Dos espa?oles se casan en Londres para aspirar a un divorcio r¨¢pido
Muchos de los espa?oles que han pretendido un divorcio r¨¢pido han recurrido, cuando la suya era una uni¨®n bendecida por la Iglesia cat¨®lica, a di¨®cesis extranjeras que aceleraran su proceso de separaci¨®n. Un obispo espa?ol, el de Bilbao, denunci¨® en el ¨²ltimo bolet¨ªn de su di¨®cesis la situaci¨®n descrita y aconsej¨® a los jueces de su jurisdicci¨®n eclesi¨¢stica que tuvieran en cuenta lo que en este terreno estaba sucediendo. Al tiempo que el prelado vasco se refer¨ªa a esta ?fuga de causas matrimoniales?, una pareja de espa?oles segu¨ªa un camino audaz para evitar que en los tribunales espa?oles se eternice una posible causa de divorcio: se fueron a casar a Londres.
A la fuga de cerebros parece seguir en Espa?a la fuga de las parejas en trance de contraer matrimonio. Aqu¨¦llos prefer¨ªan investigar en algunos pa¨ªses del extranjero, donde la ciencia cuenta con una consideraci¨®n m¨¢s generosa. Y las parejas estiman que el extranjero es, asimismo, m¨¢s generoso con respecto a los que pudieran ser los problemas naturales de toda relaci¨®n humana.Francisco Fern¨¢ndez, de 33 a?os, y Cristina Sirviente, de veintiocho, novios espa?oles, prefirieron Londres para casarse, y lo hicieron el pasado mi¨¦rcoles, en el Registro Civil del barrio de Willesden, uno de los m¨¢s verdes de todos los que hay al norte del T¨¢mesis. Ella es enfermera y ¨¦l es vendedor. A los periodistas ingleses, que se han interesado ampliamente por su caso, los reci¨¦n casados han explicado que contraen matrimonio tan lejos de su tierra porque haci¨¦ndolo as¨ª pueden alg¨²n d¨ªa aspirar a un divorcio r¨¢pido. En cualquier caso, han dicho, esperan que el suyo sea un matrimonio largo y feliz. Vivir¨¢n en la ciudad gallega de Vigo.
Con su boda londinense, estos ciudadanos espa?oles no s¨®lo disfrutan de una luna de miel inglesa, sino que prev¨¦n un ahorro fundamental para el futuro, sobre todo si en Espa?a no se acelera la ley del divorcio. En el supuesto de que su compromiso matrimonial deba romperse alg¨²n d¨ªa, el viaje a Londres les resultar¨¢ m¨¢s barato que el tr¨¢mite legal que a¨²n tienen que seguir las parejas en Espa?a para alcanzar la nulidad de sus matrimonios, sean estos eclesi¨¢sticos o civiles.
Este recorrido que ha de seguirse en Espa?a para anular los matrimonios dibuja a veces intrincados vericuetos internacionales, porque muchas parejas acuden a di¨®cesis extranjeras, cuando el suyo ha sido un matrimonio contra¨ªdo por la iglesia, para conseguir de determinados obispos la bendici¨®n oportuna para que su uni¨®n se deshaga con todos los pronunciamientos favorables.
La Iglesia se halla preocupada por esta circunstancia. Una prueba de ello ha sido un reciente decreto del obispo de Bilbao, monse?or Luis Mar¨ªa de Larrea. En el escrito episcopal, publicado en el bolet¨ªn de su di¨®cesis, se habla de esta ?fuga de causas?. ?Con frecuencia?, escribe el prelado, ?nos llegan noticias concernientes a las fugas de causas matrimoniales de nuestra jurisdicci¨®n hacia pa¨ªses lejanos por medios faltos de suficiente fundamento.?
El obispo no s¨®lo critica el hecho, sino que centra su condena en los profesionales que facilitan esta fuga. ?Por diversos conductos?, se explica en el decreto episcopal, ?hemos sabido los fraudes y abusos graves que cometen abogados residentes fuera de los confines de nuestra di¨®cesis, con el fin de introducir causas de, nulidad de matrimonios contra¨ªdos en nuestra di¨®cesis, en varios tribunales del mundo, en especial de Africa y de Estados Unidos de Am¨¦rica.?
Seg¨²n recoge Efe, el objeto de este traslado de causas matrimoniales a otros tribunales obedece a la b¨²squeda de f¨¢ciles sentencias favorables, por lo que el obispo vasco dispone que, ?con objeto de cortar abusos? que desprestigien a la Iglesia, ?y eliminar todo motivo de esc¨¢ndalo en los fieles, ordenamos a los se?ores jueces de nuestro tribunal diocesano no concedan su autorizaci¨®n para que se tramiten en tribunales extranjeros causas matrimoniales que caen bajo la jurisdicci¨®n ordinaria?.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.