La confirmaci¨®n norteamericana, frustrada
Si los Juegos se hubiesen disputado hace m¨¢s de dos a?os s¨®lo tendr¨ªan que haber lamentado la ausencia japonesa, para el concurso masculino, aunque se haya convertido en una superpotencia ven¨ªda a menos. Pero ahora, al no poder contar con la irrupci¨®n de la pujante gimnasia norteamericana, tambi¨¦n en hombres, sobre todo, este deporte perder¨¢ mucho inter¨¦s. El dominio sovi¨¦tico masculino y la lucha rumano-sovi¨¦tica -con la RDA, tercera en discordia- en mujeres -aun con ni?as-maravilla o Nadia Comaneci en liza- bajar¨¢ muchos enteros en su aliciente.Jap¨®n gan¨® el concurso masculino por equipos en Montreal, m¨¢s dos medallas de oro, cuatro de plata y tres de bronce individuales -la URSS, plata por equipos, cuatro, tres y una- En los mundiales de 1978 (Estrasburgo) los nipones a¨²n mantuvieron el t¨ªtulo colectivo y lograron tres, dos y una medallas individuales -la URSS, segunda nuevamente, dos, tres y dos-. Ya en los mundiales de Forth Worth, en su propia casa, los norteamericanos, con sus figuras Thomas y Conner a la cabeza, parecieron tomar el relevo contra la URSS: bronce por equipos, obtuvieron nada menos que tres medallas de oro, dos de plata y una de bronce -la URSS, ya ganadora del t¨ªtulo porequipos, por delante de Jap¨®n, que aparte s¨®lo consigui¨® un tercerpuesto individual, logr¨® otras tres medallas de oro, dos de plata y tres de bronce-. Estados Unidos ya hab¨ªa avisado, en Estrasburgo.
A se?alar, por otra parte, que la ausencia de la gimnasia china tambi¨¦n se dejar¨¢ sentir en Mosc¨², cuando estaba ya muy cerca actualmente de la japonesa.
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