Salvar la democracia
Como ciudadano hondamente preocupado por el momento hist¨®rico que vivimos, el editorial del d¨ªa 25 me ha supuesto una evidente sensaci¨®n de alivio.La entereza moral y la clarificaci¨®n de posturas son factores que se est¨¢n echando de menos en la interesada confusi¨®n a que quieren sometemos.
No es precisamente la democracia culpable de todo lo que tendenciosamente se la atribuye. M¨¢s bien la falta de profundizaci¨®n y de sinceridad de las estructuras que han de consolidarla; siendo adem¨¢s estas carencias el mapa de campa?a de la estrategia terrorista.
Sinceramente les felicito. Por moverme en unas coordenadas normalmente alejadas de la l¨ªnea de ese diario, no hay inter¨¦s en el elogio. Pienso, empero, que, cuando tantas cosas importantes est¨¢n en juego, s¨®lo debe haber un compromiso: salvar nuestra identidad como colectividad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.