Socialistas y comunistas franceses podr¨ªan actuar de nuevo conjuntamente
La preocupaci¨®n general provocada por las ¨²ltimas medidas econ¨®mico-sociales del Gobierno, en el sentido de la austeridad que desde hace tres a?os caracteriza la pol¨ªtica del Gabinete Barre, invita de nuevo a los socialistas a so?ar con la difunta Uni¨®n de lzquierda. Los comunistas parecen dispuestos a una acci¨®n conjunta contra el Gobierno, pero no se sabe con qui¨¦n se unir¨ªan, ni es seguro que, salvo Mitterrand, alguien desee unirse con ellos.Dos a?os despu¨¦s, la historia se repite, pero a la inversa. En agosto de 1977, el l¨ªder comunista Georges Marchais regresaba de vacaciones con su ?bomba? en el bolsillo: ?Se acab¨® la Uni¨®n de la Izquierda?, vino a decir, de manera m¨¢s o menos enrevesada.
Despu¨¦s, durante los dos a?os transcurridos, el partido Socialista (PS), en un alarde de masoquismo sin precedentes, ha gozado imp¨¢vido de una aut¨¦ntica bacanal de injurias, de postergaciones, todas procedentes del PCF, ¨²nicamente preocupado por frenar la audiencia creciente de los que fueron sus aliados, para poder as¨ª disimular mejor el estancamiento del que ¨¦l sufre desde hace veinte a?os.
Al cabo de estos dos a?os de dolor por el PS, Marchais, regres¨® de vacaciones igualmente con otra ?bomba?: para luchar contra la pol¨ªtica Giscard-Barre."estoy dispuesto a unirme con el diablo", dijo el l¨ªder comunista el otro d¨ªa. El dicho popular hubiera pasado inadvertido si el PS no existiera. Pero ha bastado tan poca cosa para que, a pesar del letargo del verano, el primer secretario de los socialistas, Fran?ois Mitterrand, empujara hacia el estrado p¨²blico a uno de sus allegados, el miembro del secretario, nacional Paul Quiles, con la misi¨®n de responderle a Marchais. Quiles, ayer, solicit¨® que con urgencia ?se vuelva a la Uni¨®n de la Izquierda? y, para mejor convencer a los comunistas de que nunca han ?girado a la derecha hizo exactamente el mismo an¨¢lisis, que Marchais de la pol¨ªtica econ¨®mico-social que realiza el Gobierno: ?Es el ataque m¨¢s violento que se ha operado en Francia, desde hace mucho tiempo, contra los asalariados.?
La ilusi¨®n de los socialistas seguramente se confort¨® ayer por la ma?ana cuando el diario comunista L'Humanit¨¦ crey¨® necesario explicar lo que significaba ?unirse con el diablo?.
No se trata, dec¨ªa el portavoz del PCF, de unirse con Chirac y con Debr¨¦, y explicitaba: ?Hoy se trata de crear una poderosa agrupaci¨®n para impedir un ¨¦xito del golpe bajo del Gobierno.?
Los observadores estiman que, sin duda, ?el PCF ha abierto una puerta, pero de ah¨ª a recrear ?la Uni¨®n de la Izquierda? median muchos abismos, empezando por el que suponen los franceses..., ?descontentos con el poder actual, pero no menos desconfiados respecto a la oposici¨®n?.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.