Empresa y comit¨¦ guardan silencio en torno a las negociaciones en la Michelin de Vitoria

Como una especie de consenso t¨¢cito de la parte social y la econ¨®mica, que comenzaron el martes ya formalmente, la negociaci¨®n del convenio colectivo para la f¨¢brica Michelin, de Vitoria, tales deliberaciones han entrado en un comp¨¢s de espera, que se supone no ofrecer¨¢ novedades en ning¨²n sentido hasta el pr¨®ximo fin de semana. Durante el d¨ªa de ayer no hubo reuni¨®n de las partes negociadoras. Aunque ambas afirman que quedaron en tener un pr¨®ximo encuentro, lo cierto es que a¨²n no se conoce ni la hora ni la fecha de la pr¨®xima entrevista. Lo que s¨ª se ha anunciado es la reuni¨®n organizada por cargos sindicales de CCOO de Euskadi, que tendr¨¢ lugar el s¨¢bado y el domingo, en San Sebasti¨¢n, en la sede de la Uni¨®n Provincial de Comisiones de Guip¨²zcoa, a la cual asistir¨¢n representantes del sindicato comunista franc¨¦s CGT y representantes de los trabajadores de Michelin en Francia e Italia. Oficialmente, el ¨²nico punto que figura en el orden del d¨ªa de la reuni¨®n es abortar el tema de la introducci¨®n de un cuarto turno de trabajo, que la pol¨ªtica laboral de Michelin considera necesario para aumentar la productividad de sus instalaciones, afirmando que tambi¨¦n beneficia a la parte social, ya que rebaja su jornada actual de 44 horas semanales a una media de 39. Este sistema de jornada ha comenzado a funcionar este a?o en la f¨¢brica de Aranda de Duero y existe autorizaci¨®n laboral para su implantaci¨®n en la de Valladolid. Las plantillas y sus representantes en Lasarte (Guip¨²zcoa) y Vitoria se oponen la tal distribuci¨®n de jornada. pues concentra las mayores jornadas por el verano e implica trabajar en bastantes semanas del a?o hasta las ¨²ltimas horas del s¨¢bado.Todos los representantes laborales, tanto los m¨¢s integrados con las centrales como los m¨¢s alejados de ellas. se resisten a hacer cualquier comentario sobre la reuni¨®n del martes. aunque alguno no ha desmentido las versiones dadas ayer por la prensa en el sentido de que la contrapropuesta econ¨®mica hecha por la empresa no ha supuesto un aumento de lo que ya ofreci¨® la direcci¨®n en enero. De confirmarse esta versi¨®n, no se ven posibilidades de que la negociaci¨®n pueda continuar, ya que no habr¨ªa base para ello. Y en este contexto el comp¨¢s de espera actual debe interpretarse en que una parte del comit¨¦ tendr¨ªa sus temores de que una rotura brusca y clara de negociaciones, dadas las delicadas circunstancias del momento actual, originar¨¢ un desenlace lamentable de la situaci¨®n creada por el secuestro. Esa supuesta divisi¨®n del comit¨¦ en este tema obligar¨ªa a llevar las disyuntivas que se plantean a conocimiento de la asamblea de trabajadores, para que ¨¦sta decida los pasos a seguir.