Problema de competencias Iglesia-Estado

En el conflicto profesional surgido entre la jurisdicci¨®n eclesi¨¢stica del arzobispado de Madrid-Alcal¨¢ y el Colegio de Abogados de Madrid subyace un problema de competencias entre la Iglesia y el Estado, que se ha hecho m¨¢s evidente tras la separaci¨®n legal entre ambas potestades, reconocida en la Constituci¨®n, y la firma, en enero pasado, del acuerdo parcial sobre asuntos jur¨ªdicos entre la Santa Sede y el Estado espa?ol, pendiente todav¨ªa de la ratificaci¨®n del Parlamento.Seg¨²n este acuerdo, los tribunales eclesi¨¢sticos s¨®lo ser¨¢n competentes para tramitar las causas de nulidad, pasando las de separaci¨®n a la competencia de los tribunales civiles. Ello significa que la actividad de los tribunales eclesi¨¢sticos del arzobispado de Madrid-Alcal¨¢ va a reducirse en el futuro. Las sentencias de nulidad s¨®lo podr¨¢n tener eficacia en el orden civil si se declaran ajustadas al Derecho del Estado en resoluci¨®n dictada por el tribunal civil competente. La participaci¨®n de letrado, seg¨²n las normas que rigen el ejercicio de la abogac¨ªa en la tramitaci¨®n de las causas, es uno de los requisitos que exige el Derecho del Estado para que la sentencia dictada tenga validez.

Mientras la Iglesia, en el conflicto surgido con el Colegio de Abogados de Madrid, declara que tiene derecho en el ¨¢mbito de su jurisdicci¨®n a establecer las normas que crea convenientes conforme al Derecho Can¨®nico, el Colegio de Abogados de Madrid responde que esta actitud ser¨ªa coherente si las sentencias dictadas en dicho ¨¢mbito no necesitasen la resoluci¨®n de un tribunal civil para ser eficaces. Seg¨²n el punto de vista del Colegio madrile?o, recurrir a las leyes del Estado a efectos de la eficacia de las sentencias dictadas en las causas de nulidad, y no someterse a dichas leyes en la tramitaci¨®n de estas causas, s¨®lo puede ser calificado de privilegio.