"El Plan Nacional de Investigaci¨®n se ha convertido en una lucha de intereses"

?El Plan Nacional de Investigaci¨®n se ha convertido en una lucha de intereses?, han manifestado Jos¨¦ G¨®mez Acebo y Luis Mu?oz, miembro del comit¨¦ cient¨ªfico del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas, el primero perteneciente a la federaci¨®n socialdem¨®crata de Lasu¨¦n, y el segundo militante del PSOE.

El comit¨¦ cient¨ªfico est¨¢ constituido por diecisiete miembros, de los cuales doce son elegidos democr¨¢ticamente por todos los investigadores, dentro de la nueva reglamentaci¨®n del Consejo. ?La estructura del CSIC -a?aden- es hoy la m¨¢s democr¨¢tica que existe en nuestro pa¨ªs, entre los organismos que hacen ciencia. El CSIC ha sido, de siempre, mucho m¨¢s abierto que la Universidad. Aqu¨ª nunca ha habido depuraciones pol¨ªticas, cosa que s¨ª ha ocurrido en la Universidad. Muchos de los profesores que fueron echados de la Universidad encontraron acomodo en el Consejo, como es el caso del hist¨®logo Federico de Castro y tantos otros. Por eso, no comprendemos que, basados en un historial de pureza democr¨¢tica, se pretende dejar en v¨ªa muerta al Consejo. Creemos que es un error seguir fomentando el corporativismo de unas entidades que est¨¢n llamadas a entenderse.?Los cient¨ªficos del CSIC, seg¨²n indicaron, estaban preocupados desde hace tiempo con los misterios en tomo a las continuas modificaciones del Plan Nacional de Investigaci¨®n. Desde hac¨ªa tiempo hab¨ªan presionado para que este tema se debatiera en la junta de gobierno del Consejo y, por fin, lo ha logrado en la ¨²ltima, celebrada la semana pasada.

?Lo que nos dijo el presidente del CSIC -a?ade G¨®mez Acebo- es que el plan hab¨ªa quedado reducido a 55.000 millones de pesetas, de las cuales 20.000 eran para la Universidad, 3.000 para el Consejo y el resto para un fondo com¨²n que ser¨ªa distribuido por un organismo a crear, que ir¨ªa a sustituir a la actual comisi¨®n asesora de investigaci¨®n cient¨ªfica y t¨¦cnica.?

El plan al que hacen referencia ambos cient¨ªficos espa?oles responde a una idea primitiva de distribuci¨®n de fondos adicionales a nuestra investigaci¨®n, dado que la inflaci¨®n hab¨ªa hecho insuficientes las ya exiguas cantidades destinadas a esta atenci¨®n. Aproximadamente, m¨¢s del 90% de los fondos del Estado iba dirigida a cubrir el pago de las n¨®minas de personal, lo que demostraba la paralizaci¨®n pr¨¢ctica de la investigaci¨®n cient¨ªfica del pa¨ªs.

El plan ascendi¨® a unos 73.000 millones de pesetas, pero esta cantidad fue recortada m¨¢s tarde a unos 55.000 millones de pesetas. Pese a todo, Espa?a ocupa los ¨²ltimos lugares de Europa occidental y Am¨¦rica del Norte por sus gastos de investigaci¨®n.

Al finalizar octubre, los 55.000 millones de pesetas del plan se hab¨ªan distribuido de la siguiente forma: 20.000 millones para la investigaci¨®n en la Universidad, 10.000 para la investigaci¨®n del CSIC; 10.000 para la investigaci¨®n en los dem¨¢s centros oficiales, y, el resto, unos 13.000 millones de pesetas, a la comisi¨®n asesora de investigaci¨®n cient¨ªfica y t¨¦cnica para la financiaci¨®n de programas de investigaci¨®n, becas para la formaci¨®n de nuevos investigadores y relaciones internacionales.