Fant¨¢stico

?( ... ) Somos de los que pensamos que la publicidad en la televisi¨®n result¨® horriblemente pesada en la anterior campa?a, aunque no nos atrevemos a decir que fueran precisamente los partidos mayoritarios los m¨¢s amenos y digeribles en sus exposiciones. Creemos tambi¨¦n q¨²e la aparici¨®n en televisi¨®n debe mantener cierta proporcionalidad con el poder de convocatoria real de los partidos, aunque defendemos que este criterio debe corregirse, por principio, en favor del derecho de los minoritarios a dejarse ver y o¨ªr. Est¨¢bamos de acuerdo, por tanto, con la necesidad de replantear el tema, entendiendo que en ello no s¨®lo deb¨ªa entrar una revisi¨®n de las duraciones, sino tambi¨¦n una sustituci¨®n de los mon¨®logos por debates y di¨¢logos.En esta l¨ªnea, nos hubiera parecido correcto que inmediatamente despu¨¦s de convocarse la consulta se hubiera sacado a relucir el tema. La Junta Electoral Central ten¨ªa que haber revisado las normas y ,establecer un nuevo reglamento de juego que fuera conocido a priori por todos. Los que nos aburrimos antes del 15-J lo habr¨ªamos agradecido.

Pero no. Con las listas cerradas y sin encomendarse ni a Dios ni al diablo, los hombres de UCD han decidido cambiar las normas a su antojo. Gesto unilateral, gesto abusivo, gesto injusto. Otra vez, en definitiva, el peso del puedo obligar y obligo, utilizando en este caso el verbo poder en su sentido m¨¢s f¨ªsico y menos ¨¦tico."

Despu¨¦s de que algunos partidos presentaran candidatura al Congreso en veinticinco provincias, p¨ªecisamente para cumplir los requisitos legales vigentes y poder asomarse a la peque?a pantalla, el gesto centrista es tan caprichoso como podr¨ªa haber sido -y lo decimos a t¨ªtulo de ejemplo- el establecer que s¨®lo pudieran promocionarse desde Televisi¨®n aquellos partidos que tuvieran como n¨²mero uno de su lista por Madrid a un antiguo ministro secretario general del Movimiento.

Formalmente, ¨¦ticamente, el Gobierno no cumple con importantes obligaciones morales.

Resulta lamentable, a la vista de esta situaci¨®n, que otros partidos mayoritarios, los beneficiados por la ligereza de los ucedislas, aplaudan ante estas cosas. Y la responsabilidad del PCE, que ha hecho p¨²blica una nota de prensa justificando el golpe bajo, produce estupor. (...)?

5 febrero