Denuncia contra las actividades de la CIA en Africa
Las actividades clandestinas y desestabilizadoras de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos ?son las responsables, en no poca medida, de la intromisi¨®n de otros pa¨ªses en los asuntos del continente africano?, seg¨²n Sean Macbride, presidente de la Comisi¨®n Internacional de Comunicaciones de la Unesco, premio Nobel de la Paz en 1974.Macbride manifiesta esta opini¨®n en el prefacio de la obra Trabajos sucios 2: la CIA en Africa, una edici¨®n especial de la cual fue distribuida en septiembre con vistas a la sexta reuni¨®n cumbre de los pa¨ªses no alineados de La Habana.
Al explicar las razones que tuvo para escribir el prefacio, Macbride dice que siente un profundo afecto y gran admiraci¨®n por Estados Unidos y su pueblo, pero que ?la supervivencia de esta gran democracia resulta gravemente amenazada por las acciones criminales clandestinas de la CIA y sus servicios asociados?.
La existencia, seg¨²n Macbride, de amplios complejos de espionaje y paramilitar, como la CIA y otras agencias de inteligencia norteamericanas, tiende a crear una dependencia de las autoridades pol¨ªticas, legislativas y ejecutivas?.
Adem¨¢s, en muchos casos, la CIA ha sido uno de los factores que han conducido a la pol¨ªtica exterior norteamericana a otorgar armas, dinero y apoyo pol¨ªtico a gobiernos corruptos o movimientos que carecen de credibilidad.
Aliadas de la CIA han sido las polic¨ªas secretas de Portugal (la PIDE); de Ir¨¢n (la Savak), y de Sur¨¢frica (la BOSS). Todas las dictaduras latinoamericanas han contado con su apoyo. Adem¨¢s, la CIA ha sido utilizada por los servicios secretos brit¨¢nicos, franceses y alemanes occidentales para realizar actividades clandestinas en otras partes del mundo.
Macbride se?ala como alarmantes las sospechas que indican que la CIA y el Pent¨¢gono conoc¨ªan, y probablemente colaboraron, en el desarrollo de la capacidad nuclear de Sur¨¢frica.
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