicado. No faltaron golpes de humor al implicarse en el debate virtudes teologales y cardinales, que Jos¨¦ Pedro P¨¦rez Llorca (UCD) no distingui¨® con precisi¨®n y que Manuel Fraga (AP) aprovech¨® para relatar alguna an¨¦cdota y concluir expresando la necesidad deque se defienda el reglamento m¨¢s en su esp¨ªritu que en su letra. La cuesti¨®n se zanj¨® con una votaci¨®n que respald¨® la interpretaci¨®n adoptada por el presidente de la C¨¢mara.

La reforma fiscal de Fern¨¢ndez Ord¨®?ez

En defensa del proyecto de ley de impuesto sobre sociedades intervino en primer lugar el ministro de Hacienda, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, quien record¨® su compromiso contra¨ªdo ante la C¨¢mara de realizar una reforma fiscal que en buena parte ya se llab¨ªa realizado y que se concreta en ocho proyectos de ley. Se?al¨® que faltan por discutir el impuesto de sucesiones y la imposici¨®n indirecta y record¨® que ya fue aprobado el impuesto sobre el patrimonio, un impuesto sint¨¦tico, sobre la renta con un tratamiento avanzado de la-s ganancias de capital y mecanismos rotundos de discusi¨®n y control como el delito fiscal, la investigaci¨®n de las cuentas corrientes bancarias y el ataque del fraude a trav¨¦s de las sociedades interpuestas.

Refiri¨¦ndose al proyecto de ley de impuesto sobre sociedades, manifest¨® que con ¨¦l se completa la reforma de la imposici¨®n sobre la renta y se consolidan los principios que la inspiran. Declar¨® que el impuesto sobre sociedades garantiza que toda la renta, sea cual fuese su titular, ?quedar¨¢ sometida a gravamen como exige el principio de la capacidad de pago? y que introduce un desplazamiento de la carga desde la imposici¨®n sobre las empresas hacia las personas f¨ªsicas, ?que son, en definitiva, los verdaderos detentado res de la capacidad de pago?.

Asimismo el ministro de Hacienda destac¨® que el proyecto de ley culmina la tarea de subjetivizaci¨®n del impuesto de sociedades, estableciendo el gravamen exclusivamente sobre el beneficio realmente obtenido, mientras desaparecen los impuestos de producto y se superan los conceptos objetivos que todav¨ªa conserva el impuesto vigente. Se refiri¨® tambi¨¦n a la aproximaci¨®n entre las categor¨ªas fiscales y econ¨®micas que resultan habituales en el mundo empresarial, y dijo que en este sentido el proyecto de ley resulta m¨¢s flexible en cuanto a la calificaci¨®n de los gastos fiscales, a la vez que concluye con el paternalismo fiscal. A?adi¨® que la nueva ley presta especial atenci¨®n al tratamiento de la inversi¨®n empresarial.

Por ¨²ltimo, el se?or Fern¨¢ndez Ord¨®?ez expres¨® su deseo de no describir un panorama triunfal. ?Nunca se pasa en materia fiscal de la impercepci¨®n absoluta a la percepci¨®n total. Ahora que se habla de la distancia del pueblo respecto a sus instituciones representativas, yo quiero recordar, hablando de la reforma fiscal -dijo-, que han sido estas Cortes, durante un a?o y medio en un debate libre, las que han hecho posible lo que desde muchos a?os todos sab¨ªamos que era necesario.?

Di¨¢logo entre socialistas y UCD

El debate sobre el proyecto de ley se convirti¨® en un di¨¢logo entre los socialistas, en nombre de los cuales intervinieron preferentemente Baldomero Lozano y Enrique Bar¨®n, y UCD, en nombre de cuyo grupo intervino, en defensa del proyecto de ley, Jaime Garc¨ªa A?overos. La ¨²nica enmienda que prosper¨® fue la formulada por Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico y defendida por Juan Rovira, seg¨²n la cual entre las exenciones del impuesto se incluyen ?las cantidades donadas a entidades privadas de promoci¨®n industrial cuya actuaci¨®n se limite a aquellas regiones de nivel de renta inferior a la media nacional, y en los t¨¦rminos que reglamentariamente se determinen?.

Menos suerte tuvieron las enmiendas socialistas, como la que intent¨® que el domicilio fiscal de los sujetos pasivos del impu esto de sociedades se fijara no -como dice el proyecto de ley- en donde est¨¦ efectivamente centralizada la gesti¨®n administrativa y la direcci¨®n de los negocios, sino donde la empresa de que se trate tuviera la mayor¨ªa simple de sus inmovilizaciones, en un intento de aproximar el sujeto del impuesto a la realidad econ¨®mica de la sociedad y no a la conveniencia fiscal de sus dirigentes.

Tampoco prosperaron las enmiendas de Alianza Popular, defendidas por Laureano L¨®pez Rod¨®, entre las que destac¨® el intento de crear un fondo exento del impuesto que las empresas destinar¨ªan a despidos.

En la explicaci¨®n de voto del Grupo Comunista, Marcelino Camacho se felicit¨® por el rechazo de esta enmienda y manifest¨® la conveniencia de cerrar portillos a las empresas para despedir trabajadores en el momento de crisis en que nos encontramos. En la sesi¨®n de ayer se aprobaron catorce art¨ªculos. La sesi¨®n continuar¨¢ hoy.