Renuncia inminente de La Malfa a formar Gobierno en Italia

Los socialistas italianos pidieron ayer al encargado de formar Gobierno, el republicano Ugo La Malfa, que aplace un d¨ªa su decisi¨®n de presentarse al presidente de la Rep¨²blica, Alessandro Pertini, para transmitirle su renuncia. Socialistas y social- dem¨®cratas utilizar¨¢n este plazo de veinticuatro horas para llevar a cabo una labor de mediaci¨®n ante comunistas y dem¨®crata-cristianos, las dos principales fuerzas pol¨ªticas italianas.Si los socialistas no hubiesen planteado este ¨²ltimo plazo, La Malfa hubiese presentado hoy mismo, muy probablemente, su renuncia a Pertini, poniendo as¨ª fin a la esperanza de que, por primera vez, tras 34 a?os de monopolio dem¨®crata-cristiano del poder, un ?laico? consiguiese formar Gobierno en Italia.

La jornada de ayer, con el encuentro de La Malfa con los dos grandes partidos, Democracia Cristiana (DC) y el Partido Comunista italiano (PCI), fue decisiva. Todos los observadores hab¨ªan se?alado que estos dos encuentros ser¨ªan definitivos para la creaci¨®n del nuevo Gobierno. Terminada la reuni¨®n entre La Malfa y la DC, una declaraci¨®n lac¨®nica de su secretario general, Benigno Zaccagmini, dio ya a entender que las dificultades para La Malfa hab¨ªan aumentado. El m¨¢ximo l¨ªder dem¨®crata-cristiano dijo que, aun apreciando las propuestas hechas por el presidente encargado del Gobierno acerca de la estructura del nuevo Gobierno que deseaba formar, se reservaba el dar una respuesta hasta despu¨¦s de la reuni¨®n de la direcci¨®n de su partido.

Pero fue Enrico Berlinguer, secretario del PCI, quien pr¨¢cticamente hizo caer todas las ilusiones. El secretario comunista dijo que la delegaci¨®n comunista hab¨ªa confirmado al presidente encargado el apoyo pleno a una pol¨ªtica de unidad y solidaridad democr¨¢tica ?que consideramos a¨²n m¨¢s necesario -dijo- ante la agravaci¨®n del estado del pa¨ªs y de la situaci¨®n internacional que acarrea graves riesgos para la misma paz mundial?.

Berlinguer a?adi¨® que el Partido Comunista est¨¢ dispuesto a cargar con toda la responsabilidad derivante de una participaci¨®n directa en un Gobierno de coalici¨®n que es, sin duda, ?lo m¨¢s adecuado a las necesidades del pa¨ªs?. Pero, puesto que ?tanto la Democracia Cristiana, como el Partido Social Dem¨®crata se oponen a esta soluci¨®n?, los comunistas, afirm¨® Berlinguer, hemos propuesto a La Malfa que forme un Gobierno con representantes del Partido Republicano, Comunista y Socialista, el cual, bajo un programa pactado, pueda ser apoyado externamente por la Democracia Cristiana. Berlinguer no acept¨® la idea de La Malfa de crear, paralelamente a un Gobierno sin los comunistas, una forma colegial de encuentros peri¨®dicos de los secretarios de todos los partidos.

Seg¨²n Berliriguer esta f¨®rmula no es jur¨ªdica y no garantiza la presencia real del PCI en el Gobierno. S¨®lo podr¨ªa ser aceptada con la condici¨®n de que La Malfa formase un Gobierno de t¨¦cnicos de todos los partidos, ?sin excluir personalidades de la izquierda independiente, elegidos en las listas del Partido Comunista?.