Los Ministerios de Asuntos Exteriores y Comercio se disputan las agregadur¨ªas comerciales del exterior
La pr¨®xima cobertura de la agregadur¨ªa comercial de la embajada de Espa?a en Lisboa ha reabierto el contencioso existente entre los Ministerios de Asuntos Exteriores y Comercio sobre el control de las oficinas comerciales en las representaciones diplom¨¢ticas de Espa?a en el extranjero. Este debate. y otras cuestiones como agregadur¨ªas de Cultura, Informaci¨®n y sueldos de los diplom¨¢ticos han provocado un creciente malestar en el seno del palacio de Santa Cruz.
El Ministerio de Comercio ha propuesto a F¨¦lix Pareja como candidato a la agregadur¨ªa comercial de la embajada de Espa?a en Portugal. De aceptarse por Exteriores dicha proposici¨®n, el Ministerio reducir¨ªa a seis las embajadas en las que controla dicha agregadur¨ªa (Londres, Washington, La Haya, Par¨ªs, Rabat y Buenos Aires) en favor del Ministerio de Comercio, que aspira a un control total de las delegaciones, que hasta hace poco estaba repartido en la proporci¨®n de cuatro a una (cuatro de Comercio por una de Exteriores) y que, finalmente, se redujo a siete, con la cesi¨®n de la representaci¨®n de Bonn a Comercio, que ha incorporado a su control las nuevas oficinas que se abrir¨¢n, como la proyectada de Tr¨ªpoli.Este viejo problema de las competencia comerciales en el exterior ha creado un cierto malestar en el palacio de Santa Cruz, porque incide en el concurso de puestos de la llamada Junta de la Carrera, encargada de regular los nuevos destinos en el servicio exterior. El problema, que se suma a la captura por la Secretar¨ªa de Estado de la Informaci¨®n de los agregados de prensa de las embajadas y de la ambici¨®n del Ministerio de Cultura de controlar los agregados culturales, ha provocado una escalada de inquietudes entre los diplom¨¢ticos de carrera, que am¨¦n de quejarse de sus sueldos -?unos de los m¨¢s bajos de la Administraci¨®n?, aseguran-, est¨¢n tambi¨¦n sorprendidos por los rumores relativos al posible deseo del Ministerio de Industria de contar tambi¨¦n con delegados propios en el exterior, al menos en las embajadas m¨¢s significativas.
A todo esto se suma que, al t¨¦rmino del ¨²ltimo concurso de destinos de la Junta de Carrera, se ha constatado que el ministro de Relaciones con la CEE, Leopoldo Calvo Sotelo, ha impuesto como n¨²mero dos de la Misi¨®n de Espa?a ante la CEE a su ex colaborador y familiar Camilo Barcia, ex embajador en Abu Dhabi, en contra del candidato de Exteriores. Un acuerdo del Consejo de Ministros del pasado mes de febrero le asignaba el control de la citada Misi¨®n, como fue recientemente aclarado en el Pleno del Congreso.
Asimismo, el precedente de la Misi¨®n ante la CEE y de la pol¨ªtica de negociaciones hispano-comunitarias completamente en manos del palacio de la Trinidad, que copa la informaci¨®n -lo que sumado al embate del Ministerio de Comercio deja con pocas competencias a la Direcci¨®n General de Relaciones Econ¨®micas Internacionales de Exteriores-, parece ser que ha servido de argumento al embajador de Espa?a en Washington, Jos¨¦ Llad¨®, quien, al parecer, querr¨ªa formar su propio equipo en la embajada de Espa?a en la capital norteamericana, as¨ª como tener una especie de droit de regard sobre el embajador de Madrid en la OEA, en la actualidad el se?or Pedroso, que podr¨ªa ser sustituido por el ex director general de Asuntos Eclesi¨¢sticos, Zulueta. Al embajador Llad¨®, cu?ado del ministro Oreja, se le increpa en el palacio de Santa Cruz de puentear este Ministerio con la Presidencia del Gobierno y de excluir a sus colaboradores de Washington de informaci¨®n elemental.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.