Italia recuper¨® su fuerza del ¨²ltimo mundial

Italia recuper¨® en Tur¨ªn la fortaleza que tuvo en el pasado mundial. Enzo Bearzot, contra viento y marea, sostuvo la alineaci¨®n del primer partido, con el solo cambio de Cabrini por Benetti, que tambi¨¦n efectu¨® sobre la marcha ante Es como lateral izquierdo y a Benetti en el centro del campo.Italia, que jug¨® con miedo en el primer tiempo, a pesar de que domin¨® territorialmente, se lanz¨® a un pressing continuo en la segunda mitad y acab¨® por lograr la victoria cuando el empate parec¨ªa inamovible.

Italia e Inglaterra jugaron de poder a poder. Italia quiso dominar m¨¢s la pelota, pero abus¨® durante mucho tiempo del horizontalismo. S¨®lo cuando se decidi¨® a atacar con m¨¢s decisi¨®n pudo llegar al ¨¢rea de Shilton en situaci¨®n ventajosa. Greenwood, que tampoco qued¨® satisfecho del juego de su equipo en la confrontaci¨®n con B¨¦lgica, recurri¨® a sustituir no s¨®lo a Clemence por Shilton, sino a colocar delante, en el puesto de Johnson, al centro delantero del Nottingham, Birtles, y a Kennedy en la l¨ªnea media por Brooking.

Los ingleses tuvieron dominado el centro del campo la mayor parte del tiempo, pero en el contragolpe fueron inferiores a Italia. Los transalpinos hicieron un derroche de fuerza tremendo. Corrieron hasta la extenuaci¨®n. Las cr¨ªticas recibidas el pasado mi¨¦rcoles parece que les sirvieron de acicate. A tres minutos del final del primer per¨ªodo, Bettega y Graziani fallaron un gol cantado, y el propio Graziani, en la segunda parte, y Scirea, por dos veces, fallaron las mejores oportunidades. Los ingleses, que tuvieron a Keegan muy marcado por Tardelli y a Woodcock por Gentile, realmente no crearon otra ocasi¨®n de gol que la de Keegan en el minuto 65 y la del minuto 89, en la que el empate fue posible.

Italia se reivindic¨® ante su p¨²blico con una actuaci¨®n mucho m¨¢s convincente que la que tuvo contra Espa?a. Los ingleses., que tradicionalmente han sido dif¨ªciles adversarios para los italianos -¨¦stos solamente hab¨ªan ganado tres de los trece encuentros disputados y la primera victoria no lleg¨® hasta 1973-, no supieron contrarrestar la potencia f¨ªsica y la inspiraci¨®n de muchos momentos de los Antognoni, Tardelli y Benetti.

Italia gan¨® con todo merecimiento y ha recuperado las posibilidades de disputar la final. Para ello tendr¨¢ que ganar a B¨¦lgica, empresa que no se advierte f¨¢cil, pero que podr¨ªa producirse sin el sufrimiento del domingo si fuera capaz de sostener el ritmo detonante que tuvo en Tur¨ªn.

El mantenimiento del equipo base le volvi¨® a dar buenos resultados a Bearzot. Italia tiene altibajos, como todos los equipos, pero, mientras pueda mantener la selecci¨®n actual podr¨¢ dar un tono aceptable; el drama de muchas selecciones, incluida la nuestra, es precisamente no contar con una mayor¨ªa estable.

Tras esta victoria ha renacido el optimismo entre los seguidores italianos, un tanto deca¨ªdos tras la p¨¢lida actuaci¨®n de su equipo ante Espa?a.