Reflexiones sobre el 28 de febrero, a los dirigentes de UCD

El pr¨®ximo d¨ªa 28 la joven democracia espa?ola se va a encontrar con uno de los problemas fundamentales para demostrar su consolidaci¨®n. El d¨ªa 28 de febrero los andaluces vamos a votar si aceptamos la v¨ªa del art¨ªculo 151 para nuestra autonom¨ªa. De vital importancia es, porque por primera vez en la historia de Espa?a se acepta el reto de construir una autonom¨ªa plena para un pueblo que no est¨¢ incluido en ninguna de las nacionalidades hist¨®ricas. Donde no lleg¨® la anterior Constituci¨®n democr¨¢tica, la de 1931, podemos llegar ahora los andaluces y comenzar as¨ª la v¨ªa hacia nuestro autogobierno.La Junta de Andaluc¨ªa, y con ella los partidos que la conforman, que son los que tienen representaci¨®n parlamentaria en nuestro pueblo, hab¨ªamos seguido un camino de unidad, motivado por la clara conciencia que ten¨ªamos todos de que necesit¨¢bamos la autonom¨ªa plena por la v¨ªa m¨¢s segura en el marco de una Espa?a solidaria.

El partido del Gobierno, UCD, incomprensiblemente, y por razones que nunca ha explicado, est¨¢ intentando ahora ralentizar el proceso auton¨®mico andaluz y desvirtuar su propia naturaleza. Es curioso, y al mismo tiempo indignante, observar c¨®mo -miembros destacados de este partido, que hasta ayer defendieron la v¨ªa del art¨ªculo 151, hoy han tenido que desdecirse y, lo que es peor, funda

mentar su postura en argumentos falaces para explicar la nueva actitud tomada por su ejecutiva en Madrid.

Sonrojante es observar c¨®mo se dice que Andaluc¨ªa no puede tener un gobierno de izquierda, cuando precisamente nuestra experiencia pol¨ªtica demuestra que la Junta de Andaluc¨ªa ha sido un ¨®rgano de integraci¨®n donde se ha hecho una pol¨ªtica apoyada por todos los partidos que la componen.

Sonrojante es observar que UCD diga que nos estamos cuestionando el modelo de sociedad de Andaluc¨ªa (incluso un alto cargo del Gobierno ha llegado a decir que votar ?s¨ª? es votar la colectivizaci¨®n de Andaluc¨ªa), cuando los andaluces votamos masivamente la Constituci¨®n, la acatamos y sabemos perfectamente qu¨¦ modelo de sociedad se establece en ella. Y a¨²n m¨¢s que sonrojante es ver intervenciones de destacados l¨ªderes y anuncios oficiales del propio partido gubernamental diciendo frases como ?este no es tu refer¨¦ndum, es un refer¨¦ndum marxista?, como si a una consulta popular legalmente establecida en la Constituci¨®n se la pudiese tildar con semejantes adjetivos. Con ellos demuestra hasta qu¨¦ punto est¨¢n vivos en UCD los mecanismos que la dictadura utiliz¨® para asustar al pueblo. Y, se?ores de UCD, el problema de Andaluc¨ªa no es un problema de enfrentamiento derecha-izquierda; es el problema de un pueblo que quiere autogobernarse y que ha sido consciente de la necesidad de ello, precisamente mucho m¨¢s por el abandono y la marginaci¨®n a la que hemos estado sometidos por el centralismo que por factores de identidad cultural, ¨¦tnica, etc¨¦tera.

Los socialistas andaluces, que estamos realizando un importante esfuerzo por que nuestro pueblo diga ?s¨ª? el pr¨®ximo 28 de febrero, no hemos tratado de enfrentarnos al Gobierno de Madrid desde una perspectiva de partido.

Los socialistas andaluces, a pesar de que por tener las m¨¢ximas responsabilidades en la Junta podr¨ªamos haber intentado hacer nuestra pol¨ªtica espec¨ªfica, vamos de la mano de todos los grupos pol¨ªticos parlamentarios andaluces, porque somos conscientes de que estamos viviendo un momento constitucional para Andaluc¨ªa. Y al igual que defendimos para la elaboraci¨®n de la Constituci¨®n espa?ola el consenso entre grupos pol¨ªticos que facilitase un texto legal que acabase con las dos Espa?as, con la hist¨®rica din¨¢mica de vencedores y vencidos, queremos un Estatuto de Autonom¨ªa que garantice a todos los ciudadanos andaluces la defensa de su identidad como pueblo, el mejor aprovechamiento de sus recursos y sirva de marco de concordia entre todos; queremos una Asamblea legislativa con los m¨¢s amplios poderes de autogobierno que concede la vigente Constituci¨®n espa?ola, sin perjuicio de cu¨¢l sea la correlaci¨®n pol¨ªtica y la composici¨®n del Parlamento andaluz; queremos, en definitiva, un Estatuto de Autonom¨ªa que nos permita hacer una pol¨ªtica propia, que nos sirva de instrumento para resolver nuestros problemas dentro de? marco solidario del Estado.

Por todo ello nos hemos rebelado ante la actitud del partido del Gobierno; por todo ello estarnos trabajando para conseguir el resultado afirmativo, a pesar de que somos conscientes de que las continuas trabas que nos est¨¢n poniendo, la mayor parte de las veces reprochables desde una perspectiva democr¨¢tica, nos lo han puesto muy dif¨ªcil. Pero seguiremos trabajando con ilusi¨®n para que nuestro pueblo se pueda expresar en libertad el pr¨®ximo d¨ªa 28, porque, se?ores de UCD, los andaluces no estamos asaltando el Estado. Los andaluces queremos una Espa?a fuerte compuesta de pueblos maduros y solidarios que trabajen en la gran tarea com¨²n de llenar de contenido la Constituci¨®n.

Nuestra Espa?a, la Espa?a democr¨¢tica, la Espa?a de hombres libres, la Espa?a constitucional, enterr¨® el pasado d¨ªa 6 de diciembre de 1978 el modelo jacobino y centralista de Estado, y lo que queremos, como socialistas y como andaluces, solamente es construir el nuevo Estado, el que define nuestra Constituci¨®n: el Estado de las autonom¨ªas.