El arzobispo de Zaragoza y la Virgen del Pilar

De los dos reportajes dedicados por EL PA?S a los congresos mariol¨®gico y mariano internacionales, recientemente celebrados en Zaragoza, el segundo, aparecido el viernes 12 de octubre, lleva por t¨ªtulo ?El arzobispo y el alcalde no creen que la Virgen del Pilar se apareciera en Zaragoza?. Esta frase ha servido de pretexto para que en peri¨®dicos de Madrid y provincias se hicieran comentarios sobre rni persona, ir¨®nicos unas veces, insultantes en alg¨²n caso, escandalizados casi siempre. Con el ¨¢nimo de informar a los lectores de buena fe le ruego haga publicar en EL PA?S las siguientes puntualizaciones:

1.? En los reportajes de EL PA?S sobre los congresos de Zaragoza no se cita ninguna expresi¨®n de las personas entrevistadas que d¨¦ motivo suficiente para justificar el titular mencionado. No recuerdo haber dicho nada equivalente al referido titular.

2.? Como arzobispo de Zaragoza quiero manifestar con toda claridad que me identifico plenamente con la tradicional y arraigada piedad mariana de esta di¨®cesis aragonesa a la Virgen del Pilar.

3.? La devoci¨®n del pueblo cristiano a Mar¨ªa se apoya radicalmente en la revelaci¨®n divina, tal como ¨¦sta se expresa en la Biblia, especialmente en el Nuevo Testamento, y tal como es propuesta por el magisterio de la Iglesia. Sobre algunos aspectos de este tema me he explicado recientemente en una instrucci¨®n pastoral de m¨¢s de un centenar de p¨¢ginas, con el t¨ªtulo ?Mar¨ªa de Nazaret, Virgen y Madre?.

4.? Las tradiciones religiosas populares, aun cuando pertenezcan en muchos casos a un ¨¢mbito de creencias diferentes al de la ense?anza que la Iglesia propone como doctrina de fe, tienen su sentido teol¨®gico y pastoral. Merecen siempre respeto. Esto no se opone a la aceptaci¨®n de los datos que ofrece la investigaci¨®n hist¨®rica. Tal norma se viene aplicando leg¨ªtimamente a las tradiciones marianas de los grandes santuarios, entre ellos el del Pilar, tan entra?atrle para nosotros.

(arzobispo de Zaragoza)