Reivindican el robo de gemas falsas en el Museo de Ciencias Naturales

El portavoz de una supuesta organizaci¨®n llamada Grupo de Ge¨®logos ha reivindicado, en llamada telef¨®nica a EL PAIS, ?el robo de un rub¨ª y una esmeralda? en el Museo de Ciencias Naturales, como represalia ?por injusticias pasadas y presentes?, en lo que pod¨ªa ser el primer caso que se re cuerda de terrorismo cient¨ªfico.Para establecer con exactitud el valor de las piezas retenidas, secuestradas o confiscadas por el grupo, este diario hizo las gestiones precisas ante la direcci¨®n del museo. Pudo enterarse, as¨ª, de que los objetos all¨ª expuestos a las miradas p¨²blicas admiten la misma clasificaci¨®n que determinados grupos pol¨ªticos: los hay aut¨¦nticos y los hay reconstituidos. El director de la entidad, Eugenio Ortiz, hizo, sin embargo, la precisi¨®n de que por razones de seguridad los aut¨¦nticos permanecen bajo llave, en tanto que los reconstituidos, tienen la ¨²nica protecci¨®n del, fino cristal de las vitrinas. ?Disponemos de reproducciones de los diamantes m¨¢s c¨¦lebres, de r¨¦plicas del Cullinan, del Koi-noor o del Gran Mogol, y no s¨®lo de verdaderas gemas o de grandes pepitas de oro, sino tambi¨¦n de conchas ex¨®ticas, que se cotizan a altos precios en el mercado internacional de coleccionistas. Pero todo lo que consideramos suficientemente valioso permanece en cajas acorazadas, salvo en el caso de que abramos una exposici¨®n dotada de los necesarios dispositivos de seguridad.?

Cada a?o desaparece del Museo de Ciencias Naturales alguna formaci¨®n cuarc¨ªfera, quiz¨¢ alguna esquirla de malaquita o de lapisl¨¢zuli f¨¢cilmente convertibles en amuletos, y la direcci¨®n de la casa no interpreta estas evasiones de capital como delitos perpetrados por profesionales, sino como pasajeras debilidades de los lupines de colegio, todav¨ªa incapaces de distinguir una joyer¨ªa de una bisuter¨ªa, ni siquiera con ayuda de los libros de texto. Es cierto que en esta ocasi¨®n ciertas condiciones han variado: el desarrollo del suceso est¨¢ perfectamente catalogado en los archivos policiales. El grupo escal¨® la fachada, forz¨® una ventana, hizo el trabajo, franque¨® la puerta desde el interior y desapareci¨® en la oscuridad de la noche como al final de una fotonovela. No obstante, seg¨²n el se?or Ortiz, la operaci¨®n pierde categor¨ªa en sus consecuencias: ?Se han llevado tres piezas, todas ellas falsas e incluso mal reproducidas. La esmeralda estaba ya agrietada; hab¨ªamos decidido cambiarla con ocasi¨®n de las reformas que estamos practicando en el museo.? Se piensa, por todo ello, que el Grupo de Ge¨®logos no es, tampoco, aut¨¦ntico. Que es un grupo reconstituido.