"La mejor cualidad, y a Ia vez el peor defecto de Felipe Gonz¨¢lez es su generosidad"
Felipe Gonz¨¢lez. Un hombre a la espera es el t¨ªtulo de un largo reportaje biogr¨¢fico que acaba de publicar la Editorial Planeta, escrito por Eduardo Chamorro y dedicado al an¨¢lisis pol¨ªtico y humano del secretario general del Partido Socialista Obrero Espa?ol.
?Probablemente, la mayor dificultad que tuve para escribir el libro?, declar¨® Eduardo Chamorro a EL PAIS, ?fue la de intentar una cierta amenidad a las historias que me contaba el personal sobre la figura de Felipe. Todos ellos se pon¨ªan muy serios y profesionales cuando narraban hechos. Lo cierto es que, a lo largo de los ocho meses que dediqu¨¦ al libro, me llamaban espont¨¢neos cont¨¢ndome historias de Felipe absolutamente surreales y disparatadas, que, en realidad, ten¨ªan muy buena apariencia. Cuando me pon¨ªa a investigarlas o intentaba contrastarlas, se convert¨ªan en humo. A pesar de ello, pienso que se ha conseguido sacar a la luz an¨¦cdotas bastante curiosas y notables de los personajes que influyeron en el desarrollo del partido en los ¨²ltimos veinticinco a?os?.?Por ejemplo, creo que una an¨¦cdota divertida es la de que Alfonso Guerra, mucho antes de que se produjera la escisi¨®n en el PSOE entre hist¨®ricos y renovados, entre los a?os 1972 y 1974, siempre trat¨® a Llopis, que era secretario general, de se?or, nunca de compa?ero, t¨¦rmino m¨¢s frecuente entre los militantes, para mayor enfado de don Rodolfo. Creo que en el libro se pone de manifiesto la tortuosa peripecia pol¨ªtica de Tierno Galv¨¢n, la curiosa peripecia de M¨²gica, el cari?o de Rubial por Felipe, el apoyo de Llopis por parte de la masoner¨ªa y el intento de captaci¨®n hacia el PCE de la Asociaci¨®n Socialista Universitaria (ASU), en el a?o 1956, intento comandado por Jorge Sempr¨²n ?.
Generoso
?A mi juicio, Felipe Gonz¨¢lez tiene una gran cualidad, que, a su vez, es su gran defecto: es muy generoso. Es un hombre que est¨¢ en la pol¨ªtica por razonamientos te¨®ricos, pero tambi¨¦n por un impulso ¨¦tico, y este impulso predomina sobre cualquiera de las otras componentes y produce el fen¨®meno de un caballero que se rige, en primer lugar, por el coraz¨®n, y despu¨¦s, por la cabeza. Esto, que probablemente explica la fascinaci¨®n que produce sobre sus seguidores, es tambi¨¦n el origen de su padecimiento a la hora de ejercer su autoridad?.En la introducci¨®n del libro, el autor se?ala y agradece la colaboraci¨®n recibida por parte de numerosas personas, a la vez que lamenta la falta de colaboraci¨®n de otras. Precisamente, sobre estas ¨²ltimas personas gira la siguiente pregunta.
?Como casos notables de irresponsabilidad en sus relaciones con la Prensa, y m¨¢s concretamente conmigo y con el trabajo que ellos sab¨ªan que estaba haciendo, es de subrayar que G¨®mez Llorente y Francisco Bustelo se negaron radicalmente y de plano a hablar conmigo bajo ninguna circunstancia, sin aducir raz¨®n alguna?.
El libro, de 377 p¨¢ginas, contiene un pr¨®logo del propio Felipe Gonz¨¢lez, una introducci¨®n del autor, nueve cap¨ªtulos y un apartado de ap¨¦ndices, en el que se publican numerosos documentos internos del PSOE y la UGT. Entre ellos, Eduardo Chamorro destaca el informe de Rodolfo Llopis a la direcci¨®n del PSOE, en 1966, con motivo de la expulsi¨®n del partido de Enrique Tierno Galv¨¢n.
Finaliza Eduardo Chamorro sus declaraciones se?alando que ?si yo no me hubiera tirado cinco a?os en Cambio 16, trabajando junto a gente como Cuco Cerecedo y Xavier Domingo, no me hubiera sido posible la realizaci¨®n del libro con el nivel de decencia que creo haber conseguido?.
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