Primer estudio sobre el papel de la mujer en la resistencia antifranquista

Giuliana di Febo, feminista italiana, profesora de Literatura Espa?ola de la Universidad de Roma y militante de izquierda, ha escrito lo que muchas espa?olas conoc¨ªan, pero que no hab¨ªan sido capaces de contar: el importante papel que desempe?aron las mujeres en el movimiento de resistencia antifranquista. Su trabajo, publicado en Espa?a por la Editorial Icaria, se present¨® el jueves pasado en 19 Librer¨ªa de Mujeres, con asistencia de la propia Giuliana di Febo y de Mar¨ªa Dolores Calvet, ex diputada por el PSUC, que ha prologado el libro. Bel Carrasco habl¨® con la autora italiana.

Pregunta. H¨¢blenos primero de su libro, Resistencia y movimiento de mujeres en Espa?a (1936-1976).

Respuesta. El objetivo de mi trabajo ha sido descubrir cu¨¢l fue la participaci¨®n de las mujeres en la resistencia espa?ola a trav¨¦s de los testimonios de las que estuvieron recluidas por motivos pol¨ªticos, en el penal de Ventas sobre todo, las que tuvieron a su marido en la c¨¢rcel por la misma causa o las que, desde el exilio o la guerrilla, formaron parte de la lucha clandestina contra el franquismo.

Nada m¨¢s empezar a reunir datos me di cuenta que era necesario ampliar el concepto de la lucha desarrollada por las mujeres espa?olas y considerar tambi¨¦n la intervenci¨®n de miles de mujeres an¨®nimas que actuaron, no ya como militantes, sino como madres, esposas o hermanas. Muchas de ellas se movilizaron por razones puramente afectivas, pero terminaron por politizarse.

Las mujeres que aceptaron un compromiso pol¨ªtico sufrieron el drama de su maternidad, pues ten¨ªan necesariamente que dejar a sus hijos con los abuelos o familiares y ello les creaba un grave complejo de culpa, pues la imagen de. la mujer-madre est¨¢ presente en todos los status de la sociedad y tambi¨¦n en las organizaciones de izquierda.

Otro fen¨®meno significativo es la discriminaci¨®n de la mujer en la clandestinidad. Aunque sufr¨ªan los mismos riesgos que los hombres, era normal que se les relegara a funciones secundarias, como las de servir de enlace, cobertura, etc¨¦tera.

P. Mar¨ªa Antonietta Macciocchi, ex diputada del PCI y catedr¨¢tica de la Universidad de Vincennes, ha publicado hace poco en Francia un libro que ha despertado una viva pol¨¦mica entre las feministas hist¨®ricas: Les femmes et leurs maitres (?Las mujeres y sus amos?), en cuyo pr¨®logo anuncia el ocaso del feminismo, el regreso triunfal de la misoginia y la disoluci¨®n de los colectivos de autoconsciencia que se formaron en Italia. ?Cu¨¢l es su postura en esta pol¨¦mica? ?Piensa que ha llegado el momento de entonar el r¨¦quiem del movimiento feminista italiano?

R. En absoluto. Lo que ocurre ahora en Italia es que el feminismo no aparece tanto p¨²blicamente como antes, porque atraviesa una etapa de estudio y reflexi¨®n. Se han creado diversos colectivos para profundizar en temas espec¨ªficos, como la mujer en relaci¨®n con la pol¨ªtica, la ciencia o la universidad, y otros que trabajan en los centros sa-nitarios para hacer aplicar la ley del aborto.

Por otra parte, gracias a la actuaci¨®n de las mujeres desde dentro de los partidos pol¨ªticos y sindicatos y al empuje del movimiento en general, ¨¦stos han asumido por fin la tem¨¢tica de la mujer: aborto, violaciones, sexualidad, etc¨¦tera. Hace poco hubo un caso de aborto y por primera vez en la historia los sindicatos convocaron espont¨¢neamente una asamblea.

P. ?Se puede decir que ha generado una cultura propia?

R. S¨ª; se puede decir que existe una verdadera cultura feminista: en el teatro, que ahora vive un buen momento en Italia; en el cine, en las actividades que organizan los grupos de mujeres en la Universidad... En cuanto a la literatura, se produce desde hace unos a?os un fen¨®meno interesante que ya empieza a darse en Espa?a. Aparecen muchas novelas escritas por mujeres, que tratan, en forma de diario, autobiograf¨ªa o autoan¨¢lisis, los choques y contradicciones que sufren como consecuencia de su voluntad de liberaci¨®n. Casi todos estos libros terminan con un ep¨ªlogo abierto. No ofrecen salidas o soluciones porque todav¨ªa no las hay. Las novelas de Armanda Guiducci o Rosa Rossi son algunas que ahora recuerdo.