"Hay que estrechar lazos culturales entre Espa?a y Portugal"

El director del departamento de museos y exposiciones de la Fundaci¨®n Gulbenkian, de Lisboa, se?or Xomer de Ribeiro, ha pasado por Madrid para ultimar los contactos con Pablo Serrano, de quien se har¨¢ en la fundaci¨®n portuguesa una importante exposici¨®n antol¨®gica. ?Este es uno de los primeros pasos que damos para estrechar el conocimiento cultural entre Espa?a y Portugal?, dijo a EL PAIS el directivo de la Fundaci¨®n Gulbenkian.

La Fundaci¨®n Gulbenkian, una de las m¨¢s importantes del mundo por su actividad y por su papel en la cultura de su pa¨ªs, es una donaci¨®n a la ciudad de Lisboa por el millonario y coleccionista de arte M. Gulbenkian, quien lleg¨® a Lisboa ?durante la guerra, y trajo consigo y fue acrecentando una importante colecci¨®n de arte. A su muerte, y por decisi¨®n testamentaria, dej¨® esa fundaci¨®n, con cuatro fines principales: de promoci¨®n art¨ªstica, cient¨ªfica, educacional y propiamente asistenciales. Pod¨ªa mantenerla porque al se?or Gulbenkian se le conoce como monsieur cinq pour cent (el se?or cinco por ciento), porque, literalmente, pose¨ªa ese porcentaje del negocio del petr¨®leo?.El se?or Ribeiro se ocupa seg¨²n sus propias palabras, ?del departamento de exposiciones, que incluye tambi¨¦n la construcci¨®n y dotaci¨®n de un nuevo museo para la fundaci¨®n, dedicado al arte contempor¨¢neo?.

Seg¨²n el se?or Ribeiro, en este momento la Fundaci¨®n Gulbenkian cuenta con cuatro departamentos distintos: uno de m¨²sica, que mantiene una orquesta fija con 45 profesores; un ballet propio y un coro que ha merecido numerosos premios internacionales. El servicio del museo mismo, que concede becas y ayudas a artistas y especialistas diversos; el de exposiciones y arte contempor¨¢neo, que se ocupa de la extensi¨®n en Lisboa de la obra de los m¨¢s importantes artistas del mundo, y de los contactos en este sentido con otras fundaciones; un servicio de publicaciones con una revista propia, y ayudas subsidiarias para la edici¨®n de libros, y un servicio igualmente propio de bibliotecas, fijas y circulantes por todo Portugal, que durante el curso pasado arrojaron una cifra de seis millones de lectores. ?Esta es tal vez la labor m¨¢s silenciosa y m¨¢s seria de la fundaci¨®n. Comenzamos con las bibliotecas cuando se consideraba que el nuestro era un pueblo pobre e inculto, incapaz de vivir en democracia. Nosotros sab¨ªamos hace ya muchos a?os que no era as¨ª. Por eso juzgamos tan necesario traer a Lisboa a los artistas importantes, apoyar a los propios con becas, facilitar los estudios y publicaciones, comprando ediciones para nuestras bibliotecas, y extender la cultura mediante estos sistemas circulantes?.

Se queja el se?or Xomer de Ribeiro de que es muy importante el abismo que ha separado a las culturas espa?ola y portuguesa, que, seg¨²n ¨¦l, ?han tenido siempre m¨¢s relaci¨®n con Par¨ªs y Londres que con Madrid y Lisboa. En este sentido esperamos estrechar relaciones con las fundaciones Mir¨® y Juan March, y con la misma Administraci¨®n espa?ola?.

En cuanto al nuevo museo de la Fundaci¨®n Gulbenkian, se concibe ?como un centro de investigaci¨®n en las nuevas t¨¦cnicas y en las nuevas corrientes est¨¦ticas, adem¨¢s de contar con un museo propio?. Hablando de presupuestos, dijo: ?La cultura no es tan cara como parece. Naturalmente, aunque las adquisiciones de obras s¨ª son fabulosas, el resto se puede ir haciendo con no much¨ªsimo dinero...?.