Las personas que viven solas tienen m¨¢s riesgos de enfermedad y muerte
?El problema de la soledad es uno de los m¨¢s serios que aquejan a la vida?, ha declarado el profesor Lynch, director cient¨ªfico de la cl¨ªnica psicofisiol¨®gica de la Universidad de Baltimore, profesor de medicina y especialista en procesos psicosom¨¢ticos. El doctor Lynch asegura en su libro recientemente publicado, Coraz¨®n roto: consecuencias m¨¦dicas de la soledad, que la p¨¦rdida de compa?¨ªa de otras personas es uno de los ?principales factores?, no reconocidos, ?en la muerte prematura? de mucha gente.Las estad¨ªsticas que exhibe son concluyentes: el nivel de mortalidad prematura es mucho m¨¢s alto en personas solitarias que entre las que viven con otros. Los resultados de un estudio entre varones de raza blanca, divorciados, de menos de setenta a?os, que viven solos, dan una frecuencia de muerte por paros cardiacos y c¨¢ncer de est¨®mago doble que entre quienes viven acompa?ados. La frecuencia de muerte por hipertensi¨®n es casi tres veces superior entre los divorciados y siete veces mayor la muerte por cirrosis hep¨¢tica.
?Esta evidencia?, seg¨²n la citada investigaci¨®n, ?es similar en personas de otros grupos raciales y sexuales de las mismas caracter¨ªsticas?. Seg¨²n Lynch, un largo per¨ªodo de trastornos emocionales, provocados por la soledad, puede alterar los procesos f¨ªsico-qu¨ªmicos en el organismo humano y aumentar la susceptibilidad a las enfermedades, adem¨¢s de que puede dar lugar a la auto destrucci¨®n del propio comportamiento (desmesurado consumo de tabaco, alcohol, etc¨¦tera).
Por cada 45 hombres casados que permanecen en cl¨ªnicas mentales o instituciones residenciales norteamericanas hay, 2.540 viudos, solteros, divorciados o separados.
El doctor Lynch ataca el mito de la independencia personal como agente causante de la soledad, y asegura que ese mito impide admitir la soledad de muchas personas. Respecto a muchas terapias de grupo, sensibilidad conjunta y otras pr¨¢cticas, a lasque califica de seudocient¨ªficas, opina que son m¨¦todos que ofrecen la soluci¨®n de la ?compra de amigos? para curar la soledad y rescatar el amor. Sin embargo, se muestra impresionado por grupos como alcoh¨®licos an¨®nimos, en los que los propios interesados se ofrecen ayuda desinteresada y en los que el dinero ajeno no est¨¢ en juego.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.