La izquierda teme el alto abstencionismo de Huelva

A poco de entrar por carretera en la provincia de Huelva aparece una peque?a poblaci¨®n rural, Manzanilla, completamente cubierta de banderas andaluzas. En pocas de las modestas casas que se asoman a la nacional, donde obreros en paro venden palmitos y esp¨¢rragos a los automovilistas, falta la verde, blanca y verde, y numerosas esquinas se encuentran revestidas de carteles y murales. Pero la impresi¨®n es enga?osa.Unos kil¨®metros m¨¢s adelante se comprueba que el ambiente general en la provincia no es precisamente c¨¢lido a pocos d¨ªas del refer¨¦ndum auton¨®mico. En el cielo de San Juan del Puerto las presuntas banderas han sido sustituidas por el humo negro y hediondo que sale de la f¨¢brica de celulosa ma?ana, tarde y noche. Tampoco en Huelva capital la vida ciudadana parece alterada por la campa?a.

S¨®lo la ?fiesta de la autonom¨ªa?, celebrada el jueves, y la presencia del presidente de la Junta, Rafael Escuredo, han dado cierta viveza a la campa?a. A varios miles de j¨®venes -la mayor¨ªa, sin derecho al voto- que casi llenaban el pabell¨®n de deportes, el presidente les invit¨® a llevar a sus padres y hasta a sus abuelos a votar el d¨ªa 28, y lo cierto es que el p¨²blico aplaudi¨® a rabiar y encendi¨® mecheros y cerillas, cuando se apagaron las luces, al o¨ªr el himno andaluz.

Escuredo sab¨ªa lo que se dec¨ªa, porque el problema central de Huelva es su fuerte ¨ªndice de abstencionismo, que lleg¨® al 35,6% en marzo de 1979, el porcentaje m¨¢s alto de toda Andaluc¨ªa. Si a ello se une la alta votaci¨®n alcanzada por UCD, sobre todo en la costa y en el condado, y los defectos del censo (muchos que emigraron a la capital contin¨²an inscritos en sus pueblos) se comprende el moderado pesimismo que los l¨ªderes pol¨ªticos expresan en privado.

P¨²blicamente, las opiniones son bien diferentes. Para Jenaro Garc¨ªa (PSOE), ?alcanzaremos pr¨¢cticamente el mismo porcentaje de votos afirmativos que en el resto de Andaluc¨ªa, aunque con honestidad tengo que decir que no s¨¦ si ser¨¢ suficiente?, a?adiendo que ?firmar¨ªa ahora mismo un 45% de abstenciones, porque eso significar¨ªa que ganaremos, ya que los votos negativos van a ser m¨ªnimos?. Desmiente, de otro lado, la impresi¨®n de que los socialistas est¨¢n haciendo una campa?a l¨¢nguida en Huelva.

Antonio del Valle (PCA) confes¨® a EL PA?S que la afluencia de p¨²blico a los actos est¨¢ siendo muy desigual, coincidiendo con todos los partidos en que la capital se est¨¢ dando mucho peor que los pueblos. Seg¨²n Emilio Lechuga (PSA), sacar adelante el refer¨¦ndum en Huelva va a ser casi tan dif¨ªcil como en Almer¨ªa. Con respecto a las preocupaciones que expresa la gente en las mesas redondas y coloquios de estos d¨ªas, parecen centradas en el coste econ¨®mico de la autonom¨ªa y en el peligro de creaci¨®n de una nueva burocracia.