El presidente franc¨¦s inaugur¨® la exposici¨®n antol¨®gica de Picasso

?Lo que m¨¢s admiro es el genio de Picasso. El genio en arte no tiene ¨¦poca?, coment¨® el presidente de la Rep¨²blica Francesa, Valery Giscard d'Estaing, tras haber recorrido la exposici¨®n de unas ochocientas obras del pintor malague?o, parte integrante del conjunto con el que los herederos le han pagado al Estado franc¨¦s los derechos de sucesi¨®n. Antes de que se le abrieran las puertas al p¨²blico, fue inaugurada por el presidente y por el reducido grupo de invitados, entre los que figuraban la familia de Picasso y el embajador de Espa?a en Francia, Miguel Solano.

El presidente franc¨¦s recorri¨® las tres plantas del Grand Palais, en las que se ha colgado la obra de Picasso, a lo largo de cerca de hora y media. El ministro de Cultura, Philippe Lecat, otras personalidades de la pol¨ªtica, el embajador espa?ol, los herederos de Picasso y sus allegados m¨¢s ¨ªntimos, algunas personalidades del mundo art¨ªstico que fueron amigos del pintor, como el core¨®grafo Serge Lifar, y un ancianito al que Picasso le hab¨ªa regalado el primer cuadro que pint¨® en Par¨ªs cuando lleg¨® en 1901, asistieron al lado del se?or Giscard a esta ?premiere?, de lo que los franceses estiman como ?un tesoro sin paralelo en el mundo del picassianismo?. El se?or Giscard declar¨®: ?Personalmente lo que me gusta no es una ¨¦poca determinada de Picasso, sino el tema que inspira toda la obra. Por lo dem¨¢s, se intentara que este conjunto que pertenece ahora a todos los franceses sea conocido por el mayor n¨²mero posible, con el fin de que esta obra est¨¦ presente en todos?.Al embajador de Espa?a, se?or Solano, le caus¨® impresi¨®n ?el car¨¢cter antol¨®gico de esta soberbia exposici¨®n?. Por otra parte, se manifest¨® satisfecho del ?trato muy especial? que recibi¨® del presidente. El consejero cultural espa?ol en Par¨ªs, Gonzalo Puente Ojea, valor¨® con cierta minucia el conjunto de las obras reunidas en el Grand Palais hasta el d¨ªa 7 del pr¨®ximo mes de enero: ?No es una exposici¨®n efectista, sino m¨¢s bien pedag¨®gica. En efecto, faltan las grandes obras, que m¨¢s tarde se ver¨¢n en el Museo Picasso, como Las se?oritas de Avignon, entre otras de las que ahora pertenecen al patrimonio nacional franc¨¦s. Ahora bien, la selecci¨®n de algunos cuadros y dibujos de otro material diverso, e incluso de las esculturas, ?explica? perfectamente la evoluci¨®n de su estilo. Esta exposici¨®n permite un estudio profundo de la trayectoria de Picasso.?

Un periodista franc¨¦s estim¨®: ?La leyenda de Picasso hab¨ªa ahogado la verdad. Ahora, con esta exposici¨®n, conocemos a Picasso en su intimidad de hombre y de creador.? Cuando se abrieron las puertas del Grand Palais para los periodistas, ayer a primera hora de la tarde, un colega extranjero se escurri¨® por entre la masa que se api?aba y recorri¨® el primero la exposici¨®n a paso ligero. Interrogado al final sobre la impresi¨®n que le hab¨ªa producido pasearse, casi corriendo, solo a trav¨¦s de las ?locuras? de Picasso, explic¨®: ?Creo que, poco a poco, me emborrachaba con un sue?o consistente en correr tras una mujer escoltada por hadas sublimes, por esperpentos s¨®rdidos, por amenazas inhumanas, por esperanzas humanas, por la vida en suma. Ahora me voy, quiero pasear. No s¨¦ si volver¨¦ otro d¨ªa.?

Estas obras pasar¨¢n definitivamente al Museo Picasso, en construcci¨®n, denominado Hotel Sale, con el resto de ?los derechos de sucesi¨®n? y la donaci¨®n que los herederos le hicieron al Estado franc¨¦s de la colecci¨®n personal de Picasso. Esta ¨²ltima colecci¨®n est¨¢ colgada en el museo de Louvre desde 1978. En resumen, ayer los franceses ?honraron a Picasso como se lo merec¨ªa, y, en definitiva, honraron tambi¨¦n a Espa?a, al valorar a un genial pintor espa?ol?, anot¨® el ya citado se?or Puente Ojea.