La radio, Neil Young y los pasillos-sorpresa

El Festival de Cannes comienza a entrar en esa fase en la que la confusi¨®n se convierte paulatinamente en la reina de la casa. La proyecci¨®n ininterrumpida de pel¨ªculas, ruedas de prensa, fiestas de presentaci¨®n y excursiones, convierten a la ciudad y a sus ciudadanos ocasionales en miembros de una gigantesca troupe que corre enloquecida de un sitio para otro y a la que peri¨®dicamente le asaltan dudas sobre su quehacer. Si una ma?ana de estas soltaran unos cuantos toros por La Croisette, lo m¨¢s probable es que el personal se colocara los pa?uelos rojos de San Ferm¨ªn sin inmutarse.

La secci¨®n de concurso contin¨²a su marcha mon¨®tona y aburrida; probablemente hoy, mi¨¦rcoles, levante un poco el vuelo con el filme de Akira Kurosawa Kagemusha. La proyecci¨®n, fuera de concurso, de Lightning over water, de Wim Wenders y Nicholas Ray, promete tambi¨¦n el suficiente alimento espiritual para que los cin¨¦filos contin¨²en si¨¦ndolo. En cualquier caso, el inter¨¦s cinematogr¨¢fico se centra en otras secciones.La Semana Internacional de la Cr¨ªtica francesa proyect¨® la pel¨ªcula del alem¨¢n Ulrike Ottinger Aller jamais retour, Interesante canto al alcohol en el que una joven arist¨®crata decide abandonarlo todo para llegar a Berl¨ªn y recorrer el largo camino hacia el infierno con una botella en la mano.

La intervenci¨®n de una especie de coro brechtiano, que recita con constancia datos estad¨ªsticos sobre lo pernicioso de la bebida, consigue ese distanciamiento tan querido por el dramaturgo, pero tan poco cinematogr¨¢fico. En cualquier caso, el filme resulta mucho m¨¢s interesante que buena parte de la secci¨®n oficial.

Monoton¨ªa de la vida cotidiana

En la Quincena de los Realizadores se exhibi¨® la por ahora mejor pel¨ªcula de cuantas llevamos vistas: Radioon, de Christopher Petit, interpretada por David Beames y Liza Kreuzer, coproducida por Gran Breta?a y la empresa del omnipresente Wim Wenders y con m¨²sica de David Bowie, Robert Fripp, lan Dury, Draftwerk y Devo, entre otros Radioon es una pel¨ªcula que de alguna forma entronca con Carretera asfaltada en dos direcciones y Alicia en las ciudades, por citar tan s¨®lo un par de ejemplos. Vuelve a surgir ese concepto del cine como reflejo de la vida cotidiana, en la que pr¨¢cticamente no ocurre nada, salvo el propio desgaste del tiempo. Realizada en blanco y negro, Radioon muestra esa monoton¨ªa de la vida tan pr¨®xima para quienes apenas creen ya en nada, salvo en la propia incredulidad. Pel¨ªcula de y para outsiders de cualquiera de los tinglados autoconmiserativos que imperan por el mundo.Giuseppe Bertolucci, hermano de Bernardo, present¨® su filme Oggetti Smarriti, subtitulado Una mujer italiana, con Mariangela Melato y Bruno Ganz en los papeles principales. Cualquier referencia familiar es pura coincidencia gen¨¦tica.

Aviso urgente para los amantes de la m¨²sica pop: Neil Young es capaz de aguantar un concierto de dos horas, en el que al menos la mitad del mismo se lo pasa completamente solo con una guitarra y una arm¨®nica. Las multitudes le aclaman y siguen como a un nuevo mes¨ªas. Cuando intervienen los Crazy Horse, el rock inunda el escenario y Nell Young, pese a todo, sigue la marcha como un quincea?ero. La pel¨ªcula se titula Rust never sleep y es la demostraci¨®n palpable de que existen seres especiales que se alimentan exclusivamente de m¨²sica.

Proyecci¨®n especial para los cr¨ªticos

La direcci¨®n del festival ha tenido a bien sorprender a la Prensa acreditada con una proyecci¨®n especial de la que no se sab¨ªa nada hasta el momento de iniciarse. Stalker, del sovi¨¦tico Andrei Tarkovski, ocupa la palestra. Media hora despu¨¦s de surgir en la pantalla las im¨¢genes, los oscuros pasillos de la sala acog¨ªan cari?osamente a parte de los sorprendidos cr¨ªticos, camino de la salida. Fue toda una sorpresa.