Muchas reuniones paralelas alcanzar¨¢n el nivel ol¨ªmpico
El grave da?o provocado por el boicoteo de m¨¢s de medio centenar de pa¨ªses a los Juegos Olimpicos de Mosc¨² es ya un hecho consumado, y de ah¨ª que los movimientos para organizar competiciones paralelas ?compensatorias? se iniciaran incluso antes de confirmarse aqu¨¦l de forma oficial. Aunque la propuesta de unos Juegos paralelos no prosper¨®, al ir en contra del propio Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional y por la falta de colaboraci¨®n entre los pa¨ªses implicados, reuniones con la importante presencia norteamericana, especialmente en atletismo, y el proyecto de una ?monstruo? a mediados de agosto podr¨¢n alcanzar f¨¢cilmente el nivel ol¨ªmpico.
Una de las primeras reacciones tras la condena de la invasi¨®n sovi¨¦tica de Afganist¨¢n se refiri¨® al deseo de varios Gobiernos -Estados Unidos, Gran Breta?a y Canad¨¢, fundamentalmente- de cambiar la sede de los Juegos. El Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, naturalmente, despu¨¦s de su arriesgada decisi¨®n a?os antes de conceder los Juegos Ol¨ªmpicos de 1980 y 1984 a la URSS y Estados Unidos, con las peligrosas consecuencias de injerencias pol¨ªticas que eso pod¨ªa suponer, no ten¨ªa fuerza moral para variar sus propios reglamentos. Los Juegos se celebrar¨ªan en Mosc¨² o en ninguna parte. En principio, Gran Breta?a incluso present¨® la candidatura de Montreal, y del mismo Estados Unidos surgi¨® la folkl¨®rica propuesta de un pueblo llamado curiosamente Mosc¨², en el Estado de Ohio. El Mosc¨² norteamericano tiene quinientos habitantes, tres cafeter¨ªas-restaurantes y algunos moteles. Eugene Holalland, el alcalde, declar¨® que tambi¨¦n cruzaba su municipio un peque?o r¨ªo, muy apropiado para las pruebas de remo y pirag¨¹ismo, y que, si faltaba estadio para el atletismo, circundaban los alrededores unas colinas muy propiadas para trazar recorridos selectivos.Ya en serio, el New York Daily News public¨®, de medios gubernaentales, una informaci¨®n sobre la intenci¨®n del Pent¨¢gono de financiar la organizaci¨®n de los Juegos en otra ciudad que no fuese Mosc¨². Sin embargo, como el COI declar¨® inmediatamente que dicho cambio no era viable, Estados Unidos se mostr¨® dispuesto a sufragar los gastos de unos Juegos paralelos. En realidad esto tampoco lo iba a admitir el m¨¢ximo organismo oI¨ªmpico, pero la idea era disfrazarlos como una gran reuni¨®n que pudiera tener caracter¨ªsticas de contecimiento ol¨ªmpico.
En abril, representantes de diez gobiernos y observadores de otros dos se reunieron en Ginebra para tratar la posibilidad de organizar dichos Juegos paralelos con los atletas no participantes en Mosc¨². A los l¨ªderes m¨¢s importantes: Lloyd Cutler, de Estados Unidos; Douglas Hurd, secretario adjunto del Foreign Office, de Gran Breta?a, y Robert Ellicott, de Australia, se unieron la misi¨®n brit¨¢nica en la ONU y delegados de Sud¨¢n, Holanda, Kenia, Arabia Saud¨ª, Portugal, Rep¨²blica Dominicana y Costa Rica. Canad¨¢ y Filipinas eran los observadores. Ya el primer d¨ªa, Douglas Hurd, presidente de la reuni¨®n -?movida? con gran inter¨¦s por su premier, Margaret Tatcher-, coment¨® en tono pesimista qi.ie s¨®lo se hab¨ªa tratado de un contacto exploratorio, sin demostrar grandes esperanzas cara al futuro. Era el principio del fin de una idea muerta casi al nacer. Ning¨²n pa¨ªs se quiso atrever a oponerse al COI y a transgredir los principios ol¨ªmpicos.
Soluciones parciales
Las soluciones parciales comenzaron a proliferar a partir de ese momento. A nivel rimbombante, pero con entidad limitada, se han planteado unos Juegos Isl¨¢micos, a d¨ªsputarse en Esmirna, al oeste de Turqu¨ªa -sede de los Juegos Mediterr¨¢neos de 1972-, sin fecha a¨²n fija. Tal idea, apoyada entusi¨¢sticamente por Ir¨¢n en boca de su ministro de Asuntos Exteriores, Sadegh Ghotbzadeh, surgi¨® previamente a la invasi¨®n de Akfganist¨¢n. en la Conferencia de Paises Isl¨¢micos de Islamabad. Quiere conmeniorarse as¨ª, de paso, el siglo XV de la h¨¦gira (era del Islam).
Jap¨®n, por su parte, trata de organizar un torneo de yudo que equivalga a un verdadero torneo ol¨ªmpico, pues considera que su ausencia en los Juegos impedir¨¢ la categor¨ªa de tal al de Mosc¨². La federaci¨®n asi¨¢tica de atletismo tambi¨¦n ha pedido a Jap¨®n que organice para septiembre una reuni¨®n internacional con los pa¨ªses boicoteadores.
A nivel de atletismo es precisamente donde el movimiento es mayor. Las habituales reuniones veraniegas en Europa se han convertido en atracci¨®n fundamental, pues a ellas est¨¢n viniendo ya los atletas seleccionados del equipo norteamericano que iba a acudir a los Juegos. Tras los campeonatos universitarios de Austin, los nacionales de Walnut y las pruebas de selecci¨®n de Eug¨¦ne, todas en el mes de junio, m¨¢s de doscientos, entre los finalistas de Walnut y los tres primeros de Eug¨¦ne, estar¨¢n el 11 de julio en Stuttgart, el 13 en Londres y el 15 en Oslo. Despu¨¦s de los Juegos, pues la Federaci¨®n Internacional (IAAF) prohibi¨® seg¨²n su reglamento, las de Berkeley (California) -17 y 18- y Filadelfia -22 y-23-, al ser ya en plena cita ol¨ªmpica, los norteamericanos ir¨¢n a Roma el 5 de agosto, a Berl¨ªn el 8 y a Zurich el 13. Poco m¨¢s tarde, y posiblemente en Munich, se estudia la reuni¨®n ?monstruo? que pueda servir de mejor escaparate del boicoteo. Otra selecci¨®n americana ir¨¢ tambi¨¦n, en septiembre, al Torneo de las Ocho Naciones de Tokio, y una semana despu¨¦s, a Pek¨ªn.
Los deportistas norteamericanos -y alemanes, l¨®gicamente- estar¨¢n presentes, adem¨¢s, en otras competicinnes: h¨ªpica, en Goodwood (Inglaterra), 17 y 18 de este mes -tras participar en el CSIO de Par¨ªs estos d¨ªas-; Rotterdam, 13 al 17 de agosto, y Fontainebleau, del 21 al 24; boxeo, en Nairobi, del 20 al 24; gimnasia en Washington (o Nueva York), 29 y 30.
El diario moscovita Sovietskaia Rossia se?alaba ayer el fracaso de las reuniones paralelas, pero s¨®lo hac¨ªa hincapi¨¦ en las prohibidas durante los Juegos.El nivel de las que se celebrar¨¢n con atletas americanos en liza ser¨¢ alt¨ªsimo, qui¨¦rase reconocer o no, y ser¨¢ una gran p¨¦rdida su ausencia en Mosc¨².
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