Lecciones de catal¨¢n
He le¨ªdo con pena el art¨ªculo de Federico-Jim¨¦nez Losantos sobre ?El destino cultural de la emigraci¨®n en Catalunya?, publicado en el diario de su direcci¨®n del pasado d¨ªa 7 de este mismo mes y a?o. A trav¨¦s de sus largas y a veces complicadas parrafadas he sacado la conclusi¨®n que este se?or acusaba a los catalanes de querer imponer nuestra lengua a los millares de inmigrantes que en los ¨²ltimos a?os han llegado a nuestra regi¨®n. A su juicio ?hay que sentar las bases de una pol¨ªtica cultural que proteja de modo inequ¨ªvoco los derechos fundamental¨ªsimos de estos ciudadanos a mantener su lengua (la castellana), no como una reliquia familiar y folkl¨®rica, sino como v¨ªa y norma de plena identificaci¨®n ciudadana y dernocr¨¢tica?.Por lo le¨ªdo, el se?or Jim¨¦nez desconoceel art¨ªculo 3 del anteproyecto del Estatuto de Catalunya, recientemente aprobado unanimemente por los propios parlamentarios catalanes. Este art¨ªculo dice: ? 1. La lengua propia de Catalu?a es el catal¨¢n; 2. El idioma catal¨¢n es el oficial en Catalu?a, juntamente con el castellano, bf¨ªcial en todo el Estado espa?ol; 3. La Generalidad garantiza el uso normal y oficial de los dos idiomas, tomando las medidas necesarias para asegurar su conocimiento ... ? En vista de estas normas, ?c¨®mo puede el se?or Jim¨¦riez afirmar que el castellano ?es una causa perdida en Catalu?a?? Si los propios catalanes garantizan su uso y conocimiento, cosa que el r¨¦gimen de Franco no supo hacer con el idioma catal¨¢n, sino todo lo contrario. ?Es que el se?or Jim¨¦nez pertenece al antiguo partido ¨²nico, lengua ¨²nica, sindicato ¨²nico?
Por otra parte, nos extra?a mucho que el se?or Jim¨¦nez haya olvidado lecciones tan claras sobre el catal¨¢n como las de Men¨¦ndez Pelayo o Jos¨¦ Mar¨ªa Pem¨¢n, que siendo de pura cepa castellana comprendieron perfectamente el problema de la cultura catalana, que no es precisamente el de imponerse a los dem¨¢s, sino sencillamente el de sobrevivir y resistir las feroces embestidas del centralismo. Y nos extra?a que haya obridado tambi¨¦n la sabidur¨ªa y elegancia del viejo refr¨¢n castellano que dice: ?Donde quiera que fueres, haz lo que vieres.? Parece como si el se?or Jim¨¦nez lo entendiera al rev¨¦s y dijera: ?Do quiera que fueres, imp¨®n lo que quisieres.?
A veces los catalanes decimos que ?Hu¨¦spedes vinieron, que de casa nos echaron.? El se?or Jim¨¦nez nos da pie para recordar este refr¨¢n, no concedi¨¦ndonos ni el derecho a tener ?nuestra casa propia?. Atentamente.
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