Nuevo circuito permanente en Espa?a

Un tercer circuito va a crearse en Espa?a, que ir¨¢ a unirse al Jarama (Madrid) y Calafat (Tarragona), ¨²nicos que funcionan en la actualidad. Su emplazamiento est¨¢ fijado en las proximidades de Vigo (Pontevedra) y es obra de las gestiones realizadas por Manuel Sanjurjo, tras los acuerdos establecidos entre la Federaci¨®n Espa?ola de Automovilismo, que preside Fernando de Baviera, y el Consejo Superior de Deportes.Fruto de dichas conversaciones, surgi¨® la posibilidad de que la Federaci¨®n se encargase de adquirir los terrenos -o de que los ayuntamientos respectivos los cediesen-, donde el CSD construir¨ªa el circuito, que posteriormente quedar¨ªa en poder de la Federaci¨®n. El montante total de las obras no deber¨ªa sobrepasar los sesenta millones, por lo que habr¨ªa que hacer siempre circuitos peque?os y funcionales, absolutamente. exentos de lujos in¨²tiles y costosos.

Posteriormente, el responsable de estos asuntos en la Federaci¨®n, Carmelo Ezpeleta -director del circuito del Jarama, que pertenece al RACE, y del de Calafat, propiedad de una empresa privada- busc¨® tres zonas geogr¨¢ficas donde podr¨ªan instalarse otros tantos circuitos, con el fin de producir un desarrollo de este deporte en las ¨¢reas geogr¨¢ficas m¨¢s necesitadas. Las zonas elegidas fueron Andaluc¨ªa, Levante y Galicia, y en ellas comenzaron a rastrearse posibles enclaves y a gestionar con los ayuntamientos respectivos la cesi¨®n gratuita de los terrenos, siempre a cambio de la riqueza que una obra de este tipo genera en todo el ¨¢rea.

Por fin, una aspiraci¨®n cumplida

Ahora, la brillante gesti¨®n realizada por Manuel Sanjurjo en Galicia parece haber dado ya el fruto apetecido. El enclavamiento est¨¢ muy pr¨®ximo a la ciudad de Vigo -donde, adem¨¢s, la afici¨®n al automovilismo cuenta con a?os de historia-, y en una zona donde la belleza del paisaje puede resaltar a¨²n m¨¢s el futuro circuito, Porque, llegado a un acuerdo el Ayuntamiento con la Federaci¨®n, s¨®lo queda por materializarse el desembolso por parte del Consejo Superior de Deportes, cosa que no debe demorarse demasiado. Y, una vez realizado ¨¦ste, Galicia contar¨¢ con un circuito permanente para la pr¨¢ctica del automovilismo, aspiraci¨®n que han tenido los aficionados gallegos desde hace a?os y que, por unas u otras razones, nunca han podido ver cumplida.De esta forma, la pobreza actual de este pa¨ªs en materia de circuitos permanentes -s¨®lo existen dos, mientras que en Francia, o en Italia, hay m¨¢s de una docena-, que es una de las razones de la falta de progreso del automovilismo, se ver¨¢, siquiera parcialmente, paliada. Y, adem¨¢s, el nuevo circuito de Galicia puede servir de est¨ªmulo para que, en las otras regiones, se creen tambi¨¦n circuitos, sin lujos y sin ostentaciones -condicionantes que han impedido la creaci¨®n de otros, por aumentar de forma considerable los costos, pero que se han perseguido en demasiadas ocasiones-, pero funcionales de cara a la pr¨¢ctica y al desarrollo del deporte del autom¨®vil.