Cossiga y Andreotti testifican ante la "comisi¨®n Moro"
A los dos a?os exactos del asesinato de Aldo Moro por las Brigadas Rojas ha tenido lugar la primera reuni¨®n de la comisi¨®n parlamentaria encargada de hacer una ¨ªnvestigaci¨®n a fondo sobre el clamoroso ?caso Moro?. Dos a?os de espera porque las fuerzas pol¨ªticas no consegu¨ªan ponerse de acuerdo, primero, sobre la oportunidad de una investigaci¨®n parlamentaria, y, despu¨¦s, sobre la composici¨®n de la comisi¨®n.Por fin, ayer empezaron a desfilar ante la comisi¨®n los principales protagonistas pol¨ªticos del tiempo de la tragedia. Abri¨® la serie el entonces presidente del Consejo, Giulio Andreotti: ?No tratar con los terroristas era, y permanece a¨²n hoy, un deber?, empez¨® diciendo Andreotti, el cual a?adi¨® que la l¨ªnea ?dura? del Gobierno fue tomada exactamente a las once de la ma?ana del 16 de marzo, es decir, dos horas despu¨¦s del secuestro de Aldo Moro y del asesinato de los cinco hombres de su escolta.
A Andreotti sigui¨® como testigo Francesco Cossiga, actual presidente del Gobierno y entonces ministro del Interior, que dimiti¨® el d¨ªa en que Moro fue hallado muerto: tambi¨¦n Cossiga afirm¨® que ?pactar con las Brigadas Rojas hubiera sido un gravisimo error?.
Oficialmente, la Prensa no ha sido admitida para escuchar a estos ilustres testigos. La excusa ha sido el ?secreto procesal?. El malhumor ha sido general, y hubo, en seguida, quien aleg¨® el respeto que se debe a la informaci¨®n en un pa¨ªs democr¨¢tico y gracias a la cual hoy se saben muchas cosas sobre el caso Moro.
Andreotti entreg¨® tambi¨¦n a la comisi¨®n una carta in¨¦dita de Moro a Pablo VI, la cual provoc¨® despu¨¦s la famosa carta del Papa Montini ?a los hombres de las Brigadas Rojas? pidi¨¦ndoles ?de rodillas? que salvaran a su amigo Moro.
Otra carta in¨¦dita es la de Gadafi a la familia de Moro, expresando su ?solidaridad?, la cual ha sido interpretada como un modo de allanar las negociaciones entre el terrorismo italiano y Libia.
Andreotti, en sus cuatro horas de declaraciones, desminti¨® la afirmaci¨®n de la viuda de Moro, seg¨²n la cual, a su marido le hab¨ªa sido negado un coche blindado a pesar de que lo hab¨ªa pedido; neg¨® tambi¨¦n el ex presidente del Gobierno que Moro hubiera recibido ?consejos? para retirarse de la pol¨ªtica, precisamente d¨ªas antes de su secuestro.
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