Intento de agresi¨®n a N¨²?ez en el campo del Betis
El intento de agresi¨®n al presidente barcelonista, N¨²?ez, por parte de seguidores del Betis fue la noticia de la jornada en Primera Divisi¨®n. El intento de agresi¨®n se produjo al final del partido, cuando N¨²?ez a¨²n estaba en el palco del Benito Villamar¨ªn.
El enfado de algunos hinchas del Betis contra N¨²?ez se inici¨® cuando Carde?osa sufri¨® una ca¨ªda en el ¨¢rea del Barcelona, que qued¨® sin sanci¨®n. Un hincha trep¨® al palco e insult¨® largamente a Jos¨¦ Luis N¨²?ez. M¨¢s tarde, cuando en el ¨²ltimo minuto del encuentro el Betis marc¨® el gol de la victoria, seis u ocho hinchas subieron al palco con la intenci¨®n de agredirle.Los directivos del Betis, con su propio presidente, Mauduit, al frente, consiguieron, no sin esfuerzo, evitar la agresi¨®n. En declaraciones posteriores a la prensa sevillista, N¨²?ez dej¨® caer que el intento de agresi¨®n pudo haber sido protagonizado por madridistas: ?En Sevilla tambi¨¦n hay madridistas, m¨¢s que barcelonistas. ?
Victoria b¨¦tica en el ¨²ltimo minuto
No hay forma de que el Barcelona -el equipo con mayor presupuesto econ¨®mico del pa¨ªs- enderece su triste caminar liguero. Sus jugadores, ciertamente, lucharon con fuerza, pero vieron c¨®mo en el ¨²ltimo minuto el Betis lograba su segundo y decisivo gol. Los dos equipos realizaron un f¨²tbol aceptable, con mayor empuje b¨¦tico, y respuesta al contragolpe del Barcelona.
Kempes dio un punto al Valencia
Kempes volvi¨® a ser providencial para el Valencia. Una vez m¨¢s, el equipo de Di St¨¦fano encontr¨® en el astro argentino el punto salvador, a un minuto del final. El Salamanca super¨® en la casi totalidad del partido a su rival, se adelant¨® en el marcador y pudo haber ampliado su cuenta, de no ser por su desacierto rematador y la sobriedad defensiva valencianista. Brizzola movi¨® bien al equipo charro, que acaso mereci¨® no haber llegado a ese minuto postrero en el que Kempes decidi¨®.
Dominio total alicantino para un solo gol
Un gol del ariete yugoslavo Kustodic decidi¨® un igualado partido en el campo herculano. No hubo acciones vistosas, pero s¨ª una lucha tenaz en el centro del campo. Las Palmas se aferr¨® a ello y a una ordenada y expeditiva defensa, que estuvo a punto de darle resultado. Morete, que este a?o no encuentra el camino del gol, desperdici¨® las ocasiones del equipo canario, que despu¨¦s de verse por detr¨¢s en el marcador sigui¨® intentando lograr el empate.
El M¨¢laga sac¨® un positivo del Sarri¨¢
Mal partido del Espa?ol, que confirm¨® la floja impresi¨®n dejada hace unos d¨ªas en Vallecas. El equipo de Miera anduvo desacertado, sin centrarse nunca en el juego y sin hilvanar adecuadamente entre la media y el ataque. Solamente en la acci¨®n del penalti pudo abrir la defensa del M¨¢laga, pero incluso esto result¨® in¨²til. El M¨¢laga no se desanim¨®, y un suplente, el argentino Nieto, acert¨® a igualar, con justicia.
Buena contenci¨®n almeriense en Zaragoza
El Almer¨ªa supo contener bien a los hombres punta del Zaragoza. S¨®lo Valdano cre¨® peligro, y pudo haber resuelto, especialmente en la segunda parte, al contar con el apoyo, desde atr¨¢s, del libre Antich. La disciplina en el marcaje fue la clave almeriense, y el meta Oscar, que supo despejar bien de pu?os los veinte c¨®rners que sac¨® el Zaragoza.
Corto triunfo burgal¨¦sante un pasivo Sevilla
Mereci¨® un mayor resultado el Burgos, que realiz¨® un partido aceptable, superando tristes actuaciones pasadas. El Sevilla colabor¨® lo suyo con su cierta pasividad y nulas ganas de pisar el ¨¢rea.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.