Esta
no es la Viena de preguerras, pero en esa ciudad ahora pac¨ªfica y casi dormida siguen pasando cosas a veces. Por ejemplo, ayer, un joven vien¨¦s, Friedrich F, tom¨® desnudo el tranv¨ªa, y m¨¢s tarde, preguntado por los polic¨ªas y psiquiatras, dir¨ªa que es ,que ?se le hab¨ªa olvidado vestirse?. Es que esta Viena ya no es la que era, los hombres de treinta a?os acaban en los manicomios y las se?oras se escandalizan y llaman a la polic¨ªa cuando ven a alguien sin ropa y la sombra de Freud apenas se siente en la ciudad, cuna del psicoan¨¢lisis.
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