Carter: "Aprecio el papel de los partidos, Gobierno y, oposici¨®n, en el desarrollo y mantenimiento de la democracia espa?ola"
El presidente de Estados Unidos, Jimmy Carter, ha declarado, en una entrevista concedida a la agencia Efe -que EL PA?S ,distribuye en Madrid en exclusiva-, que los partidos pol¨ªticos espa?oles, tanto del Gobierno como de la oposici¨®n, han contribuido positivamente en favor del desarrollo de la democracia en Espa?a. En el curso de la entrevista, realizada por Celso Collazo, el presidente norteamericano elogi¨® la labor del Rey en el proceso democr¨¢tico espa?ol y destac¨® la admiraci¨®n del pueblo americano por el desarrollo del mismo, a la vez que afirm¨® que las relaciones entre Espa?a y Estados Unidos est¨¢n en su mejor momento.
Pregunta: Se?or presidente, la democracia espa?ola sigue en marcha y el pueblo espa?ol aspira intensamente a su consolidaci¨®n.?C¨®mo eval¨²a su Administraci¨®n el papel de Su Majestad el Rey en el desarrollo democr¨¢tico de Espa?a?
?Y el papel de las fuerzas pol¨ªticas?
Respuesta: Aqu¨ª, en Am¨¦rica, nosotros compartimos el deseo del pueblo espa?ol de ver florecer la democracia. La democracia verdadera libera a sus ciudadanos a materializar lo mejor de s¨ª mismos y a requerir la m¨¢s alta honradez de sus Gobiernos.
Ciertamente, como usted sugiere, el papel de Su Majestad ha sido central en el desenvolvimiento de la democracia en Espa?a. Al mismo tiempo, y como corresponde a tina naci¨®n con una vigorosa tradici¨®n democr¨¢tica, no puedo menos que apreciar muy bien el papel vital representado por partidos pol¨ªticos responsables, tanto en posici¨®n de Gobierno y de oposici¨®n, en el desarrollo y mantenimiento de una democracia viable y vigorosa.
Es sumamente importante, desde luego, la determinaci¨®n de tina naci¨®n de mantener sus instituciones libres. Este es un proceso continuo y en Espa?a es un proceso que nuestro Gobierno y nuestro pueblo contemplan con admiraci¨®n y apoyo.
P.: ?Podr¨ªa hacernos usted algunas observaciones generales sobre su viaje a los pa¨ªses mediterr¨¢neos de Europa? ?Cu¨¢l es su programa?
R.: El prop¨®sito inicial fue, desde luego, el de participar en la reuni¨®n cumbre anual econ¨®mica que se celebr¨® este a?o en Italia. Cuando examinaba yo el programa del viaje se me antoj¨® que ser¨ªa una buena oportunidad el aceptar las generosas invitaciones de los Gobiernos de Espa?a, Portugal y Yugoslavia para rendir tambi¨¦n una visita a esos pa¨ªses.
Estas visitas, aunque no tan largas como yo hubiese deseado, me dan una oportunidad para cambiar puntos de vista sobre ciertos temas y en unos tiempos en que las consultas y la cooperaci¨®n entre buenos amigos no son s¨®lo deseables sino tambi¨¦n imperativas.
En meses recientes se han producido acontecimientos cr¨ªticos que afectan a nuestras naciones y a nuestros ciudadanos. La invasi¨®n sovi¨¦tica de Afganist¨¢n acarrea implicaciones estrat¨¦gicas para el bienestar de todas las naciones que aprecian la paz y la independencia. La retenci¨®n de los rehenes por Ir¨¢n amenaza las reglas internacionalmente aceptadas de comportamiento civilizado entre las naciones. Tenemos tambi¨¦n que discutir cuestiones de la defensa y de la seguridad europeas, as¨ª como otras de inter¨¦s regional y bilateral. En suma: el orden del d¨ªa es muy completo.
Me encanta, adem¨¢s, que se me haya dado la oportunidad de expresar personalmente la admiraci¨®n y el apoyo del pueblo americano, tantos de cuyos miembros son de origen hispano, por la hist¨®rica transici¨®n de Espa?a a un Gobierno democr¨¢tico. Esta evoluci¨®n ha sido llevada a cabo con madurez y sensibilidad.
Es uno de los m¨¢s inspirados acontecimientos pol¨ªticos de nuestra generaci¨®n.
Anticipo con placer el volver a reunirme con Su Majestad el Rey y con el presidente Su¨¢rez, a quienes ya he tenido el honor de recibir en la Casa Blanca, y tambi¨¦n con otros funcionarios y ciudadanos espa?oles.
Desde el punto de vista personal, mi esposa y yo guardamos desde siempre un gran respeto y admiraci¨®n por la vida y la cultura espa?olas y nos encanta el tener esta oportunidad de rendir, al fin, una visita a Espa?a.
P.: ?C¨®mo valora usted en estos momentos las relaciones entre Estados Unidos y Espa?a y qu¨¦ papel ve usted para Espa?a en Europa y en el mundo occidental?
R.: Las relaciones entre Espa?a y Estados Unidos son mejores que en ning¨²n otro momento de memoria reciente. Como democracias que comparten intereses y percepciones comunes, nuestros dos pa¨ªses se consultan frecuentemente sobre los desaf¨ªos que afrontan hoy al mundo. Trabajamos juntos en muchos terrenos -pol¨ªtico, militar, econ¨®mico- y nuestra cooperaci¨®n se ha intensificado con el advenimiento de la democracia espa?ola.
Este c¨¢lido esp¨ªritu de amistad marca el tenor de mi visita a Espa?a.
Adem¨¢s de ello, estamos atados por lazos de familia y de cultura. Pueblos hispanos de varias procedencias que han asentado sus vidas en Estados Unidos han enriquecido nuestra sociedad de un modo inconmensurable.
Todav¨ªa m¨¢s, Espa?a es una parte integral e importante de Europa y del mundo occidental. Con su rica historia y su cultura, Espa?a ha dado mucho ya a nuestra civilizaci¨®n. Como joven y vibrante democracia tiene mucho m¨¢s que dar todav¨ªa. Este es un papel que nosotros, en Estados Unidos, saludamos y aplaudimos. Prevemos con ilusi¨®n una acrecentada cooperaci¨®n con Espa?a en muchos terrenos en los que podemos laborar juntos para afrontar los desaf¨ªos a nuestros intereses comunes.
P.: Debido a sus lazos hist¨®ricos, Espa?a se siente ligada por una relaci¨®n especial a los pa¨ªses ¨¢rabes y mediterr¨¢neos. ?Podr¨ªa usted comentar estos lazos y los lazos, igualmente estrechos, espa?oles con Am¨¦rica Latina?
R.: En tanto que f¨ªsica y pol¨ªticamente Espa?a es una parte de Europa, dispone, sin embargo, de una perspectiva ¨²nica sobre el mundo ¨¢rabe y mediterr¨¢neo. Las complejas razones de ello se enra¨ªzan en la Historia y la Geograf¨ªa. La herencia resultante ha dotado a Espa?a de un especial entendimiento del mundo ¨¢rabe.
Nosotros comprendemos este hecho y apreciamos la manera en que ello complementa las crecientes relaciones institucionales de Espa?a con Occidente.
Por diferentes pero profundas razones hist¨®ricas, Espa?a tiene una relaci¨®n especial con las naciones de Am¨¦rica Latina, un papel del que Estados Unidos se congratula. El inter¨¦s de Espa?a en los asuntos latinoamericanos, ejemplarizado en su participaci¨®n en el Pacto Andino, es un saludable proceso.
Espa?a tiene un importante papel que jugar en la moderna Am¨¦rica Latina, como fuente hist¨®rica de energ¨ªa cultural y como ejemplo contempor¨¢neo de vigor democr¨¢tico.
P.: La pr¨®xima ronda de conversaciones de la Conferencia de Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa tendr¨¢ lugar en Madrid el pr¨®ximo oto?o. ?Est¨¢ Estados Unidos en favor de que esas conversaciones se celebren como est¨¢ planeado? ?C¨®mo ve usted las perspectivas de la reuni¨®n en general?
R.: Aunque la invasi¨®n sovi¨¦tica de Afganist¨¢n ha da?ado gravemente el clima de las relaciones Este-Oeste, yo considero que la reuni¨®n de Madrid de la CESC es en inter¨¦s de los firmantes del acta final de Helsinki, incluido Estados Unidos.
Nosotros estamos a favor de seguir adelante como estaba planeado.
Estados Unidos -y otros pa¨ªses- va a utilizar la importante oportunidad de la reuni¨®n de la CESC para llamar la atenci¨®n sobre lo bien o mal que los pa¨ªses firmantes han cumplido sus obligaciones desde la cumbre de Helsinki de 1975. Esta revisi¨®n es particularmente importante en lo que respecta a los derechos humanos y las previsiones humanitarias del acta final, en lo que ha habido serios fallos por parte de algunos pa¨ªses en cumplir sus compromisos.
La reuni¨®n de Madrid nos ofrece, adem¨¢s, la ocasi¨®n de alcanzar ulteriores medidas para mejorar el cumplimiento del acta final mediante avances equilibrados en todos los terrenos significativos que afecta. Finalmente, la reuni¨®n podr¨ªa hacer seguro que el proceso de Helsinki prosiga en una serie de futuras reuniones de revisi¨®n semejantes a la planeada para Madrid.
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