Preocupante punto muerto en la crisis de Estados Unidos e Ir¨¢n

(Viene de primera, p¨¢gina)

Informes de prensa ampliamente distribuidos ayer en Washington indicaban que los estudiantes musulmanes que ocupan la embajada han amenazado con endurecer el tratamiento dado a los rehenes si el sha abandona Estados Unidos con destino a otro pa¨ªs que no sea Ir¨¢n. La salida del antiguo monarca, una vez terminado su tratamiento m¨¦dico, posiblemente con direcci¨®n a M¨¦xico, se considera aqu¨ª como m¨¢s que probable para dentro de una semana o diez d¨ªas.

Pero estas nuevas amenazas plantean dificultades inesperadas a la Administraci¨®n Carter, que confiaba en que, una vez que el sha abandonara territorio norteamericano, ser¨ªan posibles conversaciones tendentes a la liberaci¨®n de los rehenes.

Al mismo tiempo, las contradicciones entre las palabras de miembros del Consejo de la Revoluci¨®n o del Gobierno provisional iran¨ª y las manifestaciones de los ocupantes de la embajada plantean el problema del ?interlocutor v¨¢lido?. En medios del Departamento de Estado se, subraya el papel creciente que parece desempe?ar el ministro en funciones de Asuntos Exteriores, Abol Hassan Banisadr, y se espera que el nombramiento del nuevo Gobierno clarifique la situaci¨®n. En su discurso, el jueves, Carter dijo que las autoridades iran¨ªes eran completamente responsables de la seguridad de los rehenes.

El Departamento de Estado revis¨® ayer sus estimaciones sobre el n¨²mero de rehenes, e indic¨® que, seg¨²n sus noticias, hay retenidos 62 ciudadanos norteamericanos y diez empleados de la embajada de otras nacionalidades, entre ellos un italiano, un filipino y varios hind¨²es y paquistan¨ªes. Aparte de los rehenes y los periodistas, hay s¨®lo cincuenta norteamericanos en Ir¨¢n, a?adi¨® el portavoz.

La retirada durante las pr¨®ximas tres semanas del ayatollah Jomeini no era motivo de especial preocupaci¨®n en Washington, ya que en ocasiones anteriores el l¨ªder isl¨¢mico ha tomado per¨ªodos de descanso similares y ha estado en contacto constante con el Consejo de Revoluci¨®n, aunque no ha recibido a ning¨²n extranjero.

Los m¨¢s optimistas piensan que el tiempo juega ahora a favor de Estados Unidos y que Ir¨¢n, totalmente aislado en la escena internacional, tendr¨¢ que acceder finalmente a la condici¨®n norteamericana de negociar ¨²nicamente cuando se haya puesto en libertad a los rehenes. A cambio de esta liberaci¨®n, Washington podr¨ªa acceder a la celebraci¨®n de un Consejo de Seguridad en la ONU, donde se tratar¨ªa el tema de los cr¨ªmenes del sha, pero descarta por completo cualquier posibilidad de extradici¨®n de ¨¦ste.

El clima antiiran¨ª contin¨²a creciendo de costa a costa de Estados Unidos y podr¨ªa incrementarse a¨²n m¨¢s si se confirma que el atentado con bomba contra un avi¨®n de pasajeros registrado la noche del jueves fue obra de un grupo de activistas iran¨ªes.

El avi¨®n, de American Airlines, volaba desde Chicago a Washington cuando una peque?a bomba hizo explosi¨®n en la bodega, llenando de humo la cabina de pasajeros y obligando a un aterrizaje de emergencia, sin que se produjeran v¨ªctimas. El explosivo iba en un paquete postal y fue detonado por un alt¨ªmetro adosado, que se activ¨® al alcanzar el avi¨®n una determinada altitud.

Varias llamadas telef¨®nicas a medios informativos de Chicago reivindicaron el atentado para un grupo de activistas iran¨ªes.

(M¨¢s informaci¨®n en p¨¢gina 43)