La izquierda exige que s¨®lo los jueces puedan anular los acuerdos municipales

Una amplia autonom¨ªa pol¨ªtica y financiera, que evite las constantes interferencias de los gobiernos civiles o de la Administraci¨®n central, y el establecimiento de cauces reales para que los vecinos participen en la vida de los ayuntamientos son los principios b¨¢sicos sobre los que debe apoyarse la nueva ley de R¨¦gimen Local, en opini¨®n de los representantes de UCD, PSOE, PCE y PTE, que han participado en unas jornadas sobre ?Ley municipal y participaci¨®n?.

La organizaci¨®n de las jornadas corri¨® a cargo de CIDUR (Centro de Investigaci¨®n y Documentaci¨®n Urbana y Rural) y GEA (Gabinete de Estudios y Asesoramiento). El escenario de las cuatro mesas redondas fue el Club Pueblo.El sistema de elecci¨®n de alcaldes centr¨® gran parte del debate de la primera jornada. Javier Soto, concejal madrile?o de UCD, defendi¨® el punto de vista de su partido de que sea elegido alcalde el primero de la lista m¨¢s votada, para evitar as¨ª que un pacto postelectoral de la izquierda desv¨ªe el sentido del voto popular.

Los tres representantes de la izquierda acusaron a UCD de oportunista y de utilizar su mayor¨ªa parlamentaria para inclinar a su favor la balanza de los ayuntamientos. La elecci¨®n propuesta por UCD fue calificada de antidemocr¨¢tica, ya que el alcalde representar¨¢, por lo general, a una minor¨ªa de la Corporaci¨®n y tendr¨¢ que gobernar por decreto, lo que significar¨¢ una vuelta a un sistema autoritario.

Autonom¨ªa para los ayuntamientos

La autonom¨ªa de los nuevos ayuntamientos fue una de las necesidades sentidas con mayor urgencia por todos los ponentes, y as¨ª, los representantes de UCD expresaron tambi¨¦n su disconformidad con que los gobernadores civiles puedan suspender acuerdos de los ayuntamientos, lo que ha sucedido incluso con decisiones adoptadas por unanimidad de los ediles. Un concejal centrista defendi¨®, sin embargo, el derecho de veto para los alcaldes, lo que a juicio de la izquierda resulta inadmisible, por antidemocr¨¢tico.Alonso Puerta (PSOE), Javier Garc¨ªa (PCE) y Santiago Gil (PTE) insistieron en la idea de que las decisiones de los ayuntamientos -?que, por supuesto, pueden ser ilegales en ocasiones?- s¨®lo puedan ser anuladas por v¨ªa judicial. Tal como est¨¢n ahora las cosas, ?a veces parece que no hayamos ganado las elecciones locales?, dijo Alonso Puerta, ?a la vista de la cantidad de elecciones anuladas o contestadas por las instancias del poder central?. Subray¨® tambi¨¦n que resulta inadmisible que un ayuntamiento como el de Madrid, con 37.000 millones de presupuesto y m¨¢s de 20.000 funcionarios, sin contar con la EMT, no pueda salir al mercado del suelo ni definir su pol¨ªtica urban¨ªstica porque por encima est¨¢ Coplaco, un organismo en el que la Administraci¨®n central sigue teniendo mayor¨ªa.

Junto a la necesidad de que los ayuntamientos est¨¦n dotados de una plena capacidad de gesti¨®n, lo que, por otra parte, garantiza la propia Constituci¨®n, todos los ponentes abundaron muy especialmente en la urgencia de contar con una autonom¨ªa financiera. Se record¨® en este sentido que los ayuntamientos espa?oles participan s¨®lo con un 10% en la Hacienda p¨²blica, cuando otros pa¨ªses europeos se sit¨²an por encima del 20%, y se llega incluso al 60% en Holanda.

El secretario municipal del PCE, Javier Garc¨ªa, se?al¨® la importancia que tiene dotar a las ordenanzas municipales de la necesaria categor¨ªa normativa, ya que si cualquier reglamento est¨¢ por encima de las ordenanzas, la autonom¨ªa municipal s¨®lo ser¨¢ una entelequia. Consider¨® b¨¢sico, por otra parte, que la ley permita a los ayuntamientos dotarse de sus propias cartas municipales, que vendr¨ªan a ser algo as¨ª como sus propios modelos de funcionamiento.

Por parte delPTE, Santiago Gil aport¨® la idea de que la autonom¨ªa debe tambi¨¦n ir acompa?ada de una profunda reestructuraci¨®n del actual mapa municipal, heredado, a su juicio, del Estado centralista napole¨®nico, que favoreci¨® el minifundismo de los ayuntamientos para potenciar el poder central. Defendi¨® la tesis de que hay que ir a unos ayuntamientos de mayores dimensiones, con capacidad financiera para abordar las necesidades de servicios.

Participaci¨®n vecinal

Los cuatro partidos estuvieron tambi¨¦n de acuerdo a la hora de reconocer que una aut¨¦ntica democracia municipal exige la participaci¨®n de los vecinos, aunque la forma en que debe canalizarse este tema es objeto de discrepancias, incluso dentro de la misma izquierda.Los representantes de las federaciones provinciales de asociaciones de vecinos de Madrid y Barcelona, Fernando Martos y Carles Prieto, apuntaron fundamentalmente a UCD como culpable de que no se haya podido desbloquear la participaci¨®n vecinal, por el retraso en el debate de la nueva ley y por las trabas puestas a algunas f¨®rmulas ensayadas. No obstante, PSOE y PCE fueron acusados tambi¨¦n de frenar en determinadas ocasiones al movimiento vecinal y, de no afrontar el tema con valent¨ªa, en contra de sus propias promesas electorales.

El concejal centrista Jos¨¦ Mar¨ªa Palacios se sum¨® al coro de acusaciones a la izquierda y calific¨® de falso que para afrontar la participaci¨®n haya que esperar a la nueva ley. De todos modos, dijo: ?Me resulta chocante que el ayuntamiento de izquierdas hable tanto de participaci¨®n cuando tiene relegados y se la niega a veinticinco concejales de UCD, que representan medio mill¨®n de votantes. ?

La comunista Isabel Villalonga dijo que mientras llega la nueva ley se puede conseguir una alternativa, interpretando las lagunas de la legislaci¨®n vigente a trav¨¦s de las cartas municipales. El concejal socialista Angel Hern¨¢ndez, delegado de Acci¨®n Vecinal en Madrid, anunci¨® que el panorama en la capital cambiar¨¢ radicalmente en los pr¨®ximos seis meses con el decreto de descentralizaci¨®n de juntas municipales, lo que obligar¨¢ a modificar el esquema org¨¢nico del Ayuntamiento.

En la ¨²ltima mesa redonda, celebrada el viernes, se expusieron algunos ejemplos de participaci¨®n popular en los ayuntamientos. El alcalde de Aranjuez, Eduardo Garc¨ªa (PTE), dijo que la participaci¨®n vecinal en su ayuntamiento no ha sido hasta ahora muy activa, pese a que la carta municipal da voz a los vecinos en los plenos.

Id¨¦ntica f¨®rmula se aplica en Fuenlabrada, donde el gobernador civil lleg¨® a suspender un acuerdo por entender que la intervenci¨®n de los vecinos en el pleno pod¨ªa suponer una coacci¨®n. ?Afortunadamente?, explic¨® el alcalde, Manuel de la Rocha (PSOE), ?el juez no opin¨® del mismo modo, y anul¨® la decisi¨®n del gobernador. ? El alcalde subray¨® tambi¨¦n que hay otra forma de participar, que es la de movilizarse cuando las necesidades no se resuelven. ?Los municipios que m¨¢s cosas consiguen?, dijo, ?son los que m¨¢s presionan, los que tienen una mayor capacidad de movilizaci¨®n. ?

Cerr¨® las jornadas el presidente de la Diputaci¨®n madrile?a, Carlos Revilla, quien se?al¨® que el organismo que preside est¨¢ dispuesto a coordinar y fomentar todas las acciones municipales que tiendan a acentuar la solidaridad comarcal.